lucifer el chico del traje rojo

Capitulo 16

CAPÍTULO 16

Seiya y yo pasábamos en la playa, era una isla privada sólo para nosotros dos el decía que era muy segura después de todo lo que nos había pasado sentía tranquilidad de estar shi

-Estas contenta ángel mio

-si divinidad mia

-relajarte es lo que necesitas para descansar

Sonreí el lugar era maravilloso pero bueno con el hasta una caja de zapatos lo era. Amaba a este hombre y el a mi

-si este lugar es maravilloso seiya

-Dime.. ¿que quieres hacer ?

-no se es que es tan bello, podemos caminar y explorar

-si hagamos eso

Caminamos por un buen rato hasta llegar a una cascada hermosa seiya me. Llevo ahí adentro y había una cueva tan grande donde se podía descansar con tranquilidad.

-seiya puedo preguntar algo

-si, dime

-tu padre fue malo contigo el no te amaba el es capaz de hacerte daño

-lo es, es capaz de hacerme daño pero se que jamás lo haría, el me ama serena, solo que no pensamos igual, el no es el malo en la historia ni yo lo soy, sabes hay algo que se llama equilibrio y necesitamos el bien pero de alguna forma también el mal para que todo sea como debe ser,

-pero tu eres el mal, dime por qué tienes que ser tu el que lo. Cuide

-porque yo soy tan fuerte como mi padre el no puede partirse en dos

-el te pidió eso dime que tu fueras el guardian de las almas perdidas

-no, jamás lo hubiera dicho, pero yo y mi arrogancia me llevó a esto y después pues ya era tarde

-seiya, yo se que esa persona que me busca es..

-minako no es verdad

-si no puedo comprobarlo pero estoy segura

-yo también, pero ella es muy inteligente no deja rastro es por eso que mi padre no le ha quitado sus alas

-ella no descansará hasta eliminarme

-pero no lo conseguira lo prometo

Me abrazo y beso cuando estaba en sus brazos me sentía segura feliz plena sabía que el no dejaría que nada me pasara.

Vamos a la cabaña te parece

-seiya tienes alas

Sonrió

-si claro que las tengo serena

-pero dejaste de ser ángel no las pierdes

-no, yo no las perdí, fui desterrado pero no perdí mi esencia, cuando matas a un ser humano acaba todo para ti

-yo dejaría de ser celestial sin mató aún ser humano

-si, cualquier celestial dejaría inmediatamente de ser celestial pero eso nunca pasará yo no lo dejare.

-podrías enseñar tus alas..

-¿quieres volar acaso? ..

-no sólo verlas

Seiya sonrió y un momento estaban sus alas en todo su resplandor eran magníficas y el parecía más una divinidad

-ven conmigo

Me abrazo y solo sentí el aire en mi rostro, paz y libertad

Llegamos a la cabaña era tan hermosa olía a pino en la entrada había una gran sala frente a los cómodos sillones una bella chimenea

-te gusta el lugar

-si es perfecto seiya.

Me cargo y entramos ahí, todo olía a madera y a roble quemándose

-te enseñare la recamara amor mio

-siento que solo por eso me trajiste aquí

-no también podría haberlo hecho en la playa en el aire o donde fuera

Sonreí y lo bese

-tengo hambre, comamos algo

Me bajo al suelo y puso su carita tan triste

-ok veré que hay en el refrigerador

Lo tomé por el cuello y lo bese

-bromeo amor mío, yo solo te necesito a ti, vamos a esa recámara

Me alzó de nuevo y beso mi cuello

-pagarás por tu osadía

-serás muy malo porque yo quiero al amo del que todos hablan

-entonces pagarás tu condena

Seiya se apoderó de mi boca y la devoró su lengua penetraba una y otra vez, mientras sus manos se despojaban de si ropa yo estaba cachonnda sólo de imaginarlo desnudo es que seiya era tan perfecto en todos los sentidos .

Cuando quedamos desnudos seiya me llevó a la cama poco a poco se acercó a mi. Mis partes palpitaban solo de verlo hambriento por mí

-te voy hacer pagar tud bromas mi ángel

Sonreí sabía que sería más un premio que un castigo. Su boca se deslizó pr mi cuello bajando por la clavícula.. Se detuvo en cada pecho mimandolo con su boca volviendome loca. Después bajó a lo abdomen hizo y recorrido de besos hasta mi vientre ya estaba húmeda el utilizó sus rodillas para separar mis muslos

-voy a probarte mi ángel

Su simple aliento me hacia perder la razón. Cuando su lengua recorrió mi hendidura jadee fuerte y mi espalda se arqueo. Seiya tomó mi trasero lo apretó hundiendo más su boca. Mordió, chupo mi clítoris hinchado en cualquier momento llegaría el orgasmo abrío con sus dedos mis pliegues, fue metiendo uno a uno sus dedos dentro de mí yo me corrí en su mano.

-Seiya!!

Fue todo lo que puede decir cuando subió de nuevo para besarme y de un golpe me embistió una y otra vez mis rodillas en sus costillas podía escuchar el choque de sus bolas en mi pelvis. Nos llegó un nuevo orgasmo a los dos

Cuando abrí los ojos seiya me. Miraba

-mi. Divinidad aún no te sacias acaso

Sonrio y se puso encima de mi eso era una respuesta que me gustaba.. Con el jamás había tregua eso era lo mejor