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VOLVIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII
TERCERA PERSONA
Dahyun despierta con un terrible dolor de cabeza, ni siquiera puede abrir los ojos y el terrible dolor de cabeza no ayuda para nada. La noche anterior se divierto más de la cuenta y también conoció a varias personas importantes que sin duda van a ser de ayuda para independizarse totalmente de su madre, Agradece ya que todos estos fueron amables... bueno por lo poco que puede recordar.
Se sienta lentamente en la cama para poder reconocer donde está y se sorprende al ver que esta en su supuesta casa. mira hacia el gran ventanal ¿Cómo rayos es que llego a casa y también a su habitación? ¿Cómo rayos es que esta con su pijama puesta? ¡quién sabe! Se levanta con cuidado y camina hacia el cajón en busca de pastillas para la terrible resaca.
Pero no hay nada, mira a todos lados en busca de donde pueden estar las pastillas, pero nada se le ocurre. Piensa, pero todo se ve interrumpido cuando huele que algo se esta quemando, no puede evitar gruñir, seguro se trata de la estúpida de su esposa.
Con un fuerte resoplido camina fuera de su habitación y va hasta la cocina, como lo predijo, Sana esta parada en medio de la cocina intenta arreglar lo que sea que este haciendo. Lleva una camiseta de gran tamaño ligeramente arrugada la cual cubre sus pantalones cortos, también tiene anteojos las cuales se han resbalado por su nariz y su cabello esta despeinado.
Es la primera vez que Dahyun se detiene a observar a la mujer con quien comparte habitación, es hermosa a pesar de recién haber despertado.... pero Dahyun no se permite observar más, al contrario, ruge de ira por haberla mirado de esa manera.
La contraria siente una mirada sobre ella, así que gira y mira a la causante de su torpeza.
Dahyun: no creo que exista algo que hagas bien -exclama, secamente-
Sana: yo... -tartamudea- yo solo quería, preparar un poco de caldo...
Dahyun: ¡déjalo! -gruñe- no quiere que termines incendiando la casa.
Sana: yo... bueno.... -intenta hablar, pero no puede-
Dahyun: ¿Dónde están las pastillas? -cambia de tema, le gusta discutir con Sana. Debe admitirlo, pero el dolor de cabeza no ayuda, así que por hoy la dejara en paz-
Sana: en la repisa del baño -mira al piso, oculta su mirada-
Dahyun: bien.
Camina hasta al baño y empieza a buscar en los cajones de la repisa, efectivamente ahí esta el medicamento, toma una caja y toma un par de pastillas. Aprovecha para lavarse la cara.
