Todo por ti [Número Cinco y tú]

Capítulo 7

— ¡Cinco! ¡Chicos! ¡Por favor! ¡Alguien! —Rogaba que alguien más apareciera mientras observaba todo sin entender, el portal que me trajo desapareció, mis hermanos no habían caído y empecé a desesperarme, no entendía nada-

No hubo una respuesta alguna, me sentí... abandonada, como cuando alguien deja a un perro en la carretera abandonado, me di la vuelta para tratar de ubicarme y lo vi, un hombre de pelo corto y castaño con una camisa a cuadros y parecía ser ya de 35 años mal cuidados, el solo me miraba asombrado y algo asustado

— ¡Hey! ¡Oye! —Me acerqué a el en busca de ayuda-

— T-Tú acabas de caer de-del cielo —Tartamudeo—

— Disculpa, ¿En dónde... Qué día es Hoy? —Pregunté y el me miraba atentamente—

— 2 de Enero de 1958 —Respondió y sentí como la presión se me bajaba—

— Mierda... Mierda... ¡MIERDA! —Me quejé, empezaba a desesperarme, aún ni había nacido, no habían señales de Cinco o alguien más y estaba varada en una época muy racista, misógina y machista, perfecto para una niña desorientada sin un adulto responsable—

— ¿De dónde eres pequeña? —Preguntó el ya acercándose a mi, en cuanto lo escuche y lo ví me puse alerta, el se alejó— Tranquila, no quiero lastimarte, me gustaría entenderte ¿De dónde eres? ¿La SIA? ¿El Pentágono? ¿La ONU? ¿El FBI? La KGB —Afirmaba y yo solo fui capaz de suspirar—

— Ofréceme una vivienda por un tiempo y te respondo —Negocié, necesitaba un lugar donde quedarme—

El chico asintió y me llevo a su departamento, yo me mantenía alerta en cualquier situación, en cuanto entré a su departamento me dirigí a la maquina de café, me serví una taza de café preparándome para responder sus preguntas

— Primero ¿Tienes un nombre? —Cuestiono y yo tomé un sorbo a mi café—

— _____, soy _____ ¿Qué hay de ti? —Cuestioné—

— Eliot, soy Eliot

— Un placer Eliot

— ¿De dónde eres? -Siguió su cuestionario-

— Soy de un futuro lejano, vengo de un futuro lejano, el 2019 para ser exactos, donde la humanidad nace con habilidades, esas habilidades causaron el fin del mundo y uno de mis hermanos hizo que viajará en el tiempo, ahora estoy varada aquí, pero se que mis hermanos vendrán por mi tarde o temprano —Mentí, prefería tenerlo controlado, aunque hasta yo quería creer en mi mentira, quería creer que ellos si volverían por mi—

— Santo cielos —Él se mostró totalmente sorprendido, se acercó a mi analizándome, no se veía con malas intenciones pero me incomodaba tal cercanía-

— Acércate un poco más y derretiré tu cerebro —Amenacé y el se apartó de mi-

— Claro, necesitas tu espacio, si... —Habló asustado—

— Bien, Eliot, ahora necesito que me consigas, café negro, pan integral, crema de maní y malvaviscos 

Narra Número Cinco

Caí por el portal, caí en lo que parecía ser un callejón, pero en cuanto puse mi vista en frente, vi como todo estaba destruido, había un edificio en llamas mientras que se escuchaban disparos, habían rusos corriendo, todo era un caos, me acerqué a unos escombros donde había un periódico "Los soviéticos atacan Estados Unidos" era el titular

— Esto no esta bien... -Murmuré mientras me levantaba y caminaba por la calle hasta— ¿Qué demonios hemos hecho ahora? —Me pregunté en vos alta y sentí como algo invisible me jalaba alejándome del tanque, justo entonces el tanque a mi lado disparo—