El camino a una vida normal

//Final 1/No los perdono//

Narra Izuku.

A quien engaño, es obvio que la decisión es no perdonarles, ellos se rieron de mi muerte, a pesar de que sigo vivo, hicieron de mi vida una decepción, me hicieron creer que no valía para nada, que solo era un estorbo para ellos, de seguro solo se están haciendo los puros, y aunque fueran verdaderas sus disculpas no lo valen, ya es muy tarde como para cambiar las cosas.

Y a todo esto, mejor regreso a casa, mañana le diré a ambos mi decisión, a fin de cuentas tanto Cinthya como Todoroki me ayudaron a ver ambos puntos, puede que a ella no le guste mi decisión pero a fin de cuentas es mía y de nadie más.

Una vez llegue a mi casa fui directo al baño, me duche de manera calmada sabiendo que tanto Mei como Melissa están dormidas en sus cuartos, con calma me pongo el pijama y me tiro en mi cama, para mi suerte al hacer contacto con aquel colchón tan suave hizo que quedara profundamente dormido.

A la mañana siguiente me desperté con algo de flojera, no tenía muchas ganas de salir de la cama, no sé muy bien el motivo, quizás es porque hoy es domingo, y no tengo nada que hacer, a no ser que hayan llegado pedidos de aquellos científicos e inventores falsos, lo cual no dudo, ya que son muy buenos para tener ideas, pero cuando les toca ejecutarlas son peor que niño de jardín escribiendo su nombre.

Tras media hora mirando el techo y decido de una vez levantarme, tome unas prendas limpias y fui directo al baño para ducharme, el agua fría me termino de despertar, fue un subidón de energía, con paciencia me lave el cuerpo, y al terminar ordene un poco el baño, no sé quién de las dos desordena más el lugar, pero da igual.

Sali del baño ya con la ropa puesta y lentamente me dirigí a la cocina a preparar el desayuno, me decidí por unos panqueques, y por lo menos para mí, un café cargado, mientras cocinaba iba revisando el móvil, donde note que solo me habían pedido un invento, eso me llamo la atención, pero de paso me dio alegría, no tengo mucho que hacer hoy, y claramente voy a aprovechar para juntarme con Todoroki y Cinthya, así se conocen y les digo mi decisión, estoy casi seguro que Todoroki me va a felicitar.

Cinthya por su lado, no sé cómo reaccionara, me preocupa que no le agrade mucho mi decisión, o que se enoje y me haga un alboroto, espero y no pase eso, o que me deje de hablar solo por eso, aunque no creo que sea tan infantil, siento que es de las más maduras de su grupo de amigos, por lo que me imagino que no se lo tomara personal ¿Cierto?

Agh, mejor dejo de pensar tanto en eso, que seguramente todo saldrá bien.

Con mi mente más calmada tome el desayuno, lo saboreé y la verdad me encanto el resultado, si se termina el negocio de los inventos puedo meterme a chef, no creo que me vaya muy mal.

- ¿Que huele tan bien? - 

Escuche la voz de Mei a mis espaldas, se le nota en su voz el sueño que tiene, seguramente se quedó despierta jugando videojuegos, o más seguramente se quedó haciendo "bebes" toda la noche.

Con calma me di la vuelta para responderle, ella despertó al escuchar el desayuno, seguramente tenía un antojo por comer panqueques, con una sonrisa le serví su plato, y de paso un café, mire si de casualidad Melissa venia igualmente, para mi suerte si, su puerta lentamente se abría, le prepare también su plato, y a ella le serví un té, es su bebestible favorito en el desayuno.

Todos estábamos sentados hablando mientras comíamos, me alegra como ambas cuentan sus anécdotas con una sonrisa, dejaron atrás todo su pasado para ser felices, ser libres, y hoy yo también seré libre, por fin me sacare este peso enorme que tenía sobre mis hombros y viviré al vida que tanto me eh merecido.

Luego de media hora terminamos de comer yo lave la loza como era costumbre, mientras Mei y Melissa se dedicaron a ordenar el comedor y alistarse para hacer su rutina diaria, cosa que igual debería de hacer yo, simplemente terminar esa solicitud y organizarme con Cinthya y Todoroki para juntarnos, creo que será una buena idea juntarnos en la plaza cerca del hospital.