Bendita noche de insomnio,
Estoy extasiado entre tinta
Y café con rimas extintas
Escritas por el demonio
Demonio llamado ausencia
Que clavas tus garras en las entrañas
Ella gélida sé que no me extraña
Me hundo en esta limerencia
Ahora mi cuerpo yace derrotado
Trémulo, vacío sin remedio
Vacío en este asedio
Después todo luce calmado
Bendita noche de cristales soñolientos
Llévame aunque sea muerto
A su regazo desierto
Y perder en ella mi último aliento.
