Curiosidad

Parte II

— ¿Por qué revisas mis cosas? — le reclama un enojado Torao quitandole la lapto a Luffy.

Luffy sólo se ríe y se acuesta en el sofá mirando de forma traviesas a Law.

— Pensé que te habías besando con el puntiagudos o con el dinosaurio — dice Luffy con una gran sonrisa — Tal vez alguna chica de tus clase, Chopper me contó que eres muy popular con ellas.

— No es asunto tuyo — repite Law para después subir las escalera, ¿como se atrevía el Mugiwara revisar sus cosas?

Law llega a la habitación y guarda la computadora en su bolso, trata de calmar los latidos de su corazón y la ansiedad que lo estaba comenzando a invadir. Luffy no tenía ningún derecho de leer sus mensajes, menos revisar su lapto. En eso una idea tenebrosa lo invadió, ¿y si leyó su diario?

¿Se daría cuenta lo que en verdad siente por él?

Law suspira, tratando de calmarse. No pudo saber sobre su diario, porque estaba en otra parte de los archivos y con contraseña incluida.

"Luffy es un hombre libre, no tiene atadura. Si fuera tú, no me haría ilusiones"

Law cierra los ojos, porque en ese preciso momento tenía que recordar las palabras de Zoro-ya, no es que el chico de cabellos verdes fuera malo, sólo le estaba advirtiendo que Luffy era un hombre libre y nunca tendría una relación seria.

Él y Luffy eran tan diferentes, que no podrían estar juntos. Y esos sentimientos que tenía por el Mugiwara tenía que enterrarlos muy en el fondo de su corazón o deshacerse de el, si tan sólo los sentimientos fueran comos órganos del cuerpo humano y quitarlos cuando estaban siendo daño.

— Torao, ¿Estás bien? — pregunta Luffy a sus espaldas.

— ¿Podrías dejarme sólo por un rato? — pregunta él sin ni siquiera mirarlo — En estos momentos no me siento bien.

Luffy no sabía que hacer, aprieta las manos en forma de puño. ¿Por qué con Torao las cosas siempren eran difíciles? ¿Desde cuando se rompió esa amitad que formaron desde pequeño? ¿Cuando fue que se separaron tanto? ¿Y porque le dolía ver a Law cada vez más alejado de él?

Trato de buscar respuestas, desde las más sencillas hasta las más compleja.
Hasta le pidió consejo a Robin, Sabo y Brooke, pero aún así se sentía perdido. Es como si Law fuera la luna y no la podía alcanzar, pero se veía tan cerca y era imposible de tocar.

— Torao — lo llama Luffy y con un nudo en la garganta pregunta — ¿A ti te gusta Kid?

Pregunta tonta lo sabía muy bien, se lo había explicado Sanji que Kid y Law solo eran amigos, pero Luffy no podía evitar que la sangre hirviera cada vez que lo veían juntos. Él fue el primer compañero de Law, con él salía de excursión, con él se quedaban largo fines de semanas juntos haciendo pijamadas, no con Kid.

Sentía que el puntiagudo se lo estaba robando, que el dinosaurio se lo estaba robando, que hasta el gordo feo de Barbanegra se lo quería robar.

Y Torao solamente era de él, de nadie más...

— No — dice Law sacándolo de sus posesivos pensamientos — Pero no te negaré que estoy enamorado de alguien, pero él nunca me hará caso.

Luffy siento su corazón romperse en ese momento y que la sangre se le subía a la cabeza, comenzó a sudar frío y unas ganas de vómitar le invadieron todo el cuerpo.

— ¿Quién es? — pregunta Luffy con un nudo en la garganta, ¿Quién era la persona que le estaba quitando a su Torao?

Observa como el más alto se levanta y con la mirada baja se da la vuelta, dando unos pasos hacía donde estaba él. Luffy se estaba impacientando, quería que Law fuera directo una vez en su vida, sin tantos rodeo.