Nadie lo ve pero estoy intentando con todas mis fuerzas no derrumbarme.
La gente cree que si ríes, eres feliz.
¿Cómo les explico que rio porque la única alternativa es llorar?
Hay un vacío en mi pecho, y no sé cómo llenarlo. Se expande. Cada día se expande. Temo que me consuma. Que lo tome todo de mí.
«¿Cómo estás?», preguntan.
«Bien», miento.
Una farsa, eso soy.
Las mentiras escapan de mi boca antes de que pueda siquiera pensarlo.
No estoy bien.
Estoy colapsando.