Ahora sé que te Amo

.+.+.Cap.5: Las palabras del corazón.+.+.

.+.+.Para celebrar el cumpleaños de Lan Zhan decidí traerles esta actualización, aunque me tarde, aquí lo tienen, espero les guste.+.+.

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Las energías fluirán de una manera que jamás pensó ver; contemplaba como su versión mayor, junto con el hombre de túnicas blancas; hacian encajar muy bien sus energías, era como si estaban destinados a que su ser interior se juntara con el otro, era maravilloso como el lazo entre ellos era tan deslumbrante. No podía quitar su vista de aquella pareja que conoció en ese futuro no tan malo; se había enterado de tantas cosas, de como su vida a sido siempre de Hanguang-jun, y de que siempre lo sería.

Haber descubierto que el hombre que siempre creyó que lo odia, que no encajaba en nada con él; lo que descubrió fue algo muy hermoso, tan lindo que hacia feliz lo mas profundo de su ser. Ahora conocía el sentimiento del amor, era dichoso por tener a un buen esposo, y lo creía al ver como su otro yo, sonreía de manera sincera, y quien mas que él para conocerse mejor, era perfecto, y lo emocionaba.

Cuando veía el resonar del talismán, era como un fuerte golpe en su pecho, su corazón latía mucho más fuerte, y hasta temía que aquella emoción pudiera matarlo antes de poder llegar con el hombre que deseaba ver en esos momentos.

-"¿Qué me ocurre?"-no pudo evitar que sus mejillas se llenaran de cosquillas; él, el Patriarca Yiling, estaba sintiendo profundas emociones que no conocía, y que ahora lo atacaban.

-...-

Wei Ying veía a su versión mas joven, muy concentrado en lo que hacia, teniendo muchas esperanzas en lo que estaban por hacer, eso hizo reconfortar su ser, y se asombro de ver como quizás al fin había entendido que Lan Zhan era su alma gemela, que siempre estuvo a su lado, y que nunca lo dejaría. Sonrió con una paz bastante agradable, en su vida solo hubo una vez, que de verdad se sintió tranquilo, y fue cuando le confeso sus sentimientos al Lan el cual ahora era su esposo. Ahora podía ver su propia reacción reflejada en la cara de su versión Patriarca, y aquello se sentía calido, agradable, era como una paz en su corazón que completaba todo su ser, fue tan reconfortante, que hubo un momento en que se olvido de lo que estaban haciendo.

-...-sin notarlo había hecho una suave sonrisa, mientras cerraba los ojos, aquello fue como una gran liberación para su corazón lleno de heridas que solo el Lan podía suturar.

No podría dejar de amarlo, aunque lo amenazaran de hacerlo; tanto era su sentir por Lan Wangji que ya no le importaba morir por él; aunque sabía que a su amado esposo no le agradaban esas ideas de volverlo a perder. Sinceramente ya no quería volver a morir, ahora que comprendía que haber hecho sufrir a Lan Zhan por culpa de sus errores que lo llevaron a tanto lamento y tanto dolor, que aquello era una idea muy inaceptable para si mismo, y no volvería a pasar por eso. Su amor por su esposo era mucho más fuerte que cualquier adversidad, y ahora que estaban juntos, lucharían hasta el final, estaban listos para seguir hasta lo último y enfrentar toda clase de conflictos.

De nuevo sonrió, de una sincera y calida manera; estaba muy feliz de sentir que era amado y que podía amar de la misma manera; dichoso era como se sentía. Entre mas veía a su joven versión mas deseaba que éste lograra encontrarse con el Hanguang-jun mas joven, y lograran aclarar, todos sus sentimientos, y pudieran tener un amor desbordado y feliz, que los llevaría a reparar tanto daño, y que los llevaría a una vida tranquila, solo para darse amor, y aumentarlo cada día, tal y como ellos ahora siendo los adultos que son, se demostraban cada día, sin importar el cuerpo, sino el ser que lo caracterizaba y que demostrara que aquella persona estaba en ese lugar para poder dejarse abrazar por fuertes y amorosos brazos; estaba muy enamorado...