Historias cortas de terror

"Los Susurros"

Era un día como cualquier otro en el instituto, estaba en clase de literatura tomando notas de lo que decia la profesora, yo tenia excelentes notas, un cuerpo definido, cara lisa. Prácticamente era la chica perfecta. Pero en medio de la clase escuche mi nombre, así que voltee a ver y nadie me habia hablado, así que voltee a enfrente y segui anotando. El dia paso con normalidad despues de eso, cuando llegue a casa me dispuse a escuchar musica y hacer tarea. Pasaron unos 10 o 15 minutos, cuando de repente escucho mi nombre, no tenía el volumen tan alto así que pude oirlo, pero estaba sola, mis padres estaban trabajando, así que no podian ser ellos, alrededor de unos 5 o 6 minutos volvieron a decir mi nombre, en este punto ya estaba asustada, así que solo tome el bate de beisbol que me regalo mi padre y fui hacia a la sala, no habia nadie, luego a la cocina, no habia nadie, asi fue con todo la casa, no habia nadie, estaba completamente sola. Así que pense que mi cerebro estaba jugando conmigo, estaba tan cansada, asi que me fui a dormir. A la mañana siguiente me levante y me aliste para ir al instituto, agarre una manzana como desayuno y me fui.Todo iba normal hasta que en química... Comenzaron Otra vez, las malditas voces otra vez, sentía que me llamaban una y otra y otra vez, pedí permiso para ir al baño, así que fui, las malditas voces no paraban, eran cada vez más fuertes y cuando menos lo esperaba me estaban sangrando los oídos. Solo me limite a gritar, me estaban doliendo mucho y fue tanto que me termine desmayando... poco después, no sé cuánto, desperté en la enfermería, me dijeron que era por escuchar música con tan alto volumen, todo era raro, no entendía que pasaba, los días pasaron sentía que me volvía loca, mis notas bajaron, empecé a descuidarme, empecé a escuchar voces a cada rato... poco tiempo después, estaba en un manicomio, gritando que me dejaran salir quería que las escucharan, todas las cosas horribles que decían, todas las cosas que querían que me hiciera; "Deberías matarte", " Tu vida es miserable", " Nunca llegara a ser nada en la vida", "Eres una decepción para tus padres". Estaba en la cafetería donde ya no podía aguantar... ya no podía con sus comentarios... no quería seguir escuchando... así que decidí arrancarme las orejas, sin embargo, ahora los veía, sus comentarios por todas partes, decidí ya no sufrir más, así que agarre los cubiertos y me los encaje en los ojos... Por los gritos de los demás y la sangre corriendo por mi cara y mis manos, todo estaba lleno de rojo... pero ya no importaba, ellos ya no estaban, al fin podía estar tranquila, sin importar nada... Ya era libre