Halloween de nuevo

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Gary H.

— La verdad no tengo ganas de ir a ninguna fiesta, así que paso…

No quiero estar en ese ambiente.

En especial si es algo de disfraces, y si de todos modos voy a estar solo, prefiero hacer algo más.

Es fácil asumir que Mike, siendo un evento de trabajo, va a estar ocupado con otra gente y no tengo ganas de ir a hacer de planta de interiores.

— Acompáñame a comprar, luego te dejo libre.

Me alejo del sofá esperando que venga conmigo, aunque de todos modos voy hacia el pasillo para tomar mis llaves y mi abrigo, pues incluso si me dice que no, todavía pienso ir.

Mike

Quiero aclararle que no es para nada una fiesta, y que de hecho podría distraerse bastante, pero antes de que pueda decirle algo, él ya se ha dado la vuelta.

Me empujo del sofá con el mismo ánimo que he estado cargado los últimos días, yendo hasta el pasillo para tomar mi abrigo, sin tener que buscar mis llaves o billetera, dado que últimamente las dejo dentro del abrigo.

Pienso comprar algunas cosas, pues me rehúso a pasar el Halloween con éste ánimo, y si tengo que provocarme una diabetes por ello, así va a ser.

- ¿Tienes ganas de manejar? Si quieres vamos en mi coche, y te traigo de vuelta.

Gary H.

— Um… See, vamos en tu coche.

Descarto pasar a cambiarme, ya que todavía estoy con ropa decente por haber ido a ver a mi madre, además asumo que Mike va a pasarse a su evento luego de dejarme y debe tener prisa.

Entre el no querer atrasarlo más y tomar el primer abrigo que tengo colgado, no me llego a dar cuenta que es en el que dejé los porros de Kenny, y si bien hasta ahora me he limitado a convivir con Mike, dejando de lado que sé que la consume, ahora mismo me siento lo bastante fatalista para preguntarle por ello.

De igual forma espero hasta estar por lo menos en el coche para preguntar, porque sé que sería más divertido si no estoy solo, aunque él tenga que irse luego.

— Oye, tú fumas, verdad?

Es hasta que estamos lo bastante lejos del edificio que saco mi cajetilla para buscar el encendedor, aunque no me conste que a él no le moleste el olor en su coche.

Mike

- Okaaaay...

Me aseguro de abrigarme antes de salir del departamento, porque no quiero resfriarme cuando me falta tan poco para cubrir todo mi trabajo.

Vamos directo al subterráneo, para subir a mi coche, en dónde lo primero que hago es prender la calefacción, para emprender viaje a una tienda de fechas festivas que vi más temprano en la mañana.

A medio camino, Gary me pregunta si fumo, y me extraña por un segundo, porque creí que lo recordaría por lo que pasó en el cumpleaños de Sunny.

Respondería que si, pero veo que saca su cajetilla y me veo en la necesidad de especificar.

- Marihuana, pero si lo preguntas por si me molesta... no, no me molesta.

Aunque si decido bajar un poco la ventanilla de mi lado para que el humo no se quede dentro. No quiero llegar al evento hediendo a cigarrillo.

Gary H.

— Genial, quería estar seguro.

Saco solamente el encendedor de la cajetilla para volver a guardarla y buscar la bolsa hermética en un bolsillo interior de mi abrigo, y de él tomar uno de los porros para luego guardar el otro.

Rol SP IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora