Un día extrañe tanto a mi madre, y me destrozó el saber que estaba justo en la otra habitación.
Simplementes.

ESTÁS LEYENDO
Cartas al silencio
ספרות נוערy nadie supo jamás, que mientras ellos aplaudían, mi único deseo era que mañana yo ya no existiera.
#62!
Un día extrañe tanto a mi madre, y me destrozó el saber que estaba justo en la otra habitación.
Simplementes.