05 ; cobra kai

1.6K 233 163
                                    

me ayudan comentando y votando así sé que les gusta🫶🏻💞


CUANDO FINALMENTE logré escapar del dojo, después de que Johnny nos tuviera haciendo entrenamiento intenso lanzándonos pelotas de golf y dejándonos sin aliento, me dirigí a casa para luego tener que asistir a una de esas tediosas cenas que las fam...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CUANDO FINALMENTE logré escapar del dojo, después de que Johnny nos tuviera haciendo entrenamiento intenso lanzándonos pelotas de golf y dejándonos sin aliento, me dirigí a casa para luego tener que asistir a una de esas tediosas cenas que las familias adineradas de Encino suelen organizar. A pesar de haber tenido conflictos previos con mis padres, esta vez decidí aceptar sin quejarme.

Frente al espejo, intenté colocarme una corbata bordo sobre mi camisa. Pasé una tira por delante, otra por detrás, hice un nudo y... fallé.

En el segundo intento, no hubo suerte.

—La tercera es la vencida —, murmuré para mí mismo, volviendo a mirar al espejo con la corbata desordenada y la camisa arrugada, nada parecía tener sentido. Frustrado, lancé la corbata en cualquier lugar y me di cuenta de que no sabía atar esas malditas cosas del diablo. Dejando atrás el espejo, tomé una lata de cerveza que había comprado de camino a casa.

—¡Chicos, nos vamos! —escuché a mi madre gritar desde la sala. Tomé el último sorbo de cerveza, guardé algo de dinero y mi teléfono en los bolsillos de mi saco.

Al salir de mi habitación, me encontré con mi hermana y mi padre, todos apurados por llegar a la puerta donde estaba mamá. Miré a mi padre, quien ni siquiera se molestó en saludarme cuando llegó a casa. Sam se enganchó en mi brazo sacándome del trance y reaccioné rápidamente.

—Hueles a cerveza. —susurró Sam en mi oído. Solté una risa discreta y al girar la cabeza vi a Anthony junto a papá, quien sí llevaba una corbata puesta porque papá lo había ayudado.

Nos apuramos a bajar al escuchar nuevamente el llamado de mamá y subimos todos al auto.

—Pudiste haber vestido algo más formal, al menos una corbata, te hemos regalado varias. —comentó papá con razón. Podría haberme arreglado más, planchado la camisa quizás, pensé que al ser negra las arrugas no se notarían. Podría haber usado zapatos formales en lugar de mis converse rojas gastadas, pero no me atrevía a pedir otro par. Podría haberme puesto una corbata, pero no sabía cómo hacerlo.

—Ya, lamentablemente no vinieron con un manual que te enseñara a usarlas. ─inevitablemente me puse a la defensiva, porque es a lo que últimamente recurro cada vez que tengo una pelea con ellos.

─No te costaba nada buscar un tutorial, ya que andas todo el día en el teléfono. ─replicó mamá esta vez.

Sí mamá, podría haber buscado un tutorial en YouTube fácilmente con mi teléfono, pero quería que papá me enseñara como hizo con Anthony.

No iba a dejarme afectar por discutir con ellos una vez más; eso era lo que había estado haciendo últimamente. Bajamos del auto, mamá y papá se mezclaron entre los adultos mientras Sam y yo nos dirigimos directamente hacia la mesa de comida, lo único rescatable en esos eventos.

ALL TOO WELL, Eli Moskowitz (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora