𝐘𝐎𝐔𝐍𝐆𝐁𝐋𝐎𝐎𝐃 ▪︎ "¿Crees que no se lo de tu pequeña obsesión conmigo?"
Los secretos esperan el día en que los seres queridos duden de nosotros y que todo salga a la luz.
A veces, un solo secreto puede cambiar el curso de la vida de una person...
﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌﹌ ↳ ❝ [YOUNGBLOOD] ¡! ❞ your beauty never scare me
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Parecía que la tragedia tenía que llegar para reencontrarse con su padre. La segunda esposa de su padre se había quitado la vida de la manera que un jinete de dragones se iría.
El mismo padre que la dejó al cuidado de su tío, el rey Viserys, para formar una nueva familia con Leana Velaryon.
Si le preguntaran a Vrinerys quien estuvo ahí durante su crecimiento, siempre diría que su tío. Es por eso que tenía tan buena relación con sus primos, había crecido con ellos.
Era muy difícil para ella cuando peleaban entre ellos.
Veia lo cruel que trataban a Aemond por no tener un dragón. Las constantes burlas de Aegon a su hermano.
La gota que derramó el vaso fue hace poco, le hicieron creer que le darían un dragón y le entregaron un cerdo. Eso desató la ira de Vrinerys.
La niña busco a su primo Aegon de inmediato, encontrandolo en sus aposentos, masturbandose como acostumbraba. La rubia lo tiro a el suelo y lo amenazó con una navaja que guardaba en su alcoba.
—Vuelve a burlarte de Aemond...—Dirigió la navaja a la entrepierna del muchacho, asustandolo en el proceso.— Y te cortaré lo que tienes entre las piernas antes de que aprendas como usarlo.
Como una promesa, hizo un pequeño corte en la piel que era visible. Después de eso se retiro tranquilamente.
Justo ahora se encontraba en el funeral de la mujer Velaryon. Ahí estaba Rhaenyra con su esposo Sir Laenor y sus hijos, Jacerys y Lucerys. La serpiente marina, Corlys Velaryon y su esposa Rhaenys.
Evidentemente también se encontraba su padre con sus nuevas hijas, Baela y Rhaena. Fruto de su amor con la fallecida.
Ella sin embargo se mantuvo cerca del rey y su esposa. Lo quiera o ni ellos habían sido su familia todos esos años sin chistar.
Los comentarios sobre la cuestionable legitimidad de los niños de la heredera a la corona por parte de Vaemond Velaryon se hicieron evidentes durante la despedida se su propia sobrina. Y como si la situación lo ameritaba, Daemon comenzó a reír sin razón.
Para después enviar el féretro de Lady Velaryon a el fondo del océano. Terminado así la ceremonia fúnebre y comenzando a recepción.
Estaba sola en la esquina del enorme balcón del castillo, no tenía ganas de socializar. No sabía si su madre, la difunta Rhea Royce estaría de acuerdo en estar en el funeral de la segunda esposa de su padre.
