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La puerta seguía resistiendo pero no sabia hasta cuando lo lograría, y menos si los sussurradores seguían empujando la puerta de aquella manera. Me mordí el labio inferior decidiendo si era una buena idea o no el improvisado plan que tenía en mente.
-Tienen que irse. - Hablé cuando la puerta volvió a ser empujada violentamente. Judith, su hermano y GJ se miraron unos segundos, mientras que mi esposo se acercó a mí con una mirada penetrante.
-No vendrás? - Me preguntó este tomándome delicadamente del codo y acercándome a él, su voz salió sussurando.
-Alguien tiene que impedir que corten la cuerda, Carl. - Dije automáticamente, Gabriel me miró. - Además tengo a Gabriel aquí, nos cuidaremos las espaldas.
-No, no te dejaré. - Demandó, estaba por reclamar pero la mirada que me dedicó me calló. Eso y su mano posicionada en mi barriga. - No en esta condición.
-Puedo cuidarme. - Sin embargo sabía que el ojiazul jamás se rendiría, bufé dándome cuenta de que tampoco podía ponerme en peligro así como así. - Está bien, pero si no me alcanzas en una hora, te voy a buscar.
-De acuerdo. - Carl se acercó a mí, dejando un delicado beso en mis labios al mismo tiempo que avariciaba mi barriga. - Los amo.
-Nosotros a ti. - Volteé mi mirada hacia Gabriel antes de acercarme a él. Lo miré unos segundos con una sonrisa. - Me siento como una mamá orgullosa.
-Me entrenaste bien, capitana. - El cura río antes de abrazarme. - Dile a Rosita que es mi media naranja. - Miré al hombre con una sonrisa jocosa, era inevitable.
-Se lo diré, no cabe duda. - Bromeo alejándome escuchando las risas de mi esposo a mi lado. Lo callo, todavía sonriendo, dándole un codazo. - Esta bien, debemos irnos. Vamos niños.
Tomé la mano de mi hijo y la de Judith, esta sostenía la de RJ. Nos acercamos a la cuerda que colgaba de aquel viejo ascensor y después de asegurarme que era seguro hice bajar a los niños primeros, tras darle una última mirada a Carl viendo como preparaba su rifle me deja calar con una opresión en mi pecho.
Dejando que la oscuridad de aquel lugar me trague y que sea imposible ver.
❥︎*༄☼︎
Tras tantas horas el sol finalmente había salido, y luego de tanto tiempo de espera; en el cual me mordí las uñas constantemente, me levanté y revisé el perímetro al menos unas 10 veces, caminaba de un lado a otro mientras los niños descansaban un rato, excepto Jude que tampoco podía dormir, pude ver a mi ojiazul regresar.
Me levanté de un salto del tronco en el que estaba sentada y básicamente casi corrí hacia el. Mis manos rodearon su cuello en el momento que estaba lo suficientemente cerca suyo, sus brazos rodearon mi cintura apretandome más fuerte contra él.
-Estás bien? - Pregunté de inmediato - Te hirieron? - mi mano se posó en su mejilla, tenía un ligero corte pero nada de grave.
-Estoy bien, te lo prometo. - Sonreí. Sabía que podía cuidar de si mismo, pero también el más fuerte de los soldados podía caer, y perder a Carl no era algo que podía imaginar. - Tú? ¿Y GJ? - Su vista se posó en nuestro hijo que estaba siendo despertado por Judith. - Cómo lograste que se durmiera?
-Un mago no revela sus secretos, sheriff. - Hablé mirándole, mi sonrisa se hizo más grande. Me separé ligeramente pero no del todo, sus manos se quedaron en mi cadera mientras que las mías tomaron su mandíbula. - Te amo, Grimes. - Mordí mi labio inferior sonriendo apenas.
-Te amo, rhee. - El nominado miró mis labios antes de reír levemente y besarme. En esos momentos me sentía como una niña enamorada. - Te tengo una sorpresa. - Murmuró una vez que se separó. - Te va a gustar, créeme.
