¡Bienvenido a Casa!

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—¡Kim Jeongin y Kim Jeonghan vengan ducharse en este instante!

Y ahí estaba un pobre castaño corriendo por toda la casa tratando de agarrar a dos revoltosos de 7 años quienes corrían por la casa desnudos y llenos de barro.

La hora del baño no era fácil en la casa Kim-Jung, más bien era toda una guerra de papá vs hijos. El omega Jung Hoseok se preguntaba porque sus hijos odiaban ducharte y es que era la peor parte del día. Hoseok siempre terminaba más bañado que sus propios hijos y es que cuidar de cuatro niños no era fácil y él muy bien lo sabía.

Dos gemelos de siete años, Kim Jeongin y Kim Jeonghan. Esos pequeños eran su más grande adoración pero también su peor pesadilla, tenían demasiada energía y eran demasiado traviesos ¿No que un gemelo era más tranquilo que el otro? Para Hoseok ese dicho era mentira, los dos eran iguales físicamente y enérgicamente.

Luego estaba Kim beomgyu el pequeño de cinco años, este era algo más tranquilo y Hoseok lo agradecía, era un pequeño realmente dócil y que hacía caso, la energía que no tenía Beomgyu la tenían los gemelos a veces eso le preocupaba a Hoseok que su pequeño ángel fuera tan tranquilo, ¿Acaso era hijo de Min Yoongi? Hoseok estaba muy seguro de que su esposo Kim Namjoon era el padre de Beomgyu, pero lo dudaba a veces cuando veía lo tranquilo que era su bebé.

Luego estaba el más pequeño de la casa, el último de la fábrica. El bebé de 1 añito, Kim Jungkook. En esos momentos Hoseok lo cargaba en un canguro mientras perseguía a los gemelos, este solo reía de manera escandalosa ya que en su cabezita aquella situación era muy divertida, agitaba sus gorditos brazos y piernas mientras que Hoseok trataba de buscar a los gemelos. El castaño temía que Jungkook fuera un futuro sucesor de Jeongin quien a veces parecía el líder de las travesuras.

—¡Si no vienen en este instante se quedan sin jugar y no irán a la casa de Yeonjun! —dijo Hoseok de forma autoritaria a los traviesos que ahora se escondían detrás del extenso sofá. —¡Jeongin, Jeonghan! —reclamo el castaño, el pequeño Jungkook se removia en el canguro mientras balbuceaba palabras indescifrable.

—¡Cuartel, hablan los agentes 111 y 222! ¡Hemos escapado del enemigo pero no ha acorralado! —el pequeño Jeongin simuló hablar por su reloj plástico de spiderman. — atacaremos y recataremos al mini agente 333! —Miró a su hermano y los dos sonrieron de forma maliciosa listos para el ataque.

Salieron corriendo de su escondite en donde estaba su papi y se enrollaron en las piernas del mayor mientras que clavaban sus pequeños colmillos en las piernas de su papi.

—¡Yah! ¡Jeongin! ¡Jeonghan! ¡Basta! —Hoseok ya estaba comenzando a sentir el verdadero estrés y a él realmente no le gustaba regañar a sus niños.

—¡Papi hay mucha agua en el baño! —escucho la voz del pequeño Bemgyu desde arriba— ¡Papi ven! ¡Bolt quiere meterse al agua! —Oh no, Bolt el pequeño perrito blanco lo había olvidado por completo.

¿Se valía llorar en estos momentos? De verdad odiaba la hora del baño desde que nacieron sus hijos. Lo peor vino cuando de la nada Jungkook comenzó a llorar y el castaño se dio cuenta que su bebé se había hecho pis.

Momento de optar por el suicidio supuso Hoseok.

—¡Basta! —Grito Hoseok a los Gemelos que no lo dejaban moverse y lo mordian pero no hicieron caso.

Ya Hoseok iba a comenzar a llorar cuando de repente escucho aquella voz. La voz de un Ángel tal vez, de un Dios, de un Arcángel.

