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Jimin no despierto el primer dia,ingreso a urgencias con estado delicado,a mitad de la noche Jungkook lo habia subido con mantas al auto para llevarlo al hospital,le preguntaron las causas de su estado pero dijo que no lo sabía.

Al segundo día Jimin tampoco despertaba,los doctores decían que los hematomas en su cuerpo eran hechos ocasionados intencionalmente y que tenía una costilla fracturada,las marcas en su cuerpo eran a serie de tortura y que habia sido brutalmente violado.

- pobre chico es muy joven,pero deseguro un malnacido lo tomo de casa para secuestrarlo y hacerle todas esas cosas,que horror tener que convivir en esta sociedad con ese tipo de personas - habia dicho la enfermera mientras colocaba un par de sueros.

Jungkook para ese momento tenía un nudo en la garganta,su maravilloso esposo estaba en una camilla de hospital por su culpa,merecía ahora mismo estar en la carcel y pudrirse en ella.

Pero la idea de ver a Jimin en un futuro con alguien que no fuera el,teniendo una vida mientras se pudria en la carcel no le resulto atractiva y le enfermo de solo pensar en su esposo con alguien que no fuera el.

Siempre tan malditamente egoísta,sin pensar siquiera en los demas o en un punto de vista correcto,tomando decisiones que no le correspondía y callando a todo a quel que se pusiera en su contra.

Al tercer dia Jimin no daba luces de querer despertar y los doctores decían que quizás entraría en coma,que debió haber recibido un golpe en la cabeza.

Y lo recordaba Jungkook lo había azotado en la puerta de la habitación con fuerza mientras lo tomaba de los cabellos,pero para su versión no debió ser tan fuerte.

Jimin estaba despierto desde el segundo dia por la noche,estaba grabando el patrón de su esposo,aborrecia el tacto de este en sus mejillas.

Pero pese a todo Jimin sabia que tenia que sobrevivir,tenia que vivir su vida y si eso indicaba que no era con Jungkook ahora lo entendía.

Jungkook llegaba mas tardar para medio dia a ver como Jimin recibía los sueros por que no podía comer nada por estar inconsciente,se marchaba a las dos de la tarde cuando era la hora de comidas de muchos trabajadores y regresaba a las ocho de la noche sin un minutos mas y menos solo lo exacto.

La enfermera llegaba entre las diez de la mañana,pero recibía el suero a las doce y se retiraba para llegar hasta las diez de la noche para la cena que nuevamente era un suero.

Jimin tenia un plan solo tenia que seguirlo al pie de la letra,no mas tiempo era ahora o nunca,eran aproximadas las cuatro de la mañana cuando se quito todas las agujas que estaban conectadas a su cuerpo,se aseguro de acomodar las almohadas para que simulara una persona acostada.

El guardiá se tardaba quince minutos dando un rondín por el pasillo,por lo que salió cerrando la puerta con delicadeza.

Observó los pasillos un poco oscuros con la luz lo mas baja posible,eran anchos por lo que avanzo en grandes zancadas hasta la recepción donde habia varias señoritas.

Se introdujo a una habitación donde había medicamentos y miro el lugar observando pertenencia seguramente de los enfermeros,tomo un abrigo grande que le llegaba hasta los pies y unos tenis que le quedaban un poco mas grande.

Tomo un papel y escribió:

Lamento tomar tus pertenencias pero necesito salvar mi vida a toda costa,o posiblemente en unos dias vuelva a regresar pero no para estar en una camilla si no en un cajón de madera. ):

La dejo encima de los calcetines que no tomo y su bata de hospital la desecho a la basura.

Si era ágil,podía salir del hospital con facilidad.

Tomo un respiro para tomar el pomo de la puerta y salió comiendo tranquilamente pero observando hacía todos lados,paso por la recepción mientras fingia tomar agua.

Nadie dijo nada ni aun cuando tiro el vasito de papel a la basura y despues abrió la puerta de cristal del hospital.

Una vez llego afuera respiro y metió las manos dentro de su abrigo,la madrugada era helada.

Avanzo por las calles y curioso toco los bolsos hasta dar con unos billetes,no sabía si era el destino o una coincidencia pero lo agradeció infinitamente.

Tomo un taxi hacia su casa y de suerte le sobraba para uno de regreso,le indicó al señor esperar mientras regresaba.

El carro de su esposo no estaba y el viaje no fue corto al contrario se demoró una hora de camino,por lo cual subió hasta casa y con el código abrió la puerta.

Camino con pasos lentos mientras tomaba un cuchillo de la mesa,queria su libertad no le importaba actuar como un loco ya tenia mucho daño en si mismo.

Corrió escaleras arriba para sacar una maleta del ático,nadie tenia por que enterrarse que habia ropa guardada en ella,era vieja pero serviría para unos meses,tomo un par de dinero que guardaba detras de la lavadora,era el que encontraba en los pantalones de su esposo.

Bajo casi corriendo con el corazón latiendo a mil,no quería tomar nada que dieran pista que estuvo ahí.

Asi que sin mas abrió la puerta y la cerro,el aire impacto en su cara y sonrió corrio como un loco al taxi y introdujo sus cosas.

- Se nota tan alegre joven ¿a donde me dirigo? - le pregunto el señor mientras daba la vuelta para comenzar el recorrido.

- a obtener mi libertad,lleveme tan lejos como sea posible - miro por última vez su casa,su hogar que habia logrado forjar con esfuerzo y una lágrima traicionera lo delató.

- No llore joven,aunque su casa era bonita puede encontrar mejores - el señor le sonrió para cambiarle a la radio,pero Jimin reconoció la melodía.

- Puede subirle por favor - el señor no protesto y subio tan alto la radio como fue posible,Jimin con una sonrisa en su rostro pero lágrimas bajando de sus ojos y el ardor en su pecho se concentró en disfrutar su libertad.

Por primera vez me siento yo.

 ♧ durmiendo con el enemigo | kookmin ♧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora