ッᝍ 𝗖𝗿𝗲𝗰𝗲𝗿 • ꒰ hyunin ꒱

𝟯𝟬!!

Jisung observó el cuerpo tendido de Seungmin sobre la cama, con una mueca de preocupación, y además una placa de resignación colgada en el pecho. Es que él era tan amable y se hizo cargo de Seungmin para que Hyunjin y Jeongin tuviesen un tiempo juntos, como el mejor amigo le conocían.

Seungmin murmuraba algunas cosas que no lograba entender muy bien ya que atropellaba las palabras, y movía sus manos como si estuviese hablando con alguien, eso a Jisung le parecía gracioso hasta cierto punto. Cierto punto que marcaba una gran diferencia entre su sentido del humor y la realidad, porque los balbuceos de Seungmin, lo inquietaban un poco, sobre todo si intentaba recrear lo que seguramente estaría pasando entre Jeongin y Hyunjin.

—Jinnie, abrazame, por favor… —balbuceaba el azabache, con sus ojos cerrados y sus mejillas acaloradas, sus manitas acariciaban las sábanas a su alrededor, llamando por alguien que no llegaría esa noche —Jinnie… quiero que estés conmigo, no con Jeongin hyung, Jinnie, yo te amo mucho… —Jisung se preocupó entonces, sobre todo al ver las lágrimas cristalinas deslizarse por el rostro de Seungmin. Algo así estaba muy mal.

Soltó un suspiró y decidió empezar a buscar por algo de ropa más cómoda, no sabía dónde empezar a buscar pues era una habitación desconocida para él, y Seungmin no estaba en condiciones de ayudarlo. Así que tomó una camiseta color negra del primer cajón que abrió, no sabía si era suya o de Hyunjin, pero lo que sea sería mejor que la ropa ajustada que traía puesta.

Se acercó de regreso a la cama, donde se sentó a lado de Seungmin y empezó a desabotonarle la camisa; se sintió como cuando ayudaba a su hermana mayor a cuidar a sus sobrinos bebés, y le tocaba siempre vestirlos después del baño; sólo que Seungmin no era un bebé, o bueno, sí lo era y estaba ebrio.

—Jinnie… —Seungmin suspiraba mientras Jisung hacia su trabajo desabotonando la prenda —Jinnie, bésame… —Seungmin movía su cabeza, con los ojos cerrados y los labios entre abiertos, buscando el contacto de quién creía su subconsciente era Hyunjin. Y Jisung se sintió increíblemente mal, por algo de lo que no tenía culpa alguna.

—Seungmin, yo no soy Hyunjin —habló el castaño, sintiéndose un poco incómodo de que Seungmin estuviera confundiéndose de esa forma. Si bien no conocía a ese par, estaba enterándose de muchas cosas sobre ellos sin sí quiera planearlo —soy Jisung y tu estas muy ebrio, anda, dilo ¿quién soy?

Jisung movió el cuerpo del menor, levantándolo un poco para así poder quitarle la camisa por los brazos y después ponerle la que había conseguido, sólo por el cuello y brazos. Esperó por la consciencia de Seungmin, mientras acomodaba la prenda y además peinaba sus mechones alborotados.

—Sung… —murmuró, cayendo rendido de nueva cuenta a la cama una vez con la camiseta puesta —Jisung… —el nombrado sonrió al escuchar su nombre entre quejidos, ahora por lo menos sabía que Seungmin no estaba del todo perdido.

—Muy bien, soy Jisung y tu eres Seungmin, quién va a dormir como un bebé ¿de acuerdo?... —el castaño procedió a quitarle los zapatos y los calcetines al menor, que había decidido tomarse un momento de silencio, bajo suspiros suaves y jadeos.

Jisung estuvo a punto de decir algo más, algún chiste o algo acerca de que era un buen niñero de adolescentes ebrios, pero su intención se esfumó por completo, cuando levantó la mirada y se encontró con el rostro de Seungmin escondido detrás de sus manos, de repente estaba sollozando y llorando como si Jisung hubiese estado golpeándolo.

—Seungmin… —su voz preocupada atacó los jadeos del menor, inclinándose un poco sólo porque no le gustaba esa manera tan intensa de llorar, no en alguien como Seungmin —Seungminnie, ¿qué pasa?... —confundido se quedó quieto, esperando por la aprobación del menor.