Su padre ha dicho que basta—Una autoritaria voz de mando de un Alfa Líder resonó por toda la casa, Hoseok sintió un escalofrío pero también un alivio al escuchar la voz de mando de su esposo, Namjoon había llegado a casa.

De repente los gemelos soltaron a Hoseok afectados por la voz de su padre, incluso Jungkook dejó de llorar al reconocer la voz de su padre y Beomgyu dejó de gritar.

—¿Hora del baño? —El hombre alto vestido con un uniforme blanco lleno de pequeñas medallas en la parte derecha le preguntó al castaño mientras lo miraba a los ojos.

—S-si.. Si! —Hoseok estaba algo aturdido por ver a su esposo ahí. ¿No que llegaba dentro de dos meses más? ¿Que hacía ahí? —¡N-niños a bañarse! Vayan al baño! —Los gemelos lo soltaron y corrieron al baño. La presencia de aquel alfa descolocaba a todos menos al pequeño Jungkook quien comenzaba a gritar "Ppa" con mucha euforia.

—Creo que llegue en un mal momento. —El Alfa dijo riéndose viendo como su casa estaba patas arriba y niños desnudos por ahí.

El castaño camino rápidamente hacia donde se encontraba su esposo y lo abrazo teniendo cuidado de que Jungkook estaba en el medio.

—¡N-no me avisaste que llegarías tan pronto! ¡Me dijiste que llegabas dentro de dos meses! ¡Me matarás de un susto Kim Namjoon! —A este punto Hoseok se encontraba llorando, tantos meses sin ver a su esposo le afectaba incluso si llevaban ya diez años de relación y 7 de casados. —¿P-por que no me dijiste? ¿De verdad eres tú? —Hoseok tomaba la cara del más alto y lo tocaba comprobando si aquello no era una ilusión causada por su estrés.

—Termine el proyecto más rápido de lo pensado y decidí llegar de sorpresa—Namjoon lo envolvió el sus brazos y escondió su cara entre el cuello de su omega donde justamente estaba la visible marca, expulsó sus feromonas de Alfa para que su castaño se relajará porque noto aquel estrés y emociones acumuladas que tenía su omega, lo sentía a través de la marca. Rió cuando sintió una cabeza a su lado y unas manitas regorditas que lo golpeaba de manera involuntaria.

—¡Eres un tonto como vas a llegar así! ¡Te hubiera preparado una gran bienvenida! —Hoseok tomo la cara de su alfa y sin dudarlo le dio un beso cargado de mucha alegría y desesperación.—! Como-beso-Te-otro beso-atreves-beso-hacerme esto¡— le dio besitos por toda la cara.

—Si mi vida, estoy aquí—dijo Kim entre risas y besos. Un pequeño chillido se escucho, era el pequeño jungkook pidiendo atención. —Yyy Tú estas más grande y gordito—Namjoon inclino un poco su cuerpo y saco al bebé del canguro cargandolo entre sus fuertes brazos, el bebé solo pataleaba y balbuceaba de emoción. —Oh, parece que alguien tuvo un accidente—Dijo hablándole al bebé y oliendo su ropita.

Y antes de que Hoseok pudiera decir algo, se escucharon gritos desde la parte de arriba.

—¡Paaapii, papiii! ¡Jeongin no me quiere dar mi patito!

—¡Mentira papi, el me lo presto y ahora me lo quiere quitar!

—¡Papi Jeonghan metió a Bolt a la bañera!

—¡Mentira, Bolt ya estaba aquí fue Beomgyu!

—¡No fui yo papá, yo no hice eso!

Namjoon río divertido y Hoseok simplemente suspiro, y luego le sonrió a su esposo dándole un pequeño beso.

—Bienvenido a casa amor.

¡Crónicas de la Familia Kim Jung! | namseok Donde viven las historias. Descúbrelo ahora