𝘭𝘰𝘷𝘦 𝘴𝘵𝘰𝘳𝘺 [aemond x helaena x ocfem]

maybe I am just not enough

A medida que deslizaba su ojos por las palabras la presión en su pecho y los dolores en el bajo vientre aumentaban a niveles insoportables.

Aemond, su Aemond no podía haberles hecho esto.

Relaella trataba a cada segundo que pasaba no creer las mentiras que esa carta decía, el único hombre que amo durante toda su vida no podía haberle hecho esto a ellas. No sería capaz de traicionarla así a ella y a Helaena. Él no podía ser como Aegon. Los rumores de su amorío con la bastarda Strong Alys y el embarazo de la misma debían ser eso, solo rumores.

Inclinada con el cuerpo hacía adelante y apoyando sus manos en la pared tratando de buscar un punto de apoyo, la princesa escuchó la voz de la única persona en la que aún podía confiar.

-Ella, ¿qué sucede?-asustada, Helaena se acercó a su hermana mientras colocaba una de sus manos en su espalda. La desesperación plasmada en su mirada al ver como se sostenía el vientre de cinco meses mientras sollozaba.

El dolor insoportable la hizo caer de rodillas frente a su amante, quien la sostuvo lo mejor que pudo entre sus brazos, viendo la carta que dejó caer, pero antes de que pudiera agarrarla para leer qué la había puesto en este estado, varias doncellas entraron preocupadas por el alboroto.

-¿Qué sucedió, mi señora?-preguntó una de ellas, atreviéndose a acercarse lo suficiente como para dejar el cuerpo de la joven entre el suyo y el de la princesa.

Helaena al ver el estado de Relaella y como esta no podía concentrarse en nada más que su dolor, metió la mano debajo de su vestido, sintiendo el líquido caliente que bajaba por las piernas de su amada.

-¡TRAIGAN A LOS MAESTRES, RÁPIDO!-ordenó mientras la tomaba junto con la doncella y la dejaban en la cama.

(...)

Cinco horas habían pasado desde que Relaella entró en trabajo de parto, recobrando el sentido de orientación una vez que los maestres intentaron ayudarla con su bebé, alejándolos de ella, diciendo que lo haría sola.

Y tal como lo había dicho, lo había hecho. Los gritos de dolor y angustia ponían nerviosa a Helaena, quien deseaba estar a su lado como lo había estado para ella cuando sus gemelos nacieron, pero comprendía que la situación no era la misma. Todas las palabras de aliento que recibió en ese momento estaban destinadas a un final más dulce que este.

-Mi señora, permita que la ayudemos. O al menos dejé que la princesa Helaena se acerque-suplicó una de las doncellas.

-¡No!-un gruñido gangoso había salido de lo profundo de su garganta, tomando coraje para pujar una última vez más, acurrucada entre la cama y el mueble junto a esta.

Sintiendo a su bebé salir de ella, colocó sus manos debajo de lo que sintió era su cabeza y lo tomó para acunarlo en su pecho. Su piel era escamosa, y su cabeza era más grande que su cuerpo, sin mencionar su falta de nariz; la vista rompió el corazón de Relaella por segunda vez. Su pobre bebé, ¿qué mal había hecho?

La princesa miró a la mujer que amaba, extendiendo una de sus manos hacia ella, permitiendo que se acerque. Helaena, rápidamente tomó la manta que le extendía una de las muchachas y fue a su lado, no sin antes ordenar que salgan de la habitación. Una vez que llego a su lado, ambas envolvieron a la niña, quien aún no había sido separada del todo de su madre.

-No me abandones, te lo suplico. No podría tolerar otra pérdida-lloró en su pecho mientras miraba a su bebé.

-Nunca podría dejarte, amor mío-susurro en su cabello, dejando un beso y abrazando su cuerpo, sin importarle manchar su vestido con sangre y sudor.

-No pensé en un nombre para ella-mencionó tomando la manito del bebé, dejando pequeñas caricias en esta.

-¿Qué te parece Raelaena?

-Mjm. Raelaena Targaryen, primera en su nombre. Me gusta como suena-sonrió con melancolía.

El momento de consolación se cortó abruptamente por el sonido de las puertas de cuarto siendo abiertas de par en par, con el príncipe tuerto entrando por ellas preocupado por las noticias del parto de su esposa que le habían dicho ni bien bajó de Vhagar.

Ser Arryk, quien le había tratado de impedir la entrada, apareció detrás de él con el labio roto, mirando con pena la situación que se desarrollaba frente a él.

-Lo siento, su majestad. Intenté que no entrara

-Está bien, Ser-la princesa Helaena le sonrió desde su lugar-Aemond, tu presencia no es requerida en este momento. Mi hermana tuvo que atravesar una situación muy traumática en tu ausencia, lo mejor que podrías hacer es irte. Por favor, Ser Arryk, saque a mi hermano de aquí y haga el favor de entregarle la carta que está sobre la mesa-dijo sin abandonar su lugar junto a la mujer.

Aemond sintió el escalofrío subir por su columna, las palabras de su amante tenían un tono que jamás había escuchado y sus ojos parecían transmitir un rencor que nunca creyó ver en Helaena.

Siendo empujado por el caballero de su esposa, tomó la carta que este ponía sobre su pecho y se dejó guiar hacia el exterior del cuarto.

-Lo escoltare a sus aposentos, príncipe. Su esposa pasará la noche con la princesa y sus hijos-le notificó el guardia.

Al llegar a sus aposentos, aún en estado de shock por el rechazo de su esposa y el odio en la mirada de Helaena, se sentó en el borde de la cama mientras se dedicaba a abrir la carta.

Él, siendo el amante de la bruja bastarda de la casa Strong, esperando un hijo de ella.

Aemond sabía que esas noticias fueron las causantes del parto prematuro de su esposa, Aemond sabía que sus errores, fueron los causantes de la pérdida de su bebé y la de sus preciosas Helaena y Relaella, quienes estaba seguro, no querrían volver a mirarlo.

[...]

Me puso feliz que alguien comentara en el capitulo de unholy. Así que aprovechando eso y que no actualice en un tiempo les traigo dos capítulos, tal vez uno más si tengo otra idea.

Les agradezco el apoyo y si quieren alguna temática puntual mientras no sea angst lo podría intentar hacer. Mis pobres bebés ya sufrieron demasiado en el canon como para agregarles más dolor acá.

Referente a este cap, pueden tomarlo como cierto o falsos, es decir, pueden pensar que son solo rumores o que Aemond si tuvo algo que ver con Alys; pero no va a ver segunda parte.