Alpha Damián

Capitulo uno.

Mi vida estos últimos días han estado un poco caóticos en la universidad solo se habla de la reunión de alphas que habrá en nuestra manada y no paran de comparar que alpha es mejor y más apuesto. Mentiría si no admitiera que me interesa el tema pero de tanto que lo saturan ya me harte de escuchar sobre eso.

En mi casa es igual, como mi padre es el alpha de nuestra manada Moon Light él está estresado buscando que todo sea lo más presentable posible, mi madre la luna está supervisando que las decoraciones y los preparativos estén bien, puesto que el primer día de estadía los alfas asistirán a un baile de bienvenida y luego al otro día será la reunión en la oficina de mi padre.

Mis dos hermanos asistirán a la reunión, ya que Andreas el mayor será el alpha algún día y Carlos el hermano del medio será su beta.

Volviendo a mí, pues yo estaré en mi habitación leyendo, tal vez me pase un rato al baile para conocer de lejos y comer.

Escucho como suena la alarma de mi celular avisándome que ya es hora de alistarme para el baile, cojo el celular y desactivo la alarma, abro la aplicación de música y pongo la playlist de Chase Atlantic, me encantan las mayorías de sus canciones por no decir todas, me identifico en algunas de ellas.

Mientras suena "Swim" me entro al baño y comienzo a desnudarme, me miro al espejo, siento que no soy tan bonita como me gustaría.

Mi pelo es castaño, mis ojos son color violeta, mi cara es delgada, mi nariz es perfilada, tengo algunos lunares por mi cara y mi cuerpo.

Son características que me encantan en otras personas, pero cuando las veo en mí, no me acepto.

Entro a la ducha, abro la manija y el agua comienza a caer en mí como si fuera lluvia natural, el agua es fría. Cierros los ojos y comienzo a lavar mi cuerpo dejándome llevar por las sensaciones y la música.

Cuando termino de bañarme salgo y me coloco la toalla.

—Look death in the eyes like every day, I live for the— tarareo mientras busco que colocarme.

Me colocare un vestido que me encanta, es negro y largo, arriba en la zona del pecho y la espalda tiene encajes florares y de la cintura para abajo es liso.

El cabello solo lo seco un poco y para terminar me pongo un labial rojo un poco suave.

Cojo mi celular para después salir de mi habitación, bajo las escaleras y veo que todos están los importantes de la manada están aquí, logro distinguir a algunos que conozco de vista.

Busco a mi madre con la mirada y cuando logro ubicarla voy hacia donde ella.

—Madre, ¿Cómo está yendo todo? — le pregunto con un todo amable, a pesar de que ella no me presta mucha atención actualmente, si me daba mucho amor cuando estaba más pequeña y es una mujer amable.

— ¡Oh!, Hola, pequeña — me saluda con una sonrisa. —No sabía que bajarías, todo va bien, los alphas ya van llegando— me informa breve y luego su atención se dirige a sus amigas.

Hmmm, de acuerdo esa fue una excelente charla.

Me tenso de repente cuando siento que un olor muy atractivo se va acercando rápidamente, escucho como se abren las puertas de manera brusca y todos el en salón dejan de hablar.

Me giro para ver quien llego y lo que veo me deja tan quieta y tensa como una estatua.

El hombre más hermoso del mundo es lo que ven mis ojos, es alto me atrevo a decir que mide 1,90 de altura, sus ojos son de un azul profundo, su cara es marcada, su nariz perfilada, sus labios gruesos y rosados que dan ganas de morderlo y besarlos para ver qué tan gruesos se pueden poner, esta vestido con una camisa manga larga negra y unos pantalones del mismo color, ¡Dios! Se ve tan sexy vestido así.

Siento como él también me analiza y observo como sus ojos se oscurecen, ay mi madre. por mi cuerpo pasa una electricidad y se concentra en mi clítoris, siento como mis bragas se mojan y mi estabilidad se va perdiendo.

Él se va acercando, observo a los lados y veo como los demás le van abriendo el paso, todo ocurre en cámara lenta, me pongo nerviosa, no sé qué está pasando.

Mi respiración de acelera conforme el avanza, mis piernas están temblando y antes de caerme él llega a mí, me agarra por la cintura y me pega a él, siento como se inclina y pone su cara en mi cuello oliéndome, siento sus labios rozar mi cuello. Me caliento aún más si es que eso es posible y me permito respirar.

Su olor es magnífico, huele a vainilla, libros viejos y a bosque en temporada de lluvia, estoy cómoda en sus brazos como si nada podría pasarme.

Escucho como alguien carraspea y se saca de mi ensoñación, alejo rápidamente a este hombre y el gruñe, mis padres, hermanos y demás personas nos están observando asombrados, siento como mis mejillas se calientan y miro al suelo.

—Alpha Damián, al parecer hay cosas de la que hablar.— dice mi padre con voz dura y desafiante.

—Al parecer si, Daniel— Murmura con su voz toda gruesa y sexy ¡Por dios que pienso!

Veo a mi madre que tiene una mirada triste y mis hermanos con cara de querer pegarle a alguien.

—Ven, tú vienes con nosotros Elizabeth— comunica mi padre enojado, me agarra del brazo y me arrastra hacia el despacho.

Escucho como Damián gruñe pero no puede hacer nada, no está en su territorio.

Entramos al despacho y me desconecto de todo lo que pasa al alrededor.

Según lo que he escuchado sobre Damián es que es despiadado con sus enemigos, le gusta torturarlos hasta que no les quede sangre y dejen de gritar, es un mujeriego, se acuesta con las hijas de sus enemigos, dicen que tiene gustos raros a la hora de tener relaciones, tiene unos 300 años si no mal entiendo.

¿Por qué reaccione así?, ¿seré yo su mate?

Eso sería lo más lógico al ver como se puso y en donde estamos ahora, ¿mis padres me entregaran a él?, sé que no tenemos buena conexión pero no creo que harían algo que saben que me lastimara.

Pero también sé que no podrían hacer mucho, la manada de Black Moon es la más fuerte de todos, tiene soldados listos para matar en cualquier momento.

¿Debería de escapar? O solo aceptar mi destino

—hija, ¿estás de acuerdo?— me pregunta mi padre.

Todos me miran esperando una respuesta y yo solo los miro confundida, Damián me agarra de la mano — ¿estás de acuerdo con irte conmigo?— el pregunta  mientras me ve a los ojos y acaricia con su pulgar mi mano.

Miro a mi padre, tengo muchas dudas asique primero hablare con él para que me explique mis opciones.

—Me gustaría hablar con mi padre a solas, ¿por favor?— susurro suave y educada.

Todos asienten y salen, cuando escucho que cierran la puerta levanto mi mirada hacia mi padre.

—Padre, no tengo opción ¿verdad?— le pregunto entristecida.

—No, pero escucha— Dice con voz dura— Se lo que han dicho de él, pero no tenemos opción es eso o la guerra, si nos aliamos con el traerá muchos beneficios a la manada, piensa, siempre quisiste sernos útil, ahora es tu oportunidad, ahora sal y complácelo.— me ordena con voz de alpha.

Esos es lo que soy, una muñeca cambiando de dueño.

—De acuerdo, Alpha— mascullo y salgo por la puerta con mi mirada agachada, no me detengo a hablar con nadie. Me dirijo a mi habitación y me encierro a llorar por el resto de la noche hasta que me quedo dormida.

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Soy nueva en esto de escribir seriamente por lo que podría cometer errores.

Comienzo: 11/10/2022

Terminada: ¿?