Uno

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—¡Off!

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—¡Off!

El castaño deja su teléfono celular en la mesa al escuchar el llamado del encargado de la cafetería escolar, quien seguramente ya tiene su Frappuccino listo. Ansioso, Off suelta sin pensar el aparato que golpea la mesa y sorprende a su hermano menor absorto en un libro.

—Perdón, Ohmy. —Off detiene su carrerilla hasta la barra de entrega para regalarle una sonrisa nerviosa a su hermano, quien lo mira por sobre sus gafas redondas, casi echando fuego por los ojos—. Es Gun, Ohm, entiende a tu viejo. —y le guiña un ojo antes de salir disparado por su café.

Y "Qué infeliz es ese chantajista", piensa Ohm todavía molesto, porque a Off le molesta ser llamado viejo, pero ahora si no tiene problema, ¿No?

—Vejete mal educado... —balbucea molesto el pelinegro, ajustando las gafas por el puente de su nariz—. Por un maldito café interrumpe mi estudio pero ¡Ah, no! no puede pedirme uno a mí que soy su hermano, sólo va porque le gusta el tipo que atiende. ¡Que repruebe Ohm entonces, mientras yo ligo! Desgraciado...

—¿Otra vez maldiciendo, Ohm? —Paris toma asiento frente al menor, con una charola de almuerzo entre sus manos—. Eres demasiado joven para guardar tanto rencor en tu alma.

—¡Es su culpa! —Ohm cierra de golpe su libro, ya resignado a que nada bueno saldrá de esa "Hora de estudio"—. Se la pasa coqueteando con el encargado siempre que venimos ¡Y ni siquiera le gusta el café!

Una suave risita sale detrás de un molesto Ohm, proveniente de un muchacho al resolverle el cabello a su novio.

—Ohm, es muy temprano para maldecir a tu hermano. —Copter toma asiento a lado de su novio, quien le entrega la charola de almuerzo—P'Off está enamorado, entiéndelo— picotea un trozo de fresa de la ensalada, sin muchas ganas de comerlo y lo lleva a la boca de Paris.

—Gracias cariño.

Ohm suspira y esconde el rostro en el libro que previamente estaba leyendo, dispuesto a huir de la melosa situación de ver a su mejor amigo y a su novio compartir almuerzo.

¿Ohm odia el romance? Tal vez, pero está perfectamente justificado, después de lo que pasó con su último novio, el estudiante está plenamente seguro de que los detalles y cariños no sirven de nada. Arm le dejó como enseñanza que no importa que tanto hagas por alguien, siempre puede dejarte por un basquetbolista canadiense.

Por eso el hecho de que su hermano gaste demasiado dinero todas las mañanas para comprar un café helado que termina en manos de cualquiera de sus compañeros, sabiendo perfectamente Off que en la vida ha tomado café, le parece absurdo. Que Paris le sirva todos los días el almuerzo a Copter como "apoyo moral en su dieta" y solo obtenga un trocito de fruta cómo recompensa y a veces un beso en la frente —Porque Copter "No es virgen, ¡no señores! es más que eso ¡Es mojigato!" y no le dará nada a Paris— le parece todavía más absurdo.

—No le veo sentido, es todo. —Ohm toma sin previo aviso una rebanada de melón del plato de Copter—. Ni siquiera toma café.

—Y yo no desayuno en la cafetería, —interfiere Paris— pero le traigo el almuerzo y acompaño a Copter todas las mañanas para cuidar lo que come. Es así como funciona el amor.

Copter asiente en apoyo a su novio, todavía con la boca llena de fruta y las mejillas infladas.

Antes de que Ohm argumente algo, Off camina hacia la mesa sosteniendo su Frappuccino en una mano y la otra limpiando su rostro. El hermano mayor llora, con la nariz roja y pequeños hipidos.

—¡Gun se va! —Gimotea Off y se deja caer al lado de su hermano, a quien sostiene de la camisa y tira de él hacia adelante y atrás— ¡Mi futuro esposo me abandona y ni siquiera tuve su número!

—Oh P'... —Copter lo rodea por los hombros y lo abraza. Sutilmente, mientras Off se limpia la cara, Copter embarra un trozo de fresa en la crema batida del café del mayor— ¿Me lo puedo quedar yo esta vez?

Ohm no ha dicho nada, no porque no pueda, sino porque su hermano lo está zarandeado de la camiseta como trapo viejo y no ha podido articular palabra alguna.

—¡Se desvanece mi esperanza y mis sueños y tú te quieres tomar lo último que me queda de él! —Off abraza el vaso de café helado contra su pecho, liberando por fin a Ohm.

—Ay, pero si igual nunca te lo tomas, P'... —Copter pucherea y sigue con la vista el vaso de café, su propio sueño y esperanza de tomarlo se desvanece frente a él.

—Vamos por un jugo, Copter. Eso tiene mucha azúcar, bebé. —Paris lo toma de la mano, con una sonrisa comprensiva, mientras el llora internamente por un café que no será suyo.

Antes de irse, con Copter todavía herido entre sus brazos, Paris mira con la advertencia implícita de "¡Dile algo amable!" a Ohm, mudo al lado de su consternado y dramático hermano.

—Ah, Off... —Ohm se aclara la garganta y remueve un poco por los hombros a su hermano—. Off, vamos...

En un intento plenamente inútil de consuelo, Ohm abraza a su hermano, recibiendo un "¡WAAAAH!" Digno de funeral de Off, quien ahora llora sin freno en el hombro del menor.

Recuerda que a él nadie le dijo palabras bonitas ni de lástima cuando su ex lo dejó, ni siquiera su hermano, porque solamente le puso un bote de helado enfrente y le dijo "Es canadiense, Ohm, yo también te habría dejado por un canadiense." y lo abrazó hasta que se le acabaron las lágrimas y el helado. Así que su relación no era precisamente de hermanos amorosos o reconfortantes, era más de... Hermanos que se aman a su manera.

—No era tan guapo, Offy. Conseguirás algo mejor ¿Qué tal si te busco un canadiense, eh, viejo? —Ohm sonríe apenas, limpiando con la manga de su suéter a Off—. Escuché que este año llegan de intercambio ¿O prefieres uno chino?

Off se ríe, todavía con la cara llena de lágrimas y asiente a Ohm, más calmado.

—A lo mejor. Después de todo, crecer en China deja costumbres... —Off sorbe del vaso de café, con la crema batida sobre los labios—. Esto es horrible.

—Lo sé, viejo per-

—No. —Interrumpe el mayor, limpiando la crema de su rostro—. Esto en serio es horrible ¿Cómo hay gente que toma esto por gusto?

Ohm se ríe y suspira, porque al final, como siempre, su hermano es el más fuerte de ambos. Incluso con el corazón roto.

𝕰𝖛𝖎𝖎𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ

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Caramel macchiato y Glaseado de vainillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora