cuando vuelva a encontrarte [Superwoman]

capitulo 20

Diana.

Kara se acerca a mí, tomo aire antes de que sus labios toquen los mios, su boca sabe a chocolate. El contacto es suave al principio pero luego como si necesitará mas se apoya contra mi y me besa con ansiedad. Sus labios son cálidos y suaves, su cabello acaricia mi cara. Trato de aferrarme a los detalles pero se me escurren entre los dedos. Tardo un instante en darme cuenta que le estoy devolviendo el beso con la misma ansias. Sentía tanta calor, mi cuerpo ardía, al terminar el beso nuestras miradas se cruzan, estaba llena de deseo, había soñado tanto con este momento. Sus manos se deslizan por mi cuello apretándome suavemente la garganta con los pulgares, me echó la cabeza para atrás, sentí la presión de sus labios contra los mios con tal fuerza que impedido salir lo que fuera que estuviera a punto de llamarle. Sus manos bajaron hasta mis hombros, rozaron mis brazos y se posaron en mi región lumbar. Sentí pequeños escalofríos de pánico y placer, intento estrecharme contra ella. La pasión estaba dando paso a algo más, pero entonces la realidad me golpea y con mucho esfuerzo me separó de ella.

- esto no está bien Kara - digo algo agitada.

- ¿por qué no? - dice de igual manera.

- porque tienes novia - me da una gran sonrisa y eso me confunde.

- ¿es solo por eso? - asintí - entonces no te preocupes, no tengo novia - me pretende dar un beso pero la detengo.

- ¿terminaste con luthor? - niega y yo no puedo estar más confundida.

- nunca fue mi novia - me agarra de la cintura y me pega a ella - ahora, podemos continuar en lo que estábamos - besa mi cuello eso hace que muerda mi labio.- te prometo contarte todo después.

Siento como una de sus manos va a mi entrepierna y ahí es donde pierdo la razón. Masajeaba mi clítoris con suavidad, hacia círculos y eso me estaba matando, sus manos parecían expertas en mi, es como si conociera cada parte de mi cuerpo, lo único qué sacaba eran fuerte gemidos de placer.

- no sabes las veces que soñé tenerte así, a mis pies rogándome por más - joder... donde había quedado la tierna niña que conocí - no sabes lo que me prende cuando gimes.