Jinx está pensando la forma más rápida de escapar antes de aquel chico diera un grito que avisara a los vigilantes de que ella esta aquí.
- No te voy a delatar, así que entra antes de que algún vigilante te vea.
Jinx dudo al principio pero no tuvo otra escapatoria. Se metió ella sola en la boca del lobo, mientras Viktor no sabia como conseguir la confianza de la joven que estaba empapada por la lluvia.
Se fue al baño y cogió una toalla para dárselo a Jinx.
- Sécate... aunque pensando mejor una toalla no sirve para mucho, si quieres puedes ducharte y te prestó ropa.
Jinx le miro confusa, ella sabía que algo quería de ella, y no pensó dos veces en preguntarle secamente y con frialdad, para que el chico notara su desconfianza.
- No, solo quiero ayudar a -. No pudo acabar porque Jinx le interrumpió.
- Deja de mentir, soy Jinx ¿O es que lo olvidas? -. Cogió la toalla, y se empezó a secar -. Soy la terrorista más buscada de todo Piltover ahora mismo, y no me protegerás por gusto así que dime lo que quieres... te lo daré y a cambio me mantienes en tu casa el tiempo que yo quiera.
A Viktor le sorprendió un poco la forma tan directa y fría con la que hablaba pero entendía su postura, si estuviera en su lugar tampoco confiaría.
- Te necesito -. Jinx dejo de secarse el cabello para mirarlo fijamente, pues el chico no se hizo entender muy bien con la ex terrorista -. Es decir... no sé cómo explicarlo sin sonar mal.
- Suéltalo, sea lo que sea que me digas no me sorprenderá... si mal no recuerdo tu también sabes como es criarse en Zaun.
El chico la miro con cierta angustia.
Claro que sabía como era criarse ahí, y agradece que pudiera salir de ahí... en su condición seguramente no hubiera podido sobrevivir en un mundo tan territorial, donde ganaba el más fuerte.
Miro a Jinx y dejo de mirarla como una criminal, la miro como lo que alguna vez él fue... un pequeño niño que trata de sobrevivir sin ayuda de los adultos.
- Quiero saber como funciona el shimmer en ti.
Jinx sonrió calmada.
- Vez -. Dijo con calma -. No es tan difícil de decir las verdaderas intensiones.
Camino hacía el baño de aquel apartamento siendo seguida por su dueño. Se miro en el espejo y pudo notar con más detalles el nuevo cambio de pelo... lo odiaba.
Sentía que no podía ser la Jinx de siempre sin sus típicas trenzas, la persona que veía en el espejo no era ella, o al menos no se identificaba con aquella imagen.
"¿Quién eres tú?"
Se preguntó mentalmente, sin poder responderse o ser respondida por un tercero. Con pelo largo o corto para los demás séguira siendo Jinx, incluso si un día apareciera con la piel completamente bronceada o con una peluca de un color completamente distinto, para todo el mundo será la misma de siempre.
Salvo para ella, sentía que Jinx se estaba muriendo delante de ella, y ahora no sabia quien era.
Quizás la versión Jinx que ella conocía murió el día que mato a su padre, pero a quien no le afectaría la personalidad un situación así. Solo que ella no quiere aceptar que ese día se rompió con más fuerza.
- Te ayudare -. Dijo mientras dejaba su reflejo atrás cuando salía del baño -. Puedes experimentar en mí todo lo que quieras, seré una mascota muy obediente -. Dijo eso con una enorme sonrisa mientras que no era consciente, que sus ojos rosas brillaban con fuerza.
Esto provoco dos emociones en Viktor, la primera fue miedo por que sabe perfectamente de lo que es capaz de hacer Jinx y la segunda es culpa por pensar que la utilizara solo para su propio egoísmo de querer ser 'normal'... ¿Pero quién lo es?
- Pero -. Dijo mientras se acercaba a Viktor -. Con una condición, quiero que después de todos tus experimentos me ayudes a escapar de esta ciudad.
- ¿A dónde quieres ir? -. Preguntó con un pequeño susurro.
- A un lugar muy, muy lejos de aquí -. Se alejo y empezó a dar vueltas sobre sí misma -. A un lugar donde pueda vivir una vida pacifica, sin guerras, sin caos, sin políticas, sin pensar si sobreviviré esta noche, sin pensar si podré comer hoy.
Dejo de girar y miro fijamente a los ojos de Viktor.
El tiempo se detuvo y aunque ninguno de los dos lo notara, no se veían como dos adultos teniendo un acuerdo, sino como dos niños de Zaun que quieren vivir.
- Quiero poder ser yo, en alguna pequeña casa muy lejos de aquí.
Viktor entendió su deseo, él sabe todas las veces que la pidió y como el día que le iban a llevar a Piltover sintió que su deseo era cumplido. Sabe que ella pide el mismo deseo, y que no lo conseguirá aquí.
- Lo haré -. Dijo mientras sacaba el meñique -. Yo Viktor, prometo ayudarte a vivir una vida en paz muy, muy lejos de aquí.
Jinx instintivamente saco su meñique y lo enlazo.
Por un momento cortó, pero que para ellos fue eterno se sintieron como dos niños prometiéndose ayudar a cada uno con sus travesuras, como si tan solo volvieran a tener esa inocencia.
Y aunque no lo dijeran en alto se hicieron otra promesa silenciosa pero que entendían perfectamente con solo mirarse.
Se iban a proteger entre ellos, iban hacer esa anhelada protección que pidieron cuando eran niño, es cierto que lo consiguieron, pero ahora que son adultos quieren volver a tener la protección de alguien... ambos se sienten solo y necesitan saber que al menos alguien en este mundo les ayudara con sus ideas locas... otra vez.
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Estoy cansada [TERMINADO]
Fanfiction- Matame. - No puedo matarte hasta que pase dos meses jinx, pero créeme lo haré con gusto. - Eso espero, será lo ultimo que pueda pedirte ekko -------------------------- - ¿Por qué quieres morir? - Simplemente estoy cansada