-Lindo, sabes que no me gustan las sorpresas. - Comenté, aunque dejé que tomará mi mano y me guiara. Detuve mis pasos cuando la vi, allí agachada sobre una rodilla mientras abrazaba a Judith y RJ. - Mamá... - Dije con una voz tan baja que casi no se escuchó, pero levantó la cabeza en mi dirección y mis lágrimas empezaron a bajar.
-Hola, mi amor. - Mi madre se lavantò, caminó hacia mi y al ver que todavía era incapaz de reaccionar, me envolvió en un cálido abrazo. Al volver a sentir los brazos de mi madre tras tantos años de haberme hecho falta pude soltar las lágrimas que retuve desde la muerte de mi hermana. Y no solo de ella, la de Tara y de Henry también me afectaron bastante, eran dos personas que conocía desde hace un largo tiempo.
Le correspondo el abrazo a mi madre tan fuerte como puedo.
-Te extrañé. - Comenté reteniendo las lágrimas al mismo tiempo que abrazaba más fuerte a mi madre. - Cómo no tienes idea.
-Yo también, perdón por no contestar las cartas, solo que ha sido algo agitado este último tiempo. - Su voz cálida y reconfortante era una de las muchas razones por las que la extrañé.
-Está bien, te entiendo. - Y lo hacia. Aquí también había sido dificil, desde que Alpha llegó a nuestras vidas todo se volvió más complicado, y tras su muerte y Beta queriendo vengarla. Era casi imposible. Especialmente estando embarazada por segunda vez. - Sabes, quiero que conozcas a alguien. GJ! - Grité al ver que mi hijo estaba algo alejado, se volteó a mi dirección y en un movimiento de cabeza le indiqué que viniera. - Él es GJ.
-GJ? - Preguntó mi madre confundida por aquel nombre.
-Glenn Jr. - Maggie volteó hacia mi. Bajó de nuevo la cabeza hacia su nieto y sonrió inevitablemente. - Hijo, ella es tu abuela.
-Pero no es vieja. - Comentó, solté una carcajada ruidosa.
-No, no lo es. Pero espera un poco. - Mamá me dedicó una mirada asesina pero sonrió. - Y, te quiero presentar a otra persona más. - Tomé la mano de mi madre y la apoyé en mi barriga. - Si es niña será Bethanny.
-Benjamin si es niño. - Terminó de decir mi esposo envolviendo mi cintura en un abrazo. - Hola Maggie.
-Hola Carl. - La mujer se separó de mi para acercarse al ojiazul para poder abrazarlo. Él correspondió el abrazo sin dudarlo.
-Dios mío, aún me acuerdo cuando los conocí, eran tan pequeños. - Dijo con nostalgia, aquellos eran tiempos más fáciles y llevaderos. - Ahora son unos adultos, con un hijo y otro en camino.
-El tiempo vuela, verdad? - Una risa salió de mi. Pero no era de felicidad, no, era de nostalgia. Nostalgia hacia aquellos tiempos donde todo era más fácil, y al menos tenía a mi padre. Tal vez Glenn no es mi padre biológico y no tenemos la misma sangre, pero lo quiero como uno y a pesar de todo, lo sigo necesitando. Tengo a Daryl, el también es como una figura paterna para mi, pero no es lo mismo porque Glenn era mi padre, Daryl lo quería como el hermano mayor que nunca tuve.
-Si, es verdad. - Maggie nos miró a los tres antes de sonreír. - No me voy a ir por un tiempo, quiero conocer a mi nieto,y además quiero que conozcas a Hershel.
-No lo he visto desde que te lo llevaste. - Aquella frase sonó mal, pues me di cuenta de cómo la cara de Maggie se deformó. - Mamá, sabes que no estoy enfadada, decepcionada tal vez pero jamás podría enfadarme contigo. Jamás. - Remarco la última palabra con firmeza acercando un avez más mi cuerpo al de Maggie. Abrazándola una vez más con miedo a que si la suelto, desaparezca una vez más. No quería que se fuera y tampoco lo permitiría.
❥︎*༄☼︎
Aquí otro one shot de Carl! Esta vez de la temporada 10, en realidad lo quiero ver un "What if...?" si es que estuviera vivo.
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