capítulo 35

412 50 8
                                    

Diana.

La batalla era campal, el lugar estaba destrozado, era tiempo de acabar con esto.

- basta, Ares, esto se acabo ríndete y te perdonare la vida - digo cuando lo tiró al suelo poniendo la punta de mi espada en su garganta.

- no te quieras ver bondadosa hermana, se qué en el fondo quieres matarme porque mate a tu amada madre - le entierro un poco mi espada a lo que ríe.

- te equivocas, yo no busco venganza sino justicia, si lo justo es matarte entonces lo haré, pero si estás dispuesto a cambiar, solo pagarás tus crímenes - me mira incrédulo para soltar la carcajada.

- disfrutaré sin duda matarte - bueno al menos lo intente, seguimos con la batalla, Ares iba perdiendo y eso lo puso furioso y usa todo su poder lanzándolo contra mi, me protejo con mi brazos y todo esa energía se queda en ellos y sonrió.

- pudiste tener una vida diferente, ahora solo me queda decirte, adiós hermano - al decir eso floto en el aire y aviento la energía en forma de rayo traspasando su pecho.

Todo había terminado. Caigo de rodillas y suelto un gran grito de dolor, sentía mi pecho doler de una manera insoportable. Siento como unos brazos me acogen, cuando volteo a ver quién es me separo rápidamente.

- ¡no me toques! - digo con desprecio.

- cariño, yo.. - la interrumpo.

- tu nada, no sabes cómo me arrepiento de haberte conocido, dices amarme y me has lastimado de esta forma, jamás te perdonare esto.

- por favor.... no me digas eso, te amo di, te amo como nunca ame a nadie, todo lo hice por nosotras.

- ¡estás loca..!, jamás volvería estar contigo. - veo como agacha la mirada.

- ¿me matarás como a él? - realmente quería matarla, quería que pagara por quitarme a Cassie, niego eso no era lo correcto.

- matarte sería un premio, pagarás tus crímenes - veo como se acercan los chicos - llevencela a las instalaciones y pongala en una celda de alta seguridad, asintieron.

Ha pasado una semana desde que mi vida cambió por completo, hice las ceremonia correspondientes para despedirme de mi madre y Cassie. Las amazonas me exigen que tome el trono de mi madre, pero es algo que no es para mí, tendré que hablar con ellas. Ahora estaba con Kara, estaba preocupada por ella, pues desde ese día no despierta, tengo miedo que la kriptonita la haya lastimado más de lo que lo hizo.

- por favor despierta cariño, no sabes cuánto te necesito - limpio mis lágrimas para después besar su mano.

- ella no es la única que puede consolarte - me tenso al escucharlo.

- ¿que haces aquí? nadie te invoco - digo con indiferencia.

- me duele verte así - volteo a verlo con enojo.

- ¡oh...! ¿encerio? pues no parece, te invoque varias veces implorandote que las salvarás, sin embargo; jamás apareciste, así que no vengas a decir mierda.

- ¿crees que no quería salvarla?, era mi hija la amaba con mi vida, pero aún siendo un Dios, no podía interferir, hay reglas que debo seguir.

- a la mierda tus estúpidas reglas, te importo más tener el control que salvar a tu propia hija, no sabes cómo odio ser tu hija - veo como se tensa - ahora lárgate, no quiero nada de ti, si pudiera me cambiaría mi sangre para no tener nada que ver contigo.

cuando vuelva a encontrarte [Superwoman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora