Capítulo 3 | Perdón

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Salí por la gran puerta del hospital, sintiendo como el sol pegaba a mi cara y el viento fresco enfriaba mi cuerpo.

Había estado un mes en observación y vaya que fue el peor mes, tenía cada semana controles para ver mis órganos y mi riñon, también hicieron otro lavado estomacal, constantemente tenía náuseas y ese tipo de cosas.

Estuve todo un mes en una camilla parandome solo para ir al baño, claro, Klaus estuvo todo el tiempo conmigo y no es como si recibiera visitas. Aunque, en el tiempo que estuve ahí entable una linda amistad con Jackson, el practicante que ayudaba a el doctor Jhonson.

Recuerdo que al inicio era insoportable escuchar como trataba de entablar alguna conversación conmigo, pues no quería hablar con nadie más que no fuera Klaus, aparte de que quería estar sola para poder llorar un poco, pero Klaus insistía en que no debía dejarme sola. Solo podía llorar cuando iba al baño, era como mi escondite y el único lugar en donde podía estar sola.

Una vez pasaron los días comencé a hablar un poco más con enfermeras y doctores, si iba a estar ahí por tiempo indefinido al menos tenía que hablar con alguien que no fuera solo Klaus.

Entramos al auto, íbamos a ir a la academia y después iríamos con la psicóloga, tenía cita dos veces a la semana y los días que estuve en el hospital decidí prolongar la ida a la psicóloga ya que no me sentía lista, no me sentía lista para hablar de todo. Decidí que una vez saliera del hospital iria si o sí.

Dejamos mis cosas en la academia y ya me encontraba yendo hacia donde supuestamente me ayudarían a “recuperarme mentalmente”

—Y... ¿Seguirás en contacto con Jackson? —asentí unas tres veces.

—Me dio su número de teléfono —respondí en murmuro.

— ¿Te gusta? —me giré a verlo con el entrecejo fruncido.

— ¿Es broma? —solté irónica— ¿mi novio acaba de fallecer y piensas que ya me gusta alguien más? —Klaus suspiró cerrando los ojos y echando la cabeza hacia atrás.

—Ocho... Cinco murió hace un año.

—Parece como si fue ayer —giré mi visita hacia cualquier lado evitando la vista de Klaus— duele como si hubiera sido ayer. Y aunque pasen treinta años no me podría enamorar de alguien más, el solo pensar en que me guste alguien más me hace sentir como si... como si le estuviera siendo infiel y no haré eso —me deje caer en el asiento pesadamente.

Klaus no respondió, pero pude sentir que negó con la cabeza en desaprobación.

Llegamos al lugar, era un edificio bastante grande. Nos adentramos al lugar pasando por recepción y subiendo el ascensor al piso trece.

Había otra recepción la cual era de ese piso, en dónde confirmamos mi cita y esperamos unos minutos sentados. Mi pierna subía y bajaba constantemente.

— ¿Está todo bien? ¿no te duele algo? —preguntó al ver mi hiperactividad, negué levemente pasando un poco de saliva.

—Solo estoy algo... Asustada.

—Sabes que esto es poco a poco ¿no? —asentí levemente.

— ¿____ Hargreeves? —alcé la mirada viendo a una señorita de unos ¿treinta años?

Me levante de mi lugar y al ver que no obtuvo respuesta me dejó pasar. Dentro era un lugar lindo, cómodo. Habían tres sofás, una grande para tres personas y otros dos individuales, también habían dos tazas de café y un termo que contenía lo antes dicho.

—Puedes tomar asiento en dónde quieras —señaló los sofás. Asentí para después sentarme en uno de los sofás individuales— bien... ¿Cómo estás, ____? —preguntó una vez las dos tomamos asiento.

𝖬𝖨 𝖯𝖤𝖱𝖲𝖯𝖤𝖢𝖳𝖨𝖵𝖠² ˖ ׂ⋆*ૢ✧ 𝐓𝐇𝐄 𝐔𝐌𝐁𝐑𝐄𝐋𝐋𝐀 𝐀𝐂𝐀𝐃𝐄𝐌𝐘 [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora