23 de abril

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Buenas noticias, Titus está mejor, más o menos, salió de la veteranía un par de días después de su lavado de estómago, aunque aún no está del todo bien, pues debemos darle comida especial y algunos medicamentos, (mi cachorro no está muy feliz por esto), pero me las he arreglado para hacerlo tomar el medicamento, aunque no es una atarea fácil.


-Titus Wayne, ven acá en este instante- suelo gritar al correr tras de él, pues es muy inteligente y sabe exactamente cuando estoy por darle el medicamento, como todo un rebelde, corre tan rápido como puede, me evade, se oculta, ladra y salta por todos lados, finalmente lo acorralo en alguna esquina y comienza la verdadera batalla, obligarlo a abrir su osico no es tan sencillo como podría haber imaginado jamás. Intente otras estrategias, como darle el medicamento en una salchicha o queso, pero solo se come la salchicha y escupe la pastilla, no bebe su agua si la disuelvo en ella, tampoco acepta sus galletas si sabe que tienen un poco del medicamento, en fin, nadie dijo que ser padre seria sencillo.

Últimamente Jonathan me ha enviado algunos regalos y cartas cursis, supongo que es su intento de cortejarme, el primer regalo que envió fue una daga de cristal, (creo que está al tanto con mis gustos), debo admitir que fue hermosa, me la quede, claramente, pero no le regrese su carta sin siquiera leerla, no le hare creer que me tendrá así de fácil, es decir, pagar por mí no es suficiente si me quiere debe hacer más que eso. la daga la deje en su protector, no puedo arriesgarme a que se dañe, es hermosa, su siguiente regalo, fue un oso de peluche, este si se lo regrese agregando una nota que decía "Agradezco la intención, pero no lo aceptare", por supuesto no me agradan esas cosas, son para bebés, y yo no soy un bebé, aun así, Jonathan envió un nuevo regalo una hora después, (debo admitir que es un hombre perseverante).

Esta mañana envió un mensaje, no tengo idea de quien le dio mi número de teléfono, decía que enviaría una tarjeta de crédito platinum, para que pueda comprar lo necesario para la boda, y otra para mis gastos, bueno, este regalo no se lo regrese, ¿qué?, me lo merezco, por supuesto fue a gastar cada centavo de la tarjeta que me dio, por supuesto debo hacerle ver que al tenerme como su esposo gastare cada centavo de él, debe ser consiente en lo que se está metiendo. 

Como sea, compre algunas cosas para Titus, una pechera nueva, un collar especial para la protección de mi mascota, cuando estemos en la granja, probablemente habrá depredadores, así que tengo que cuidarlo, tiene unos enormes pinchos al rededor, evitara ataques a su cuello, también pedí una casa para perro con luces térmicas y aire acondicionado, claramente mi bebé no dormirá en la calle, será solo para cuando salga.

oh, por poco olvido comentar que Jon y yo nos reuniremos en unos días para hablar sobre el matrimonio, ya sabes, aclarar los negociables y no negociables, aquello que haremos, hijos o no, estilos de crianza y cosas por el estilo, no sé cómo resultara esto, pero es una conversación importante, ya vere como nos va con esto.

Los secretos de Damian WayneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora