Cᴏʀʙᴀᴛᴀ - Sᴜɴɢᴡᴏᴏ

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Sungchan en un principio odiaba que Shotaro lo haya arrastrado al club de fotografía, él quería el de futbol pero bueno, pasaron cosas, entre ellas un favor que le debía a su amigo, no compro una cámara porque Shotaro tenía dos,

Ahora que lo piensa su amigo quería solamente su compañía para llegar al club dado que le costaba un poco entablar conversaciones con extraños, asi que Sungchan solo llevaba su presencia.

Por lo general era un poco aburrido para el pelirrojo mientras que Shotaro estaba feliz de poder hacer mini sesiones de fotos.

La primera fue con las mascotas de los miembros del club, una de las que más se quejaba Sungchan dado que los gatos de Lee Minho lo arañaba cada vez que podían. Después fueron a el bosque donde había un pequeño río y una vegetación que era un paisaje precioso, lástima que no tuviera el don de tomar fotografías bonitas y algunas le salían borrosas.

Las que más le gustaban eran las que tomaron en un orfanato, los niños realmente disfrutaron tomarse fotos de distintas formas e incluso se tomaron una foto con ellos .

Pero bueno, fuera de esa sesión no le había gustado otra. Bueno, hasta que llegó la semana pasada.

Sungchan estaba bastante cansado por los exámenes, tareas y demás actividades que dudaba en ir a la junta del club, pero como siempre Shotaro estaba ahí para llevarlo a la fuerza.

—Vamos, es la última reunión y luego se termina el ciclo para que puedas entrara al club de fútbol— dice Shotaro sujetando su brazo.

—Pero estoy cansado— pucherea un poco.

—Vamos, ¿Si? Lo prometo, la última a la que te llevo— levanta su meñique.

Sungchan ve los ojos brillantes de su amigo y suspira tomando su meñique.

—Espero y sea la última.

La reunión fue buena en dos aspectos.

1.- Había comida por ser la “despedida” de los integrantes de último año. Así Sungchan se la paso comiendo.

2.- Harían otra sesión pero está vez de todos los alumnos de la escuela.

Sungchan se estaba llevando un trozo de pizza a la boca cuando Johnny, el encargado del club, anunció eso y casi deja caer la rebanada.

Pensó en las posibilidades, bueno, en una posibilidad y es que podría que le tocarán los grupos de penúltimo año, exactamente el grupo “B”, exactamente al chico que se sentaba en el tercer asiento al lado de la ventana que daba al patio, exactamente el número 15 de la lista del profesor y exactamente a Kim Jungwoo.

Si se preguntan como sabe eso, fue porque un día se ofreció a llevarle su lista de asistencia al profesor Qian quien la había olvidado en el salón, tocó la puerta, escucho un “Adelante” y después tenía a 23 pares de ojos sobre él.

—Oh, hola Sungchan, ¿En qué puedo ayudarte?— dijo el guapo profesor que aparentemente estaba anotando algo en el pizarrón.

—Eh, usted de-dejo su lista en el sa-salon— se odio por tartamudear un poco pero no pudo evitarlo al ver a ese chico viéndolo.

—Que distraído soy, gracias Sungchan, déjala en el escritorio — le sonríe mostrando un poco sus hoyuelos, realmente es uno de los profesores más guapos.

Sungchan la deja en el escritorio tal y como el profesor indicó, por suerte no tropezó con sus propios pies por los nervios y se fue a su salón.

El profesor Qian tenía sus listas de acuerdo al horario, por eso fue fácil saber que grupo seguía, además al leer el nombre de su crush lo hizo ofrecerse para llevarla. Sabía el nombre de su crush por Shotaro, o más bien, por Yuta, primo de su amigo. Ese era el favor que le debía a Shotaro, se sentía apenado por preguntarle el nombre a Yuta, así que le pidió el favor a su amigo japonés.

𝑨𝒍𝒍 𝑨𝒃𝒐𝒖𝒕 𝑱𝒖𝒏𝒈𝒘𝒐𝒐⭒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora