CAPITULO DOS - AGONÍA

1.9K 192 62
                                    

Advertencia: Sangre, autolesiones e intento de suicidio.

El pequeño pelinegro se encontraba tirado en su cuarto, llevaba varios días sin salir, se encontraba devastado, tanto que había recurrido al alcohol.

-¡Maldita sea!- grito mientras lanzaba una botella contra la pared. -Maldito Lusu...- lágrimas gruesas brotaban de sus ojos.

No importaba lo que hiciera, todo volvía a repetirse en su cabeza.





FLASH BACK

-¡Exijo recuento de votos!-

-¡Él nunca será mi alcalde!-

Se escuchaba a la multitud enfurecida, Luzu solo sonreía victorioso, provocando más enojo en sus compañeros.

-Sapo peta...- por fin hablo el menor, todos se callaron al escucharlo. -¿Podrías decirme el porcentaje de votos?- se escuchaba dolido.

-Claro que si...- se aclaró la voz. -Un voto de Cerdus Gil.-

-¡Vamos Cerdus!- exclamó Vegetta, animaba mucho a sus compañeros.

-Cuatro votos para Quackity... y ocho para Luzu.-

-¿Ocho votos?- abrió sus ojos con sorpresa.

-¡Estoy seguro que más de 4 personas votamos por Quackity!- grito el híbrido oso. -¡Dicelo Quackity!-

-¡No importa lo que ustedes digan!- hablo Sapo peta mientras alzaba la voz. -Los habitantes de Karmaland ya han hablado, ¡Luzu es nuestro nuevo alcalde!-

Rubius suspiro resignado. -Creo que es mejor que nos vayamos Quackity...- volteo a ver al menor pero este ya se estaba alejando del lugar. -¡Quackity!- antes de correr, volteo a ver al ojos rubí. -¡Con lo que se había esforzado! ¡EL CONFIABA EN TI, LUZU!- el mayor le miró un momento, le dedicó una enorme sonrisa, parecía divertido con toda esta situación. -¡Que te follen!- corrió para alcanzar al menor, al acercarse noto que este ya se encontraba en los brazos de Alexby.

-Te juro que yo vi mi urna...- lloraba fuertemente. -¡Yo la vi!- comenzó a sollozar.

El híbrido oso se acercó lentamente a ellos -Permiteme, Alexby...- el mencionado asintió, separándose así del menor y dejándolos solos. -No llores, Quackity.- lo abrazo apegándose a su pecho.

-Me esforcé demasiado... ¡¿Y TODO PARA QUE?!- sus rodillas comenzaron a fallarle, provocando que el mayor terminará por cargarlo. -No me merezco esto...- se cubrió el rostro con sus manos. -Me traiciono...-

-Ya patito...- susurro dulcemente. -Ya paso, ya, ya...- lo abrazo mas fuerte. -Te prometo que nos vamos a vengar, ya lo veras.- hizo que el menor lo mirara, en su mirada podía sentir la confianza que el mayor trataba de transmitirle.

Pasaron varios minutos mirándose directo a los ojos, sin decir palabra alguna, no las necesitaban, solo con estar así se tranquilizaban mutuamente.

-Por mucho que me guste estar así contigo...- fue el mayor que decidió romper el silencio. -No podemos retrasarnos más, lamentablemente ahora tenemos que ir con Sapo peta.- lo dejó lentamente en el piso.

-Esta bien...- susurro el menor. -Pero ve con los demás, debo arreglar unas cosas antes...- el mayor asintió sin protestar y se fue con los demás.

El azabache esperó un momento y también fue con ellos, nadie se atrevía a preguntarle cómo se sentía, aunque ya sabían la respuesta.

-Yo estoy contigo Quackity...- le susurro Alexby, demostrando su lealtad al menor. Este solo le dedico una sonrisa triste.

Todos comenzaron a caminar a la mansión de Sapo Peta para escuchar lo que este tenía que decirles.

Quackity se encontraba atrás de todos, fue cuando noto que el mayor estaba a su lado. -Lusu...- el mayor lo miro de reojo. -¿Puedes venir conmigo un momento?- ambos se detuvieron, dejando que todos se adelantarán.

-¿Quieres golpearme otra vez? Te recuerdo que ya soy alcalde.- lo miró bien. -Cualquier cosa que intentes hacerme a partir de ahora será considerada como traición.-

El menor trago grueso. -"Así que este es el verdadero Lusu..."- sintió como se aguadaron sus ojos, pero trato de ignorarlo -N-No, yo...-

-Bien niño, pero que sea rápido.- el menor lo miró fijamente. -¿Que no escuchas? No tengo tu tiempo.-

Quackity sintió como su corazón terminaba de romperse, este no era el Luzu del que se había enamorado. Ya no tenía ganas de amarlo, todo lo contrario, lo único que sentía en este momento por él era odio.

Su mirada cambió completamente, algo o alguien había despertado dentro de él. Se acercó lentamente y acorraló al mayor,

-Bien, ahora solo cállate y escucha.- hasta su voz había cambiado. -Si yo me llego a enterar que hiciste algún fraude.- lo miro directo a los ojos mientras lo tomaba de la camisa. -Juro que te voy a matar.- le escupió a la cara y lo soltó.

El mayor lo miró desconcertado por un momento, pero cambió a su mirada arrogante de antes. -¿Es una amenaza?-

-Tómala como quieras.- bufo y comenzó a caminar del lado contrario, lo único que quería era regresar a casa.

FIN FLASH BACK





-No se como pude enamorarme de él...- antes de que pudiera reaccionar, ya había abierto una nueva botella y por ende, ya estaba tomando de ella. -¡Que digo! ¡Si aun amo a ese cabrón!- otro trago. -Lusu... ¡¿Porque no me amas como yo te amo a ti?!- estrelló la botella en la pared, provocando que varios vidrios se le impregnaran en la piel y comenzara a sangrar, pero este no parecía reaccionar . -Solo necesito que me ames... No me importa lo demás.- se levantó a tientas y caminó mientras pisaba todo el vidrio con sus pies descalzos. -Te necesito...- se sentó en su cama y sacó una espada rota.

La miró por un momento hasta que comenzó a cortarse profundamente en varias partes de su cuerpo. -No puedo estar sin ti, Lusu...- susurro mientras seguía su cometido. Pronto su hermoso traje azul estaba convirtiéndose en un traje rojo.

A lo lejos se escuchaban que alguien tocaba fuertemente su puerta. -¡QUACKITY POR FAVOR ABRE!- trataban de forzar la puerta.

Pero el menor ya no escuchaba, había perdido demasiada sangre, solto su espada mientras comenzaba a ver borroso hasta que termino desplomandose sobre el piso, sin percatarse de que su rostro habia caido en donde se encontraba su espada, encajandosela al instante.

Lo ultimo que escucho fue que alguien ya había logrado entrar a su casa, pero eso ya no le importaba, solo pudo ver una sombra que se acercaba apresuradamente a el. -¡DIOS MIO! ¡¿QUE HICISTE QUACKITY?!- el menor no respondió, ya había perdido la conciencia.

------------------------

Esta medio sad el desmadre, pero es lo que hay.

¡Espero les este gustando!

ACTUALIZACIÓN: Decidi que su herida de Quacks del rostro se la hara apenas y despues ya comenzará a usar la mascara por lo mismo, por ello tuve que modificar un poco esa parte de este capitulo.

Lo hice por amor ⟦ ¿Luckity? ⟧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora