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Nivel 4

Ambos llegaron al baño de arriba en un minuto, Harry los hizo entrar y cerró la puerta con seguro detrás de ellos.

Harry no perdió ni un segundo para tomar a Louis fuertemente de la cintura y jalarlo hacia él, desapareciendo toda la distancia que había entre sus cuerpos. El repentino movimiento provocó que Louis soltara un jadeo involuntario.

Harry tenía la mandíbula aparentada y la mirada penetrante, Louis podía sentir que su cuerpo estaba caliente contra él y comenzó a sentirse ansioso.

- Recárgate en el lavabo - Harry dijo sin perder el contacto visual, el tono de su voz no había cambiado, seguía siendo muy grave.

Esto desconcertó a Louis, y entonces se dio cuenta de lo que había estado esperando que Harry hiciera, pero desechó ese pensamiento antes de que llegara - ¿Qué?

- Lo que oíste Tomlinson, las manos en el lavabo, mirando al espejo.

- ¿Para qué quier... - Louis no pudo terminar su pregunta, porque en ese momento Harry lo sujetó de la barbilla, fue muy rápido, y fuerte, Louis no lo vio venir.

- Te dije que obedecieras. Es la última vez que tengo que repetirte algo tres veces, vas a hacer lo que yo diga ¿queda claro?

A Louis se le cortó de golpe la respiración y el corazón le aceleró al máximo, tragó saliva pesadamente y asintió.

- Palabras, bonito. Quiero escucharte - Harry no soltaba la mandíbula de Louis y sus ojos se veían más oscuros de lo normal.

- Sí, queda claro - Louis se arrepintió en el momento que dijo estas palabras, sobre todo porque no sabía ni de dónde habían salido, no estaba pensado con claridad.

- Eso está mejor - Dijo Harry sonriendo y soltando el rostro de Louis - Ahora al lavabo.

Louis respiró profundo y caminó hasta quedar mirando al espejo, con las mano a cada lado del lavabo. Miró reflejado a Harry, quien estaba a unos pasos de él y lo observaba atentamente.

- ¿Ahora qué? - Preguntó Louis nervioso.

Harry respiró profundo y se acercó a Louis, mirándolo a los ojos por el espejo. Cuando quedó a sólo centímetros de él, Harry puso la mano en la espalda de Louis.

- Ahora inclínate para mí, bonito - Con estas palabras aumentó la presión de su mano, haciendo que Louis se inclinara hacia adelante, hasta que su pecho tocó el lavamanos.

La respiración de Louis ya se escuchaba entrecortada y su palpitar no había bajado el ritmo, se sentía muy extraño, y sobre todo estaba ansioso, no entendía lo que Harry estaba haciendo.

El suspenso y la anticipación lo tenían abrumado, sentía la necesidad de gritarle a Harry que le dijera de una vez lo que iba a hacer, pero al mismo tiempo quería hacer lo que le pedía.

- ¿Te gusta la atención, bonito? - La voz de Harry sacó a Louis de sus pensamientos, su mano seguía recargada en la espalda de Louis.

- ¿A qué te refieres? - Louis se sentía muy vulnerable en esa posición, Harry tenía toda la ventaja.

- Es una simple pregunta, parecía gustarte mucho allá abajo - Entonces Louis comprendió, se refería a Stan. Louis sintió cómo la mano de Harry subía de su espalda a su nuca - ¿Te gusta que te miren?

El agarre en la mano de Harry se hizo más fuerte, haciendo presión con los dedos en los costados del cuello de Louis, lo que provocó que éste soltara aire ruidosamente.

- Yo, no, no lo sé - Louis no sabía qué decir, nunca se había sentido tan nervioso.

- No lo sabes - Harry lo dijo despacio, bajando sus manos a las caderas de Louis, recorriendo todo el camino por su espalda lentamente, hasta posicionar una mano a cada lado de su cuerpo.