Amor de dragones (como entrenar a tu dragón x tu)

Cap. 3

Hiccup: esto fue estúpido

Ella lo miro y solo le toco su hombro, apunto de decir algo vieron escamas negras en el suelo

Ágata: eso es...

Hiccup Agarró una y empezó a examinarla, mientras Ágata lo miraba parada. De pronto paso una sombra rápidamente con un rugido asustándolos. Miraron que la sombra se movía rápidamente y se acercaron para verlo. El Furia Nocturna intentaba escalar las rocas, pero cada vez se hacía para abajo. Dejó de luchar y voló hacia la tierra de ese lugar tan lindo. Pasando por el lago, Hiccup y Ágata lo miraron sorprendidos, él sonrió para después bajar hacia una piedra.

Ágata: ¡Hiccup!

Susurrando se agacho con temor, pero a la vez asombro por tal belleza que tenía la furia nocturna

Hiccup: tranquila, todo está bien

Ágata: si claro, mientras no te muerda, queme o coma vivo

Hiccup: confía en mi

Mirándolo a los ojos él extendió su mano para que ella lo agarrara, suspirando rendida, agarro su mano haciendo que bajara hasta el, topándose los dos solo desviaron sus miradas, dirigiendo aquellas miradas hacia la furia y el nuevamente intento irse de ahí, pero empezó a caer mientras sacaba un rugido. Aterrizó en la tierra y nuevamente lo intentó. Hiccup rápidamente sacó su libreta y empezó a dibujarlo mientras el intentaba varias veces irse, Hiccup terminó el dibujo y se quedó viendo hacia el dragón

Hiccup: ¿por qué no te has...ido volando?

Ágata: tal vez quiera vacaciones

Hiccup: ja... ja que graciosa

Ágata: ya enserio, tal vez este lesionado en alguna parte

Hiccup: eso tiene mucho que ver

El disparó hacia el frente, dándole al suelo. Hiccup miró la parte de su cola y la borró en su dibujo, Lo miró nuevamente y el otra vez intentó volar. Pero empezó a caer, sacándole un rugido y que se golpeara contra el suelo quedando alado del lago. Paso un pescado y él lo notó, miró a los pescados en el agua e intento agarrar uno con su boca. Lo cual no logró. Hiccup miró su dibujo mientras bajaba su mano donde tenía su lápiz, Haciendo que este se fuera de su mano y que Hiccup intentara agarrarlo. El lápiz empezó a caer por las rocas para después caer al suelo y llamar la atención del Furia Nocturna, quien miró a la dirección donde el lápiz cayó, encontrándose a Hiccup quien lo miraba.

Los dos se quedaron viendo y Hiccup movió el cabeza un poco alado, haciendo que el Furia Nocturna hiciera lo mismo. Imitándolo, ágata miro con asombro al dragón el mirándola trato de imitar su mirada cosa que hizo sacarle una sonrisa aquella chica

Se hizo la noche y voces de los chicos y de Bocón, se escuchaban por fuera del gran salón.

Bocón: a ver, ¿en que se equivocó Astrid hoy en el ruedo?

Astrid: calculé mal mi marioneta, fue torpe. Me arruinó el giro hacia atrás

Ágata quien estaba sentada en otra mesa escuchaba la plática de aquellos chicos mientras jugaba un poco con la comida

Brutilda: si, nos dimos cuenta

Patán: no, no, estuvo bien, eso fue muy Astrid

Bocón: ella tiene razón, deben de exigirse mucho. ¿En que se equivocó Hiccup?

Al levantar su mirada vio que Hiccup sonreía mientras se sentaba a lado de ella

Ágata: milagro que llegas

Hiccup: tuve unos... inconvenientes

Ágata: ya me imagino

Se pusieron a escuchar la plática que daban los demás

Brutilda: amm... ¿en qué se presentó?

Brutacio: ¿en que no se lo comieron?

Astrid: que nunca está donde debe estar

Bocón: gracias Astrid, tienen que vivir y respirar todo esto. El manual de dragones, todo de lo que sabemos de todos los dragones que conocemos Ah, No hay ataques hoy. Estudien

Al escuchar sobre el manual de dragones el interés de ágata aumento ya que su padre nunca la dejo agarrar el libro, al igual sobre la furia nocturna quería saber más sobre aquel dragón

Brutacio: ¿qué? ¿hablas de leer?

Brutilda: ¡si aún estamos vivos!

Patán: eso no sirve. Para que leer palabras, Cuándo puedes matar las cosas de las que hablan las palabras

Patapez: oh, oh, oh. Yo lo leí 7 veces, hay un dragón acuático que te escupe agua hirviendo en la cara

Patán tenía una ceja alzada mientras lo miraba, los gemelos Brutacio y Brutilda lo veían también, pero aburridos, el levanto su mirada y vio como Ágata estaba escuchándolo atenta, sonriendo quiso contar más

Patapez: y luego hay otro que tiene unas garras muy...

Brutacio: si genial, Estaba considerando leer ese libro

Brutilda: pero ahora

Patán: ustedes lean yo iré a matar cosas

Astrid los miró irse y Hiccup se acercó a ella, Ágata al mirar la intención de Hiccup solo negó con su cabeza y comió lo que quedaba en su plato

Hiccup: ah, compartimos en la...

Astrid: ya lo leí

Hiccup: ah, es todo mío wow, ah...es-está bien entonces nos vemos...ah... mañana

Suspirando fue hacia él y le toco el hombro

Ágata: tranquilo Hiccup, Algún día se fijará en ti, no te desesperes tanto

Hiccup: eso espero

Ágata: no sé cómo nadie se da cuenta de que eres diferente

El la miro y empezó a ser sarcástico

Hiccup: wow gracias eso me ayuda bastante

Ágata: a lo que me refiero Hiccup, es que tú no puedes matar a un dragón

Hiccup: que halagador

Ágata: ¡deja terminar! Como te decía Por ser diferente a los demás, no se tal vez y podrías confiar en un dragón. No eres capaz de matar a un dragón porque tal vez y tú los veas de otra forma... no sé es lo que pienso yo

Ella al terminar de hablar miro a la nada hundida en sus pensamientos hasta que escucho como la llamo

Ágata: ¿qué?

Hiccup: te pregunté que si querías leer el libro conmigo

Ágata: ¿qué?, ah sí, claro

Hiccup: ¿tengo algo?

Ágata: ah...no, solo estoy pensando en la furia nocturna y otras cosas

Hiccup: ¿estás bien?

Ágata: si Hiccup no te preocupes

Hiccup: ¿segura?

Él se puso enfrente de ágata haciendo que ella lo mirara hacia los ojos, aquellos ojos parecidos a las esmeraldas y llenas de misterios por que resolver, suspiro por no poder obtener esa mirada en ella, sonriendo solo le toco el hombro

Ágata: claro Hiccup, ¿empezamos a leer el libro?

El asintió confundido y abrió el libro de los dragones. Mientras ágata miraba al frente con un sonrojo no tan notorio

Hiccup: clasificación de dragones

Al decir eso, abrió el gran libro

Hiccup: Tormenta, espanto y misterio, Trueno Tambor, Este solitario dragón habita cuevas y estanques marinos, si se le molesta puede producir un golpe de sonido que mata a hombres a corta distancia. En extremo peligroso tirar a matar

continuara