Caminaba por la enorme pradera, el césped estaba totalmente verde y el viento soplaba refrescándome.
Miré hacia el bosque sin ser capaz de acercarme, me daba miedo cruzar los límites trazados.
Me dejé caer sobre el césped y dejé que este me hiciera cosquillas en los brazos, me gustaba mirar la ciudad desde ese punto. Es hermoso aquel contraste de la acera, el ruido, la multitud contra la tranquilidad, soledad y frescura de lo natural. Aunque decían que la otra ciudad era aún mas hermosa, el mito sobre la belleza de las criaturas que la habitaban era muy escuchado.
La otra ciudad o calite, el cual era su nombre oficial, esta pasando el bosque- y un extraño portal- pero nadie se atrevía a entrar, no sabíamos cómo serían las criaturas que vivían ahí, las hadas y las sirenas tienen fama de ser muy traicioneras, pero nadie lo había comprobado por completo.
El mundo se había dividido y los dos lados entendíamos el miedo de lo desconocido, no hacíamos nada por cruzarnos y eso mantenía a ambos gobiernos tranquilos.
Escuché un ruido detrás de mi, provenía del bosque. Me levanté rápidamente de mi lugar al ver una figura salir de entre los árboles.
Era un Niño, suponía que tenía doce años, quería pensar que teníamos la misma edad. Lo miré fijamente y el rápidamente notó mi presencia. Tenía unas mejillas rosadas muy lindas, sus ojos me miraban con recelo y el cabello le caía muy cerca de los ojos. Iba muy bien vestido, su porte era diferente al de cualquier Niño.
—¿hola?
—no quiero hablar—respondió caminando hasta donde estaba
—¿saliste del bosque? ¿Quien eres?
Mis preguntas fueron respondidas al ver sus orejas, tenían una forma puntiaguda. Era un hada.
—Si, salí de ahí, muévete—me empujó haciéndome caer.
Que ser tan odioso. Me levanté con molesta y le devolví la acción, pero sin tanta fuerza para hacerlo caer. Me miró molesto, pero al mismo tiempo sorprendido por mi actuar.
—¿por que me empujaste?
—porque tú lo hiciste primero, malcriado.
—¿malcriado? Soy un príncipe, ignorante. Podría mandar eliminarte ahora mismo
—eso estaría Perfecto—me crucé de brazos y lo miré desafiante
—no haré que mis guardias pierdan el tiempo con tan pequeño ser—continuó con su camino.
No parecía tener un destino en concreto, solo paseaba por el lugar admirando las pequeñas flores y los enormes árboles que se alzaban frente a él.
Comencé a caminar con destino a la ciudad, ya había tenido suficiente y mis padres estarían preocupados al ver que el sol se estaba escondiendo.
—¿a donde vas?—pregunto cuando pase a su lado despreocupadamente
—a mi casa—respondí sin detenerme
—¿donde vives? —al escucharlo me detuve y giré a verlo
—¿para que quieres saber?
—para....para saber a donde no ir
—pues no te preocupes, no nos toparemos nunca más—le asegure para retomar mi camino.
Hubiera sido una lástima que aquello se hubiera cumplido.
A pesar de nuestro poco agradable primer encuentro, las cosas después de eso fueron muy bien.
Taehyung y yo nos comenzábamos a ver casi todos los días, nuestros encuentros siempre eran en la pradera. No tenía conocimiento del cómo el lograba llegar hasta ahí, pero jugábamos y corríamos por varias horas, además de platicar sobre nuestro día a día.
ESTÁS LEYENDO
Hot Shot's 2 |BTS|
Fiksi Penggemar"La imaginación llega a lugares increíbles y poco comunes, pero siempre lleva a otra realidad" •segundo libro •+18 •Hetero