17. Laughing Jill

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"Domingo 26 de noviembre de 1989.

Cuatro y media de la tarde.

Hemos estado supervisando la escena del crimen por más de dos horas.

No hay ningún indicio violento, todo apunta a que Jacob Ward Alcott ha muerto por ahogamiento o, mejor dicho, falta de aire.

Jacob W. Alcott, aka Señor Ward: Hombre blanco de estatura media, edad muy avanzada (89 años). Origen inglés y...".

-¿Adam? ¿Estás ahí?

-Sí, voy- respondió el detective, guardando la libreta, la grabadora y el boli en su abrigo, levantándose de la taza del inodoro y abriéndole la puerta del servicio a su compañero.

-Y yo pensando que tardabas porque estabas cagando...- manifestó el agente Daniels, suspirando resignado.

Podía ser un tanto sorprendente, pero no era la primera vez que pasaba.

Uno estaba acostumbrado.

-¿Y cómo quieres sino que luego entregue el informe? ¿En blanco?- protestó el oficial al mando, saliendo del baño mientras que el otro se echaba a un lado.

-No, joder, pero te recuerdo que esto es un trabajo de tres y que también deberías participar en el caso. O al menos estar presente...- insistió su compañero, siguiendo al agente Wilson.

-Y lo estoy- defendió él -Solo que de vez en cuando necesito grabarlo todo, ¿sabes? Para tener las ideas más frescas.

-¿Y para eso necesitas irte al baño en medio de la investigación?

-Pienso mejor sentado en un váter.

-Lo que tú digas, jefe...

-No me llames así...

Los dos hombres con traje negro y placa llegaron a la sala de estar; la escena del crimen.

El equipo forense buscaba y diseccionaba cada posible pista que pudiese ser útil, bajo la supervisión del tercer y último detective en la antigua casa.

-¿Cómo van, Arthur?- comprobó el detective Daniels, parándose él y el que supervisaba la operación a su lado.

-Bien, supongo- afirmó indiferente y quiso saber, mirando a su compañero más alto -¿Dónde estabas? ¿En el baño otra vez?

-Sí.

-Por lo menos no tienes vergüenza para admitirlo...- comentó ligeramente cansado por la peculiar conducta de Adam.

-¿Qué es eso?- quiso saber de pronto Daniels, señalando unos folios que sostenía el que llevaba la parte de investigación.

-Son las fichas médicas del señor Ward. Y un poco de información que han conseguido sacar sobre su vida. Muy interesante, por cierto.

-¿Ah, sí?

-Fue soldado en las dos guerras mundiales, se vio obligado a abandonar Londres a los cuarenta junto a lo que quedaba de su familia y mudarse a USA. Aquí no dejó de interactuar con el ejercito y en 1972 finalmente pidió la jubilación.

-Wow...- murmuró Daniels fascinado.

-Madre mía con el abuelo inglés...- comentó Wilson igual de asombrado -¿Participó en las dos guerras y regresó intacto?

-Intacto no sé si es la palabra adecuada...- replicó indeciso el inspector Smith y añadió por lo bajo, ojeando las fichas y apuntes médicos -Aunque físicamente parece que sí.

-Aun así... Es impresionante- elogió cautivado el oficial Wilson -Este anciano contribuyó a nuestro país, a Los Aliados. Se merece que demos lo mejor de nosotros para resolver esto.

Creepypastas: Historias PasadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora