Psicosis ✔️

THREE

Sasuke había ido a revisar si Sakura había despertado, pero aún estaba dormida. Salió y bajo para ir al gym y ejercitarse un poco.

Escuchó unos ruidos. Entonces sonrió. Su pelirrosa había despertado. Camino hasta donde escuchó el ruido. Y la vio tratando de abrir la puerta ventana del jardín trasero.

Después de saludarla ella quedó estática. Sonrió ladino y se acercó a su pelirrosa. Era tan hermosa. Sus bellos ojos esmeralda hacían constaste con su color de cabello.

- Mi bella Cerezo te traje nuestro hogar - dijo tomando su mano y dándole un beso en los nudillos - Tú nuevo hogar -

- Yo... - ella trato de hablar o pensar en algo inteligente - ¿Por que estoy aquí? Mis padres deben estar buscándome, mis amigos también lo estarán -

- No - dijo sonriendo - Nadie pensará que fuisteis raptada - llevó su mano a la mejilla de la pelirrosa - Cerezo estas atrapada conmigo - acercó su cara más a la de ella - Todos creerán que te fuisteis. Y debido a como son tus padres. No crearán nada malo. Solo que quisiste escapar de tu monótona y solitaria vida - terminó de decir.

Llevó su brazo a la cintura de ella y la atrajo a él. Llevó la mano hasta la nuca de ella y la beso. Fue un beso demandante que ella no correspondió por el shock.

Él mordió el labio inferior de ella. La pelirrosa gimió y él introdujo su lengua para profundizar el beso. El fue bajando su mano hasta el trasero de ella y lo comenzó a masajear.

Sakura abrió los ojos. Pero no podía separarse de él. La tenía bien sujeta. Hasta que dejó de besarla para que ambos pudieran tomar aire.

Luego se colocó detrás de ella y la abrazó.

- Sabes Cerezo - le susurro al oído - Desde que te vi hace dos años me tienes loco - dijo besando el cuello de la chica.

Besaba el cuello de Sakura haciendo que ella jadeara. Llevó sus manos a los senos de ella y comenzó a masajearlos con las manos. Tensando los pezones de la pelirrosa.

Sakura gemía por las atenciones que le daba el pelinegro. No pensaba con tranquilidad. Su mente le decía que debía parar ahora. Pero su cuerpo reaccionaba a lo que él le hacía.

De un momento a otro él llevó una de sus manos a los pliegues de la vagina de ella y comenzó a masajear con sus dedos.

Ella no se había dado cuenta en el momento en que él la guiaba a una habitación. La manipulaba como una muñeca.

Tan distraída estaba por el orgasmo que explotó en ella que ya estaba tendida en la cama desnuda. Ella apenas se estaba recuperando cuando lo sintió que se posicionó arriba de ella. Y la beso nuevamente.

- Es..espera - trato de decir.

Pero él no la escuchaba. De una sola embestida se introdujo en ella y solo le dio unos segundos para que se recuperara de la intromisión cuando empezó a embestirla fuerte y duro.

- Oh Sakura ... - gimió - No sabes cuanto anhelaba esto - siguió embistiendo.

- Sa... - gimió la pelirrosa.

Él seguía embistiendo fuerte y rápido. Era doloroso y extrañamente placentero. Hasta que ella llegó al climax nuevamente seguido de él.

- Esto aún no termina Cerezo - le dijo al oído para luego voltearla bocabajo - Te lo dije - mordió su lóbulo y siguió susurrando a su oído - Te deseo desde hace dos años -

La embistió nuevamente tomó las caderas de ella con sus manos y comenzó las embestidas fuertes y rápidas.

- Estar dentro de ti es increíble Cerezo -

- Ahhh... - gimió. Era doloroso pero al mismo tiempo sentía placer.

Y así Sasuke continuó manipulando el cuerpo de Sakura como si fuera una muñeca de trapo. La dejó tan exhausta que se quedó dormida.

- Cerezo te portaste de maravilla - dijo besando su frente y tomándola con sus brazos para llevarla a su habitación. La misma en la que ella había despertado.

Entró a la habitación y la llevó al baño. Le lavo el cuerpo y luego la seco para dejarla en la cama desnuda.

Él volvió al baño y se bañó para bajar y hacer la comida. Ya que de tanto que hicieron no comieron nada.

Cuando había terminado de preparar todo él comió su comida. Miro su reloj y decidió subir la comida de Sakura probablemente ya estaría despierta.

Al llegar a la puerta escuchó un golpe duro. Entró rápido y la encontró en el suelo. Colocó la bandeja de comida en la mesita de noche y la tomó de los brazos y la colocó nuevamente en la cama.

- No deberías moverte -

- No puedo mover mis piernas. Están entumecidas -

- Por supuestos. Estuvimos haciéndolo bastante tiempo Cerezo - dijo con una sonrisa arrogante.

Sakura no dijo nada. No podía reclamar nada ella había dejado que él hiera lo que quería con ella. No lo detuvo y cuando le dijo que esperara, era para que lo tomara con calma.

Se sentía avergonzada de su comportamiento. A ella también le gustaba bastante él. Desde que lo había visto no dejaba de pensar en él.

- Debes comer - dijo acercando una cuchara a su boca. Ella iba a protestar pero algo le decía que no debía hacerlo enfadar.

Sakura se terminó de comer todo lo que ofreció el pelinegro. Y todo lo que le dio estaba delicioso.

- Buena chica - dijo levantándose - Descansa un poco. Vuelvo más tarde. Debo atender unos asuntos -

Ella lo vio salir del cuarto. Respiro hondo. Que debía hacer. No sabía donde estaba. Y para rematar no tenía ropa.

Más tarde en la noche él le había traído un batido nutritivo. Ella se lo tomó ante la atenta mirada de Sasuke.

El se quitó la ropa quedando desnudo y ella desvió la mirada sonrojada porque él no parecía molestarle su desnudez.

Se metió junto a ella en la cama y la abrazó por detrás en a abrazó fuerte manteniéndola bien sujeta en sus brazos. Por extraño que previa se sentía a gusto en los brazos de él.

Pronto fue relajando su cuerpo tensó y se quedó dormida acurrucada junto a Sasuke.