Capítulo 1

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"¿Quieres que le crea?"

"Tony..."

"¡No Steve! Es una de las mujeres más tortuosas que he conocido, ¿y crees que debería creerle cuando de repente aparece exigiendo dinero porque aparentemente yo engendré a su hijo?"

Steve coloca una mano sobre el brazo del otro hombre tratando de calmarlo, mientras lo mira a los ojos. "Tony, no estoy sugiriendo que pongas tu confianza en sus manos. Parece que olvidas que estuve cerca cuando todavía eras un playboy. Conozco a esta mujer. Todo lo que digo es que no deberías ignorar esto. ¿Y si realmente es tu hijo?

"¿Entonces qué, Steve?" espeta Tony. "¿Qué hago entonces? No soy una figura paterna; ni siquiera sé cómo comenzar a actuar como un padre y mucho menos serlo. Entonces, ¿qué se supone que debo hacer si él es mío? ¿Eh? ¿¡Entonces qué!?"

Ahuecando suavemente sus mejillas, Steve dice: "No lo sé."

Tony se ríe sin ganas. "Entonces es inútil si el gran Capitán América no tiene una respuesta."

"Es por eso que tenemos que hablar con ella y hacernos una prueba, porque Tony," dice Steve con urgencia, "si ella es como recuerdo, entonces no debería tener un hijo, tuyo o no,"

Buscando los ojos del rubio, Tony finalmente suspira en voz baja y apoya su frente contra la de su esposo. "Muy bien, Steve. Tú ganas. La llamaré y acordaré una reunión."

"Felicitaciones señor

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"Felicitaciones señor. Los resultados muestran que usted es el padre de Peter."

El mundo se cayó bajo sus pies.

"¡No dejaré que me lo quites! ¡Es mío! No he trabajado tan malditamente duro para que vengas a arrebatármelo

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"¡No dejaré que me lo quites! ¡Es mío! No he trabajado tan malditamente duro para que vengas a arrebatármelo."

"Olivia, déjalo; solo te estás avergonzando a ti misma. Se acabó, y la custodia ya me la dieron a mí."

Con los dientes al descubierto en un gruñido vicioso, la mujer se aferra con más fuerza al bebé que grita mientras intenta desaparecer en el rincón en el que se ha apretujado.

"¡Se suponía que tenías que darme el dinero para no hablar de él!" Ella llora. "¡No se suponía que lo querías!"

Steve avanza un paso con la palma de la mano extendida, preocupado por el bebé en sus facciones, "¿Por qué Tony no querría a su propio hijo?"

TU PEQUEÑA MANO EN LA MÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora