Nos encontramos en la Iglesia Abandonada, mas específicamente con Bell quien se encontraba haciendo sus labores antes de ir al calabozo.
Bell: -Terminando de barrer.- Termine... Sera mejor ver si ya despertaron.
Bell se dirigió a donde se encontraban Lili y Hestia, y al momento de llegar para su sorpresa estas ultimas aun seguían dormirás.
Bell: Si que tienen el sueño pesado.... -Suspira.- Bueno, sera mejor ir a buscar equipo para el calabozo.
Bell se arreglo, tomo su dinero y salio de la Iglesia en busca de un lugar en el cual comprar pociones y demás cosas para el calabozo.
Bell: -Caminando.- Bien, lo primero sera conseguir las pociones." Espera..."¿Pero donde conseguiré esas pociones?" -Mirando alrededor.- ¿Donde estoy?
Al estar perdido en sus pensamientos, Bell había estado caminando sin rumbo así perdiéndose y llegando a una zona con muy pocas personas
Bell: Creo que no debí venir solo... -Caminando.- Ya no importa, aun tengo que buscar las pociones.
Bell siguió caminando sin rumbo alguno viendo los distintos locales que habían por la zona pero ni uno de estos se dedicaba a la venta de pociones.
Bell: Nunca pensé que comprar pociones seria tan difícil. -Suspira.- Nunca mas vendré solo... Uh? -Observando un letrero.- La Farmacia Azul...
Bell camino hacia la entrara de la farmacia y al ingresar a pudo ver a dos personas, una de ellas era una chienthrope que ordenaba algunas cosas y el otro se trataba de un Dios que cargaba una caja hacia una de las repisas, estos dos al darse cuenta de la presencia de Bell saludaron rapidamente.
Miach/Naaza: Bienvenido. -Dijeron al unisono.
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Bell: Buenos días, ¿Aquí venden pociones?
Miach: -Asintiendo.- Si, ¿De que tipo quiere?
Bell: Necesito tres pociones de estamina y de curación.
Miach: Entendido, Naaza, ¿Puedes ir por ellas?
Naaza: Si. -Diria para seguidamente dirigirse a traer las pociones.
