Capítulo 7: 🥀Aquellos que sufren de Amor🥀

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El sol se hallaba en lo más alto del cielo

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El sol se hallaba en lo más alto
del cielo. El reino de Beyorn se encontraba de celebración, sus reyes orgullosos y felices. La reina Editera sonreía sentada regia y elegante tras su futura nuera, contemplando el gran trabajo de las sirvientas.


—Es usted muy hermosa princesa, el príncipe quedará prendado con su hermosura —.

Dijo la sirvienta personal trenzando dos mechones de sus cabellos negros y pasándolos alrededor de su cabeza, dando la impresión de que llevaba una corona

La princesa no respondió nada en absoluto ante tal halago. Ella se sabía hermosa, elegante, etérea e irresistible y todos estos años se había esforzado para demostrárselo a Edward. Un toque suave se escuchó tras la puerta, una sirvienta abrió dando paso a la reina Sofía.

—Reina Editera, me alegro que vos vele por los preparativos de nuestra novi.

Afirmo esta sonriente y acto seguido se aproximó a su hija. A quien en este instante vestían

—El vestido rojo confeccionado a tu medida te queda precioso. El príncipe Edward debe estar encantado de casarse contigo

La Reina Editera ocultó una mueca de disgusto. Por desgracia tuvo que trabajar mucho para convencer a su testarudo y amado hijo para que tomase por esposa a Stefany. Al final lo consiguió, en parte gracias a su difunto esposo.

—Tu madre tiene razón, a mi hijo le encantará verte pronto —dijo al fin Editera tras un largo silencio de reflexión.

Ambas madres siguieron lisonjeando a Stefany, a la vez que ordenaban a las sirvientas que ponerle a la chica. Cuando Stefany se halló lista para avanzar al altar sonrieron satisfechas. La boda se celebraría en la Santa Iglesia, invitados por supuesto personajes importantes de la corte de ambos reinos vecinos. El matrimonio entre sus hijos representaba un puente entre el reino de Beyorn y Wyndham.

***

Los invitados se encontraban sentados en sus respectivos asientos. En el altar un príncipe se hallaba impaciente, deseoso de acabar de una vez lo que él consideraba una farsa. Y a pesar de todo, con la muerte de su padre y monarca no pudo negarse. Fue hace un año y debido a ello fue obligado aceptar una unión que no ansiaba. La música del órgano dió comienzo a la ceremonia, Edward, todo de negro usando chaqueta, calzas y pantalones hasta la rodilla, se mantuvo nervioso y a la espera de la novia. Se cuidó de mostrar su mejor sonrisa.

Un paso tras otro dado por Stefany en compañía de su padre el rey Hans anunció la llegada de la novia. Los invitados que la vieron primero soltaron exclamaciones ante la belleza de la futura esposa y reina de Beyorn. Ella llevaba un vestido rojo con bordes y decoraciones doradas; vestimenta típica de una novia la cual representaban realeza y poder. El vestido poseía un escote vertical con reborde dorado, largas túnicas cubrían sus brazos y sobre su cuello ostentaba un collar de oro. Una corona portaba su cabello negro suelto, con unos mechones unidos y trenzados. Parecía una bella rosa en medio del jardín moviéndose a paso firme y con la frente en alto. Al príncipe Edward realmente le pareció encantadora... pero no como ella, no como Aurora.

(Saga) Legado De Sangre I: Fuerza De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora