Parte 7

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Han pasado unos días.

Hanzo estaba teniendo un día difícil. No durmió bien y su cuerpo estaba agitado por razones que realmente no podía entender.

Se podía notar la mal humor de Hanzo a una milla de distancia, por lo que, como es obvio, McCree también se dio cuenta. Ya que Hanzo estaba gritando a todo.

"Hanzo, ¿podrías relajarte un poco, por favor?"

"¿Cómo es que se hace eso, joder? ¡Ayúdame en esto porque realmente no sé cómo!"

McCree se detuvo por un momento pensativo, tenía algo en mente, pero no sabía si iba a ser una buena idea.

"Tal vez pueda ayudarte. Simplemente no sé si estarás bien con eso".

"Pruébalo... Estoy aceptando de todo para no golpear algo en este momento".

McCree se acercó a Hanzo, puso sus manos en su cintura y lo fijó contra el mostrador de la cocina. Sus cuerpos se azularon en un fotograma de segundo y sus caras estaban lo suficientemente cerca como para que sintieran las respiraciones de el otro.

Hanzo se sonrojó muy fuerte. Y tartamudeó:

"N-no es algo que podamos hacer... los dos tenemos que considerar qué hay algo viviendo en mi vientre..."

McCree se rió.

"Sin embargo, no estás rechazándome".

"... Sí... Supongo que no lo estoy haciendo...".

Lentamente, cerraron la ya pequeña distancia entre ellos, sellando con un beso suave. El dulce sonido de sus labios moviéndose entre sí era lo único que rompía el silencio de la habitación.

Hanzo dejó que sus mano pasaran detrás de la cabeza de McCree, empujándola más cerca para profundizar el beso y, al mismo tiempo, se sentó en el mostrador con las piernas abiertas, dejando que McCree se pusiera entre ellas.

Podían sentir las pollas del otro creciendo gradualmente, presionándose mutuamente.

McCree fue totalmente consciente de lo que estaba sucediendo esta vez. No se estaban guiando por feromonas y estaba decidido a hacer las cosas bien esa vez. Lentamente se alejó de los labios de Hanzo solo para dirigir su atención hacia su cuello. Hanzo seguía acariciando la cabeza de McCree, Hanzo tenía un cuello sensible y que McCree lo besara era su entrada al paraíso.

Hanzo tomó una de las manos de McCree, guiándolo hasta la parte donde realmente quería que lo tocara.

"Realmente no pierdes tiempo, ¿verdad?", dijo McCree cerca de la oreja del otro hombre.

"¿Por qué debería hacerlo?"

Volvio a besar sus labios mientras McCree deslizaba suavemente una mano dentro de la ropa de Hanzo, dándole atención a su ya dura entrepierna y empezando a masturbarlo lentamente, pero de forma intensa.

Ajustando sus piernas para darle a Jesse libertad de movimiento, Hanzo colocó ambos brazos alrededor de su cuello. Estaba empezando a responder a su toque, respirando con intensidad, liberando un gemido casi inaudito de vez en cuando.

Fue entonces cuando McCree comenzó a mover la mano más rápido y Hanzo ni siquiera se molestó en aferrarse, se sentía bien y no tenía ganas de preocuparse por su voz en absoluto. Gimió sensualmente cerca de la boca de McCree, como si lo estuviera haciendo a propósito para burlarse de él.

Poco después, McCree tiró de una silla y se sentó en ella. También bajó los pantalones de Hanzo. Antes de hacer nada, miró a los ojos de Hanzo.

"En serio, no es necesario que hagas esto~".

Ni siquiera respondió. Simplemente involucró al miembro de Hanzo en su boca. Se tomó su tiempo, subiendo y bajando y dejando que su saliva se deslizara por el miembro de Hanzo, estaba prestando atención a cada reacción, tratando de ir lo más perfectamente posible. Luego escuchó que se decía en un solo aliento:

"Jesse~..."

McCree se detuvo a tiempo y miró a Hanzo.

"Creo que nunca te he oído llamarme por mi primer nombre".

"A veces tenía que ser el primero. Pero, ¿por qué te detuviste?", se rió Hanzo.

McCree se rió y procedió a continuar, pero ahora podía sentir su corazón bombeando como loco. La forma en que Hanzo dijo su nombre hizo que su pecho se calentara.

"Jesse~... Creo que me voy a correr... Por favor, no te detengas".

Lo entendió como una orden para mover la cabeza más rápido. Hanzo se estaba aferrando al pelo de McCree con anticipación y rápidamente se vino sin importar dónde cayera. Se sonrojó después de ver la cara de McCree sucia.

"Oh, mierda... ¡Lo siento!

"No te preocupes por eso. Espero que te sientas más tranquilo ahora".

Hanzo agarró una manta y limpió la cara de Jesse.

"Sí, seguro que sí... gracias".

Hanzo le dio a McCree un último beso.

McHanzo-Omegaverse AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora