Me enamore sin querer💞
Cap. 6
*Con el duque*
Después de tanto insistir naruto decidió darle un castigo a hinata, la reunión terminó un poco después, naruto estaba cansado no tenía ganas de seguir discutiendo con los nobles, casi todo el odiaba a los hyuga, él sabía que ese incidente solo era una excusa para hacerle pasar un mal rato a la princesa, el pensaba que el que saliera herida por sus fechorías era un castigo más que suficiente, sin embargo los nobles no lo consideraban igual, naruto se recostó sobre la silla y pensó en darle a hinata un castigo que no fuera ni tan severo ni demasiado blando, para que los nobles no siguieran molestándolo, después de unos días cuando el doctor dijo que ella estaba completamente recuperada fue a visitarla a su habitación, ella estaba de pie junto a la ventana mirando el jardín con sus pies descalzos, naruto la consideraba una princesa extravagante que le gustaba ir por ahí sin zapatos y con ropas ligeras, ya que su ropa era corto y mostraba más de lo debido, el se aclaró la garganta y le dijo
Naruto: princesa
Hinata se dio la vuelta al escuchar una voz masculina detrás de ella se volteó sus miradas se toparon, pero él inmediatamente la esquivó
Al ver al rey ella se preguntaba qué estaba haciendo ahí, ya que él siempre demostraba su odio cuando la veía, el habló
Naruto: veo que ya te encuentras mejor, debido a tu mal actuar recibirás un castigo como es debido, te trasladarás a una parte alejada del castillo durante unos días, no tendrás sirvientas a tu servicio, deberás apañártelas como puedas, quizás así valores el trabajo de las sirvientas y medites sobre tu comportamiento, hinata suspiro, naruto estaba haciendo lo mismo que su padre, dejándola en el olvido en un rincón del palacio, solo espero que ese lugar no estuviera en ruinas
Hinata: tengo derecho a dos comidas por lo menos?
Esa pregunta hizo que naruto se enojara, él la estaba castigando no matando de hambre
Naruto: por supuesto
Si iba ser así, lo demás le daba igual a hinata, y acepto obedientemente un castigo que no merecía, esa misma tarde fue llevada a la parte más alejada del castillo, ellos la dejaron en una pequeña casita que debía haber sido usada por el jardinero en algún momento, era pequeña agradable y acogedora, aunque se suponía que era un castigo hinata sintió que era una recompensa para ella, ya no iba a tener que vivir encerrada en su habitación y tendría una pequeña casa con patio, hinata intentó poner una expresión de tristeza ya que si las sirvientas la veían feliz iban a querer molestarla de nuevamente, las sirvientes le entregaron una cesta con
frutas y verduras y le dijeron este lugar está demasiado retirado, la princesa que prepararse sus propias comidas ya que no podremos venir hasta aquí a entregarla estamos demasiado ocupadas para eso, ademas su majestad dijo que este era su castigo, hinata sabía que ellas mentían, era obvio que ya no quería seguir haciéndose cargo de ella y pensaron que era una buena oportunidad para hacerlo, aunque por lo menos le haciendo dado los ingredientes para hacer su comida, ella tomó la cesta y e ingresó a la casa, las sirvientas se fueron inmediatamente, aquella casa ere pequeña pero está muy bien cuidada, también había una chimenea, así que cuando el invierno llegara no se moriría de frío, hinata sonrió ampliamente, lo que se suponía era una castigo ella lo vio como una bendiciendo allí no había nadie que la vigilara ni que le impidiera salir de su habitación pero debía ser cuidadoso y no acercarse mucho al palacio ya que si los sirvientes la veían podrían querer meterla en problemas, hinata dio un suspiro de alivio parecía ser que la suerte por fin le sonreí, pensó ella esa mujer quería verme sufrir sin embargo me termino haciendo un favor.
Hinata comenzó su nueva vida ahí en esa pequeña casa se sentía feliz, ella encontró un pequeño huerto que había cerca de la casa se dedicó a cuidar de él y se volvió su fuente de comida, ya que desde aquel día en que las sirvientas la habían dejado no habían vuelto a regresar.
Durante la primera hinata se dedicó a cuidar del huerto al igual que en verano y en otoño recogió de sus frutos y se preparó para el invierno, cuando el frío se volvió molesto hinata dejó de salir de su casa, ese fue el primer invierno en el hinata no odio el invierno, ese año tuvo comida caliente y fuego para calentarse, deseo que todos sus inviernos fueran como ese, un año más paso desde que hinata se casó con el rey, cuando llegó la primavera hinata cumplió diecisiete años, ella había dejado de ser aquella pequeña niña larguirucha que siempre había sido y por fin parecía una joven de 17 años, ella había tenido un crecimiento más lento ya que nunca había tenido una alimentación adecuada, pero desde hacía dos años había comenzado a comer bien y su cuerpo de desarrollo maravillosamente, ella estaba sentada en la entrada de la pequeña casa, desde ahí se veían las torres imponentes del castillo, ella se alegró de que la hubieran enviado a esa pequeña casa y no a una de esas torres que se alzaban hacia el cielo, lo agradeció profundamente ya que aunque se habían olvidado de ella, hinata no lo sintió de esa manera, al contrario, sintió que por primera vez en su vida estaba viviendo y no sobreviviendo como lo había estado haciendo toda
su vida.
Ella elevo su mirada al cielo, estaba claro y despejado, brillaba tan hermosamente que hinata deseó poder verlo todos los días.
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Me Enamore Sin Querer
FantasyPara poner fin a la guerra un rey se casa con la hija de su enemigo sin saber que el se enamoraría de ella... Agradecimiento total a @laura Castro quien me ayudo con los primeros capítulos Historia adaptada del libro "esposa olvidada"