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LA MUERTE DE GEORGE O'MALLEY AFECTO ENORMEMENTE A TODOS LOS QUE TRABAJABAN EN EL SEATTLE GRACE; nadie podría haber predicho los perjuicios para el espíritu y el estado de ánimo durante las semanas posteriores. Para Natalia, puso las cosas en perspectiva en el momento en que perdió a su mejor amigo.
Jack Stewart Hemingway y Elliot Johnny Hemingway, su padre y hermano biológicos respectivamente, según se enteró por un documento que recibió horas antes de la trágica noticia, vivían en una pintoresca casa en Maine donde su padre pescaba y su hermano estudiaba para convertirse en un cirujano cardiotorácico.
Ella no quería ir, sintiendo que era extraño lograr lo que hubiera sido un sueño suyo, encontrar a su familia biológica para arreglar el sentido perdido dentro de ella, pero con el convencimiento de Mark, o más bien, su insistencia para que ella los visitara, la hizo finalmente romperse e ir.
Su madre, como descubrió, conspiró en secreto para dar a Natalia en adopción sin aconsejar a su esposo, y una vez que lo hizo, murió pocas horas después del parto. Según el departamento de personal en ese momento, su madre biológica estaba muy resentida por sus acciones, pero continuó consolándose con la idea de que estaba bien: resultó que la familia era pobre y no podía pagar los gastos de tener otro hijo.
A pesar del estado de ánimo sombrío que llenó la casa después de recordarle ese evento a Natalia, el estado de ánimo rápidamente cambió a alegría cuando los hermanos biológicos se unieron con su amor por la cirugía y los juegos de mesa, lo que deleitó a su padre.
En su tiempo allí, se enteró del pasado de su padre y su reclutamiento temprano para el ejército, ayudando a los soldados heridos y su pelea con el shock de batalla, la fatiga de combate, la neurosis de guerra, todo más conocido como trastorno de estrés postraumático.
Aunque no fue a la guerra, Elliot se abrió a sus terrores nocturnos que solían atormentar su mente después de la muerte de su madre. Él era relativamente joven, solo tenía siete años cuando la muerte de su madre y la partida de su hermana pequeña lo golpeó fuertemente, pero de cualquier manera, perseveró y ahora disfruta de los hermosos sueños que crea su mente, un maravilloso escape de las duras realidades que ofrece el mundo.
