Memorias de un suicida.

La pelea.

9/05/15
Querido amigo imaginario:

Hoy es sábado, por lo que no hay escuela y tenía todo un día para hacer lo que quisiera. Quizás me quedaría todo el día dentro de casa. Patrick estaría por ahí intentado hacer de mi una bolsa para golpear, y prefería no arriesgarme en lo absoluto.
Salí de mi cama y fui a cepillarme los dientes, vi mi cabello y estaba de color verde ¡Seguro fue Sofia! Esa maldita...
Sofia es mi hermana menor, tiene 11 años, cuando quiere es muy malvada.
Baje a la sala y allí estaba ella, inmediatamente fui a su lado y le apunte mi cabello, ella rió y apunto abajo de el sillón, me agache y allí estaba Richard quien salio corriendo para afuera, lo seguí y me tire encima de el, causando que los dos cayéramos al piso.
Yo estaba arriba por lo que cuando se dio vuelta, lo tome de las muñecas y le replique sobre mi pobre cabello sin mencionar que parecía Jake Long. El solo se río, maldito. Siempre me hacia bromas de este tipo, debí suponerlo. Lo solté, y me pare. Parecía que estabamos haciendo otra cosa. (͡° ͜ʖ ͡°)
Ahora tendría que quedarme con el pelo así quien sabe hasta cuando. No, yo no hago cosplay. Ya estaba pensando que alguien me preguntaría eso.
Mientras Richard se sentaba en el piso lo patie. Él se quejo, se merecía eso y mas. Bueno, como sea. Me preguntó si quería acompañarlo al cine, no creo que sea "momento de ir a un cine" cuando:
1-. Tu pelo parece vomito de perro.
2-. Un grupo de locos te busca para hacerte mierda.
3-. ...No se me ocurre otro.
Le negué su invitación casi instantáneamente, pero como siempre Richard era capaz de meterme en una bolsa de basura y llevarme así sin importar que diga la gente o que llamen a la policía por supuesto secuestro.

Ahora estaba sentado en una silla, mientras cierta persona ataba mis manos con una soga y murmuraba algo sobre una sartén y mi cabeza. Mami tengo miedo. Era mejor no resistirme. Al final cuando Richard llego con una sartén en la mano, acepte que vayamos a ver la estúpida película...sin sartenes.
Llegamos al cine y Richard decidió ir a ver "Las aventuras de Piji, Galaco y Mari". ¿Quien le pondría de nombre a su hijo Piji?
Eran las 7 de la tarde cuando salimos de ver la película, ahí dentro la gente se reía demasiado, no se si era por mi pelo, por el chico que vomito en medio de la función en la cabeza de un pelado que tenia adelante o por la pelicula. Había estado bastante graciosa.
Piji siempre estaba hablando de cosas obscenas. Galaco lo único que podía decir era "Maincrá", y a Mari le gustaba mucho volar con su trigesa.
Aun había un poco de luz del día, pero estaba oscureciendo, teníamos que volver. Mamá me mataría, si aun me protege.
Llegamos a una calle donde casualmente no habia nadie. Hacia demasiado calor para seguir caminando, aun cuando el sol ya había desaparecido. Esperamos por un taxi unos diez minutos, hasta que apareció uno pero estaba ocupado.
Decidimos seguir caminando. En el camino nos encontramos con un chico tirado en el suelo, en medio de la vereda. Richard pensó que estaba muerto y que mejor lo dejáramos ahí sino queríamos que nos culpen de asesinato. El chico estaba dado vuelta y no se podía ver su cara, pero si estaba respirando. Lo patee un poco y nada. Sentí un golpe seco y algo que se caía, cuando mire para mi costado estaba Richard en el suelo tomándose la cabeza y detrás de el estaba uno de los amigos de Patrick. No, por favor no ahora.
Mire para delante mio donde anteriormente se encontraba el chico que estaba tirado en el suelo, ahora estaba parado y tenia un cinto en la mano.
Por qué siento que Richard tenia razón con el "Dejemoslo desangrarse si esta muriendo".
Tome a mi compañero de un brazo y lo arrastre a la calle hasta que se paro por si solo. Estaba un poco mareado aun por el golpe que le había dado ese idiota con un palo de béisbol.
Les pregunte que querían aunque ya era obvio. En eso apareció Patrick y el chico al que el "anciano" le había quitado su dinero, no podía recordar su nombre. Los nervios del momento no ayudaban tampoco.
Patrick se dirigía a mi como "El cerdo" y Peppa. Estaba hablando cosas sin sentido, no tenia ganas de poner atención, solo correr de ahí, sin antes no darle un buen golpe este estúpido en la cara. Estábamos acorralados por ellos, contra una pared, tenían palos y nosotros nada.
Richard se puso a buscar algo en su mochila, haciendo que los demás se pongan alertas. Uno de ellos intento quitársela pero Richard saco una sartén de ahí adentro, la misma que pensaba usar en mi si me reusaba a ir al cine y le pego en la cara a uno de ellos, haciendo que caiga al piso. Patrick al ver eso se enfureció y comenzó a golpearnos junto a sus amigos. Richard empezó a pegar sartonasos para cualquier parte y casi me pega a mi, pero no funcionaba. Estábamos en el piso.
En eso escuche la voz de otro chico, no eran ellos, se me hacia conocida. No podía ver mucho, estaba tirado y cada vez que me movía me dolía todo.
Un segundo después pude ver que Patrick salia corriendo, seguido de sus amigos. Quizás venia la policía, si como si los policías se vayan a preocupar por tal tontería. Ellos ayudaban a la gente como Patrick.
Sentí unas manos tomandome de la espalda y haciendo que me siente, lo mismo habían echo con Richard. Mire para ver quien era el que estaba ayudando. Era el chico de cabello blanco que nos había ayudado el otro día. Me preguntó si estaba bien, a lo que le respondí que si solo que estaba un poco adolorido. Richard parecía inconsciente, aun con la sartén en una mano.
El chico peli-blanco, se llamaba Harry, tenia 17 años y esta semana había vuelto de un viaje por Japón, se quedaría a vivir aquí. Me había contado todo eso en el camino a mi casa, el llevaba a mi amigo alzado como un bebé y curiosamente Richard se estaba chupando el dedo.
Llegamos a mi casa y le agradecí por habernos ayudado. Me paso al bebé, digo a mi compañero que estaba despertando por fin, y se fue.

-Thomás Lind.