El amante perfecto

Capítulo 1: Mi historia

Hoy me ha pasado algo que nunca imaginé que pasaría, de hecho ni siquiera había pasado por mi mente esa situación.

Pero esta historia comienza unos meses antes, incluso antes de que descubriera mis sentimientos.

- "Por que estoy escribiendo esto?"

Empecemos por lo básico, mi nombre es Daniela, tengo 39 años de edad, estoy casada y tengo 2 hijos.
Mi vida se había vuelto algo aburrida desde hace unos años, mis días se consumían muy rápido y como estaba por cumplir los 40 me dio esa crisis existencial sobre si esta era la vida que deseaba.
Ya estaba muy apegada a la rutina, levantarme, hacer el desayuno, ir al trabajo, regresar a casa, hacer la comida y la cena, y finalmente dormir.
No recuerdo cuando fue la ultima vez que salí a alguna fiesta con mis amigas o si quiera cuando salí con mi esposo a cenar sin nuestros hijos, ha pasado tanto tiempo que por más que intente simplemente no puedo recordar.
Mi esposo, Jorge, es un ebanista y maestro en una escuela; la mayor parte del tiempo se la pasa en su taller o yendo a las casas de clientes que necesitan reparaciones en sus muebles o casas, y cuando no está en su taller da clases de artes en una preparatoria.
Mis hijos son Armando y Susana; Armando acaba de cumplir los 18 años y entro en la universidad, esta estudiando para ingeniería industrial. Mi hija Susana apenas tiene 14 años, esta cursando el último año de secundaria, no hay mucho que decir de ella todavía.
Mi relación con Jorge ha estado apagada por mucho tiempo, aún me da cumplidos y hace lo posible por estar en familia, pero con tanto trabajo le es muy difícil. Lo que sí se ha notado es que nuestra familia parece estar divida en 2 bandós; Jorge y Susana pasan la mayor parte del tiempo juntos, mientras que Armando siempre está de mi lado.
Si hay algo que me he ayudado a poder sobrellevar esta vida tan rutinaria son mis hijos, pero aún más Armando; el siempre me mima y busca ayudarme en todo lo que esté haciendo, también me abraza mucho y siempre me dice cuanto me quiere. Algunas veces también se ofrece a hacer cosas sobre mi trabajo, como llevar paquetes o con el papeleo; yo trabajo como oficinista en una compañía de paquetería y entregas, por lo que su ayuda siempre me es útil.
En la oficina tengo 3 amigas principalmente, Camila y Margarita, quienes entraron conmigo hace ya 8 años a la compañía, tienen mi edad y desde entonces somos amigas; y Fernanda, ella es más joven que nosotras, apenas cumplió los 27 y tiene poco que empezó a trabajar aquí. De vez en cuando tenemos visitas entre nosotras a nuestras casas, platicamos sobre nuestra vida en casa fuera de la oficina, las tres son solteras, yo soy la única casada actualmente; Camila y Margarita estuvieron casadas hace algunos años, pero se divorciaron; por otro lado Fernanda no se ha casado aún y no tiene novio, o al menos no que yo sepa.
Las 4 tenemos muchas actividades en común ya que, como compartimos horario, entramos y salimos del trabajo al mismo tiempo, algunos días vamos a nuestras clases de yoga y otras a dar la vuelta o de compras, pero casi siempre preferimos ir a nuestras casas a platicar.
Se podría decir que Camila y Margarita son las más alocadas de nosotras, en las pláticas siempre hablan sobre las citas que han tenido; ellas se hicieron perfiles en esas páginas para citas y nos han contado cómo han sido todas y los tipos de hombres con los que han salido, incluso en vez en cuando cuentan sobre cómo se cogieron a algunos de ellos, por lo general menores que ellas.

Este día ha sido relativamente normal, nos levantamos temprano, desayunamos y cada quien se fue a sus cosas; Jorge y yo al trabajo, y Armando y Susana a la escuela.
Por lo general nuestras entradas son a las 7 de la mañana por lo que el desayuno siempre es algo que se tiene que hacer rápido, como un licuado y alguna fruta o pan con mermelada.
Técnicamente Susana es quien sale primero de todos nosotros, pero siempre se queda un rato más en la escuela a platicar con sus amigas, aunque últimamente ha tenido muchas salidas; espero que no tenga un novio y esas salidas para hacer trabajos escolares sean una mentira para ir a hacer sus cochinadas, los jóvenes de ahora con su internet saben muchas cosas y probablemente quieran intentar todo lo que vean en esas páginas pornográficas.
Luego salgo yo, pero como no hay mucho que hacer y tengo que regresar a preparar la comida me regreso antes, llego alrededor de las 3:30 a la casa, me doy un baño y luego preparo la comida.
Después esta Armando, él sale de la universidad a las 3 pero llega hasta las 5 ya que terminando la escuela va a un curso de clases extra de 3:30 a 4:30, donde aprovecha para aclarar sus dudas sobre temas o hace la tarea con ayuda de sus profesores; y Susana casi siempre le hace segunda llegando unos minutos después, según ella apenas regresando de sus "reuniones".
Y ya hasta en la noche, más o menos por las 11:30, llega Jorge; siempre le dejo algo de lo que haya cocinado en el refrigerador para que se lo caliente en el microondas y pueda cenar.