PART 1

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Cuando una persona ama de la mejor manera a una persona, está dispuesta para hacerla feliz, como también para verla sonreír.
Justamente eso hacía Elsa con su esposa, Rapunzel.

A ella la conoció por primera vez en la universidad, y de ahí decidió que esa chica iba a ser su esposa. Claro, sabía que costaría mucho para acercarse a ella y hablarle los primeros días, pero nunca lo intentó.
Llegaba a observarla desde lejos, la seguía en las redes sociales pero no fue a la semana que Elsa se animó en hablarle, eso sucedió dos meses después de conocerla.

Un día la albina estaba molesta porque su profesor de química la había reprobado en un proyecto que hizo durante una semana, frustrado salió de su clase y de la nada se encontró con la rubia que hacía que Elsa se pusiera nerviosa.
No lo pensó ni dos veces y la albina se acercó a la chica, confundió algunas palabras para expresarse a Rapunzel, pensó que ella se iba a burlar pero no, simplemente le sonrió y aceptó la cita que Elsa le había propuesto.

En una noche las dos se conocieron, Rapunzel habló de sus antiguas relaciones y de cómo le había afectado, pero lo que no tenían en común era sus relaciones pasadas porque Elsa nunca tuvo una pareja. Si llegaban algunas chicas hablarle pero no pasaba nada después, tal vez la chica esperaba algo más.

Durante 3 semanas de salir juntas y hablar todos los días, Rapunzel llegó a enamorarse de Elsa; no por su físico, claro, fue la personalidad que sostenía la albina de ojos azules. Una personalidad única, puede ser una chica seria, pero es una de las mejores personas que alguien puede conocer, ama a sus seres queridos, tiene un buen corazón, proteje a cualquier persona y... su inocencia hace que tenga algo más en ella.

Cuando Elsa le pidió que fuera su novia Rapunzel, ella lo aceptó.

En la universidad hablaban de la linda pareja que existía dentro de la escuela, hablaban de Elsa como también hablaban de Rapunzel.
También existían personas que querían destruir aquella relación, y los problemas llegaron con la pareja, pero la madurez de las dos lograron salir de cualquier obstáculo.

En esos momentos Elsa sabía que no podía perder a la chica que tanto amaba, así que le propuso matrimonio de la manera más romántica que puede existir. Escribió un libro especialmente para Rapunzel, se lo leyó en su aniversario, preparó la cena y fueron comer juntas en un campo abierto. Los amigos de Elsa la ayudaron para que el lugar no estuviera obscuro, así que no había problema con eso.

En cuanto Elsa leía la última parte, se levantó y tomó una cajita roja que contenía el anillo adentro. Se hincó y le pidió que fuera su esposa. Rapunzel con los ojos llorosos aceptó. Fue el mejor día para las dos.

Cuando terminaron la universidad completaron el matrimonio, muchas personas llegaron, tanto como las dos familias de las chicas.
Elsa estaba muy emocionada por la boda y la fiesta, pero al finalizar todo, ella tenía una sorpresa para su esposa.

La fiesta se llevó a cabo en una playa porque así lo pidió Rapunzel. Entonces lo que Elsa pensó fue que sería lindo concluir la luna de miel allí y la noche de bodas.

Rentó una casa con vista al mar, y ella misma adornó toda la casa de rosas y velas, hizo un camino de la entrada de la casa hasta la habitación donde ellas iban a estar.

Cuando era la hora, las dos estaban en la casa y Rapunzel estaba muy sorprendida por todo lo que hizo Elsa. Ésta chica cargó a Rapunzel hasta la habitación y la dejó en la cama.
Las dos estaban nerviosas pero Elsa... ella le ganaba a Rapunzel. Tenía miedo de arruinarlo, pero gracias a la paciencia de Rapunzel, nunca pasó nada extraño.

Fue una noche de pasión, una noche donde cada una se entregó completamente a la otra, y dónde Elsa cuidó muy bien a Rapunzel.

Los días pasaron, como los meses y los años. Las dos tenían 23 años, y Rapunzel deseaba tener una familia con Elsa. La albina aceptaba la decisión de su esposa, porque ella le encantaría ver a un bebé igual que Rapunzel. Así que empezaron aquellas noches de trabajo, y no fue a las dos primeras veces que por fin tuvieron resultado. Elsa pensaba que era su culpa o que algo hacía mal, pero en una noche, después de regresar del trabajo, Rapunzel dió la noticia.

Por fin las dos iban a tener a su bebé.

Durante todo el año, Elsa estuvo cuidando de Rapunzel y le cumplía sus antojos. Las primeras semanas del embarazo, no solo era Rapunzel que tenía algunos efectos de él, sino que también a Elsa.

Las dos estaban muy felices, cada mes Elsa miraba que la panza de Rapunzel estaba creciendo, y se preguntaba si el bebé sería niño o niña. Nunca hicieron una fiesta para saber el género del bebé, las dos esperaron, así que Elsa consumía esas ganas de saber que iba a ser el bebé.

Cuando solo faltaban unas semanas para el parto de Rapunzel, ella enfermó. Nadie sabía el por qué, así que todos buscaron respuestas con cualquier doctor, pero solo uno dijo que no iba a pasar nada, y que solo eran efectos secundarios. Las semanas pasaron y ya era el día para la pareja, Elsa estaba muy preocupada por Rapunzel, y ella intentaba calmar los dolores que tenía dentro de ella.

Cuando era tiempo para sacar el bebé, tuvieron que dejar sola a Elsa porque no se le permitía estar con Rapunzel en el quirófano.
Las dos familias llegaron con regalos, y esperaron a Rapunzel afuera, justo donde estaba Elsa. La chica se preocupaba por su esposa y porque la operación ya llevaba más de una hora. Elsa nunca se sentó, estuvo siempre parada para recibir la noticia. De pronto un doctor salió del quirófano y se dirigió a la familia que rápidamente se acercaron a el.

El doctor lamentó todo, pidió disculpas porque el estado de Rapunzel era crítico, y no la pudieron salvar. Al escuchar aquellas palabras, el mundo de Elsa se detuvo, ignoró el doctor y entró al lugar. Allí vió como los enfermeros estaban viendo a su esposa, lentamente se acercaba hacia ella, y cuando no pudo más, se soltó a llorar a gritos. Los enfermeros la dejaron sola, y la familia entró. El doctor fue el mismo que dió al bebé a la madre de la paciente, Arianna.

Idunna y ella estaban llorando pero miraban al bebé y le dieron la bienvenida.

La mamá de Elsa se acercó a su hija y le dijo que tenía una hija, y que era muy hermosa, pero Elsa no podía verla porque solo estaban sus ojos puestos en Rapunzel. Cuando Arianna quiso acercarle a la bebé, Elsa solo la ignoró y dijo que nunca iba a ver a la persona que hizo que su esposa falleciera. Al decir aquello, salió de la habitación y se alejó del hospital. Ninguna de las dos familias pudo contactarla, en pocas palabras Elsa se había alejado de todos.

𝐆𝐋𝐈𝐌𝐏𝐒𝐄 𝐎𝐅 𝐘𝐎𝐔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora