ଽ '⸼ ⤹ ᴍᴀғɪᴀ ʙᴀʙʏ [ SJ ]

ଽ '⸼ ⤹ [ 03 ]

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Con el pasar de los días, los empleados de aquella casa aprendieron algunas cosas, juntos se unieron a la causa de hacer un excelente trabajo aunque su vida estuviera en riesgo y el miedo sea grande, porque su jefe siempre los trató bien y ser felicitados por su esfuerzo y dedicación se sentía bien, por lo que trataron de acostumbrarse y dar lo mejor en si al tratar con "Jinnie" la gran bestia escondida entre su nido de mantas y almohadas, quien odiaba los baños y a cualquier cosa que se moviera, alimentarlo era difícil ya que como un elegante tigre esperaba en la sombras por una víctima para luego saltar y atacar, su arma consistía en un tenedor de plástico sensible, decidieron dárselo al ver qué se sentía menos nervioso así.

La habitación era limpiada al menos dos veces a la semana, pero el nido de la cama no se tocaba, el chico en ese momento se escondía en los baños y ellos aprovechaban, pero la cama se quedaba igual, no era mucho el desorden que hacía y a la hora del baño, la cosa más difícil era llevarlo, y aprendieron a hacerlo (lastimosamente) con ataduras, de a poco y con paciencia le enseñaron hasta que pudo aprender lo básico, y aunque reniega y gruñe un poco, luego termina obedeciendo.

Los guardias se habían ido de ese puesto, pero siempre de vez en cuando pasaban a preguntar al chico si necesitaba algo, todos estaban atentos a todo lo que dijera o pidiera, esforzándose a ganarse la confianza del niño. Pero nadie hacía más que el Jefe, el hombre que dejaba todo en cuestión de minutos solo por ser horario de "jugar con gatito", muchas reuniones o asuntos importantes se presentaron y el no asistió a ninguna, siempre se pasaba horas y horas hablando solo con una actitud despreocupada como si no tuviera una fiera salvaje frente a él, cosa que les preocupaba, pero para sorpresa de todos, eso le funcionaba.

Cada día eran más las veces dónde el chico parecía interesado o confiarse del hombre, de todas esas veces que le llevó comida o le habló tiernamente muy pocas veces el chico parecía relajado, a gusto con su presencia o incluso tuvo la confianza de dormirse estando el hombre todavía allí, aveces ya nisiqueira levantaba el tenedor en su dirección por lo que eso pareció enloquecer al hombre (eso es lo que creyó el personal) cuando dijo.

“—Quiero que mí gatito tome aire fresco, preparen el patio exterior para Jinnie —”

Enseguida todos le miraron incrédulos, si bien podían controlar medianamente bien al niño estando entre esas cuatro paredes, no querían imaginarse estar en varios metros cuadrados apenas custodiados. Obviamente intentaron hacerlo entrar en razón, pero fue inútil el hombre estaba decidido.

“—Jinnie es tierno, un chico bueno que merece salir un rato —”y no quedo más que tomar muchas medidas de protección.

El gran patio trasero fue preparado de la mejor manera, se puso una valla secundaria delimitando un poco del lugar, los guardias se colocaron en lugares donde no pudieran ser vistos y todo empleado se metió en la casa, que cerrada con clave era como una especie de escondite. Y si bien intentaron explicarle eso al chico éste mucho no colaboró, asique con suaves ataduras y entre dos guardias lo dejaron en ese cuadrado asegurado, fue colocado allí y desde más arriba era vigilado por el jefe, que con una sonrisa le saludaba.

—Jinnie, puedes desatarte gatito solo es por protección —tocó una pequeña campanita como si fuera el permiso y en cuestión de segundos la cuerda suave fue desecha en pedazos, demostrando así el poder y fiereza de la pequeña "mascota" del jefe, seokjin le miraba fijamente, si fuera un felino de seguro sus grandes ojos estarían totalmente atentos con una fina línea de pupila que indicaría lo molesto que se encontraba. Pero fue solo hasta que se dió cuenta del cielo, el calor del sol y el suave césped entre los dedos de sus pies. El hombre del balcón sonrió en grande y contempló contento como el niño miraba todo a su alrededor, conociendo el mundo por fin y al parecer disfrutándolo, se movía por todos lados jugando con las flores o las mariposas que pasaban por casualidad, todo bajo la supervisión de “papi” el hombre que por alguna extraña razón no le causaba dolor y siempre estaba feliz, le alimentaba y daba cosas lindas sin ningún motivo, lo miró varias veces desde abajo, estaba sentado relajado con varios débiles a su lado, esos débiles de bajo rango que no tenían mucho poder y le gustaba tanto asustar, contrario a ellos estaba el líder que nunca parecía inmutarse por sus ataques o reaccionar mal ante sus defensas. Se sentía tan confundido por esos tratos nuevos, cuidadosos, cariñosos, pacientes, y a pesar de que había intentado lastimarlos ahora le dejaban salir a un lugar tan lindo, no sabía que hacer como agradecer, solo se quedó en el medio acurrucando sus extremidades muy cerca, casi como un gatito reflexivo en el medio del lugar mientras sus grandes ojos se dirigían al hombre sin saber que hacer—¿Qué sucede gatito? Puedes jugar tanto como quieras, hay juguetes y bocadillos, todo solo para ti —

Él solo hizo caso, es lo mínimo que podía hacer por todo lo que le habían dado, talvez podría llegar a germinar una pequeña semilla de confianza y cariño en su corazón tan roto.

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Hola

Acá de vuelta luego de las crisis porq wattpad anda de gracioso y me hizo pensar q me borraron la cuenta ☠️☠️

Comenten mucho, q me gusta leerlas/los

Tkm <3 bai 🌱