El precio de la Corona

Capítulo 5: Propuesta

La hora del té en la alta sociedad era un pequeño espacio usado para pequeñas reuniones sociales antes de la cena, generalmente Hinata y Hanabi celebraban de sus pequeñas reuniones en compañía de Shion, Temari y Moegi en la alcoba de alguna de ellas. Adoraban los aperitivos de las criadas, siendo ambas jóvenes inclinadas a los dulces y golosinas estos pequeños momentos siempre sabían a gloria.

Pero ahora agitando con una cucharilla sus tés frente a la directora de la Academia, ambas Hyūgas saben que no están por simple cortesía u ocio en el despacho de su directora. La señorita Shizune, mano derecha de la actual emperatriz Tsunade Senju es la encargada de mantener la calma entre los nobles estudiantes bajo su supervisión. Es muy conocido en los pasillos de la Academia que cualquier llamado directo de parte de la señorita Shizune solo significaban malas o buenas noticias.

No creían tener tanta suerte para recibir buenas noticias en un largo tiempo.

—Me es placentero ver como ambas han florecido en tan hermosas mujeres hasta ahora. La belleza de su madre sin duda las ha bendecido en cada una de ustedes.

Hanabi sonríe antes de asentir con su cabeza—. Muchos dirían que solo mi hermana ha heredado la belleza femenina de mi madre, por mi lado mantengo los rasgos de mi padre.

Shizune asiente en acuerdo—Esa cabellera castaña es inconfundible Hanabi-sama. Puedo notar el parecido con su padre incluso en su afición por las armas y la equitación.

Hanabi bufa por lo bajo—. Bueno, sin un prometido y con la guerra tocando a la puerta es más que comprensible que empiece a pasar más tiempo en los campos montando a caballo que en un salón aprendiendo a como caminar con la espalda recta.

Hanabi siempre ha sido una mujer imprudente, y esta vez no es la excepción haciendo que la habitación quede en silencio antes de que la directora se aclare la garganta para aligerar la incomodidad que las rodea.

—¿Usted también opina lo mismo Hinata-sama? — Esta vez la mayor se dirige hacia ella intentando desviar el tema de conversación—. Se dé buena mano que su caballo personal no ha salido de las caballerizas en un largo tiempo.

—A diferencia de mi hermana, soy muy torpe a todo lo que se refiera con lo físico —se disculpa con una sonrisa apenada antes de pasar uno de sus cabellos detrás de su oreja—. Además actualmente toda mi atención está centrada en el recital de ballet de la próxima temporada.

Los ojos de Shizune parecen iluminarse.

Hinata sabía de la gran afición que la Emperatriz y su ayudante tenían por aquel arte. Sería bueno ir aligerando la atmosfera tensa que Hanabi ha creado con sus comentarios despreocupados. Suspira mentalmente, ama mucho a su hermana menor, pero algún día de estos Hanabi la mataría de un infarto al corazón con su actitud tan despreocupada y traviesa.

—¡Grandioso! La emperatriz y mi persona estamos esperando ver el recital de apertura a la temporada social; con la señora Chiyo y el conde Kinimaro al piano creemos que esta será una de las mejores galas que veremos en años.

Los ojos de Hanabi se abren mínimamente—. ¿Conde Kinímaro? ¿Por qué no me suena conocido?

—Oh bueno, el señor Kinimaro ha preferido mantener su título nobiliario oculto de los estudiantes. Como saben no podemos permitir la entrada de cualquier persona a nuestras instalaciones así que pueden imaginarse que incluso el señor Kaguya pertenece a una posición social importante. Por favor, no se preocupen, son solo pequeños tecnicismos.

La duda aún permanece—Pero ¿Por qué no ha querido que los estudiantes sepamos de su ascendencia? —Pregunta Hanabi.

—Supongo que viene de Kiri ¿No es así señorita Shizune?