Kisaki

1K 34 0
                                    

-¡Dios, Kisaki, el no significa nada! - gritaba desde el baño mientras el mantenía sus puños en aquella puerta de madera.

-Y si asi es ¿Por qué mierda te escondes de mi Yuri?

-¡¿por qué?! ¿En verdad me lo preguntas? Por qué eres un maldito celoso y te tengo miedo Kisaki, solo gritas y no dejas hablar.

-¿Miedo? ¿De que hablas? - su voz había cambiado y hubo por primera vez en media hora un silencio.

-De que.... Me golpees... Dios Kisaki sabes perfectamente que no me gustan tus escenas de celos, tu solo....

- Yuri abre la puerta... Por favor. - quite el seguro de aquella puerta y la abrí despacio con un poco de miedo.

-No vuelvas a decir ni creer que yo te golpearía, se que puedo ser un idiota pero no soy ese tipo de idiota. - tomo mi mejilla y limpio mi lágrima. - No me gusta verte llorar.

-Yo...- sentía como mi corazón daba un vuelco y aparte de inmediato mi rostro, el solo observo con confusion- Perdón Kisaki pero.... Necesito una distancia contigo.

-¿Perdona?

-Necesito alejarme de ti un tiempo.... Estoy confundiendo mis sentimientos....

-¿Tu estás enamorada de mi?

-Eso creo, pero es que tú me confundes, escucha, desde que me rescatarte de aquel burdel me he convertido en tu protegida, en tu sombra y te tengo tanto agradecimiento pero desde ese día que nos acostamos por la borrachera no se que me está pasando, te veo y mi corazón se estremece y ahora con tus "celos" yo sé que no lo son, que solo quieres protegerme de no caer de nuevo con hombres que me dañen, además se que tu no me amas, ni nada parecido.... Tu amas a Hinata pero yo....- No pude hablar más ya que el me tomo entre sus brazos y me atrajo hacia el para besarme.

-No se te ocurra alejarte de mi- murmuro mirándome a los ojos para nuevamente besarme, tomaba de mi cadera y una de sus manos acariciaba mi mejilla, el beso era lento no entendía que pasaba ¿el correspondía? No, lo más probable era que solo lo hacía por lastima pero aunque sea por eso yo lo aceptaba, mis manos se posaron alrededor de su cuello, mientras que nuestras bocas se necesitaban más la una de la otra.

-Kisaki- murmuré su nombre a lo cual el solo se separó un poco. - No me importa si solo me ves como un juguete mientras pueda estar a tu lado yo lo acepto...- el solo nego.

-Intentemoslo, sería un idiota si no lo hiciera, no sé que ha pasado conmigo pero te quiero Yuri - Sonreí al escucharlo, el me tomo y me beso en los labios con delicadeza. -¿Podriamos.... Hacerlo?- decía mientras sus ojos grises se posaban en los míos. - Entiendo si dices que no.

-Si... Si quiero, quiero ser tuya ahora que ambos estamos sobrios- sonreí al igual que el, me tomo de la cintura y me empezó a besar con tanta dulzura que mi cuerpo se fue soltando para disfrutar el momento, mis labios se unían a los suyos con una calma tan delicada que lentamente se transformaba en necesidad de sentir más de el, de saber que más me podría ofrecer.

-Ven aqui- murmuro antes de levantarme en sus brazos llevandome a la cama que estaba a pocos metros del baño, mientras me llevaba lo besaba en las mejillas y el cuello escuchando como gruñía y jadeaba en voz baja, su aroma me inundaba y sus manos tocaban mis piernas con desdén, me coloco en la cama mientras el se quitaba la corbata y la camisa color beige.

- No entiendo por qué estoy tan nerviosa rei un poco mientras sentia mis mejillas calientes y como no hacerlo si delante mío estaba Kisaki solo en boxer gateando entre mis piernas, podía ver esa espalda tan fuerte y firme, sentía sus manos por mis muslos.

-Si te arrepientes dimelo- sus labios se plasmaron en mi muslo derecho a lo cual yo solo suspiré y negué.

-¿Arrepentirme de ti? Jamás

- Eso quería escuchar- susurro mientras sus dedos se deslizaban por el inicio de mi Short negro y después los bajaba junto con mis bragas, alce mi cadera para facilitar la salida, me sentía vulnerable pero no con miedo al que pasará, si no que impaciente al por venir. - Dios es tan linda, tu eres tan linda - murmuró viendo mi intimidad mientras pasaba delineadola con un dedo mi entrada, mis suspiros eran bajos y pesados.

-Mmmm Kisaki.... Aaaah - murmuré gimiendo al sentir dos dedos dentro de mi los cuales ya estaban más húmedos por mi interior.

-¿Esto provocó en ti?- yo asentí sin palabras las cuales no me salían - Te estás desbordando cariño, supongo que debo hacerme responsable- murmuró para después sentir su lengua pasando con desde desde el clítoris hasta mi entrada, sintiendo sus manos estrujar mis muslos. Aunque no era ni virgen ni mucho menos tenía poca experiencia podía decir que este era uno de los mejores órales que alguien me había hecho. Su lengua no era dura ni mucho menos, era suave dónde tenía que serlo, era ágil y rápida, mi cadera se arqueba al sentír tanto placer recorrerme, mi vista pegada a su cabello, una vista muy excitante, no pude aguantarme y tome de su cabello masajeadolo y cuando sentía placer jalaba solo un poco a lo cual el alzó la mirada sin dejar de hacer su trabajo, sus manos separaban mis piernas las cuales temblaban y movían sin querer. Dios, su mirada me hacía sentir más caliente de lo usual, esa vista, lo que sentía al ser probada, su aliento y respiración pegando en esa zona tan sencible. Observé cómo sus dedos acariciaban y subían por mis muslos para detenerse en el armazón de sus lentes.

-No.... No te lo quites- murmuré mientras tocaba sus dedos a lo cual el se separó un poco.

-Pero... A nadie le gusta esto ¿Sabes?

-¿A quien no le gustaría un chico sexy con lentes y esa mirada? A mí me fascina - dije para terminar arqueando la espalda al sentir como chupaba mi intimidad con más rapidez, mierda.... Mierda....mierda esto era el maldito paraíso mis oídos vibraban y mi mente colapsaba- Ki...Kisaki hazme de una vez tuya

-Lo que digas - El paro y se acomodo, su cuerpo bien trabajado, mirada lasiva y sus manos tocando mis pechos hacian que mis gemidos se intensificarán- Amo verte así, deseosa de mi, ver tu cara toda roja, tu pecho subiendo y bajando por tu respiración agitada mientras que tú intimidad brilla por lo húmeda que está. Te haré mia, solo mía cariño- yo asentí sin decir palabra, abrí más mis piernas y baje mi mano hasta los labios de mi vagina abriéndolos, sabía lo obsceno que se veía pero no me importaba.

- Ya lo soy, soy tuya desde hace cinco meses, desde el día que te conocí y me salvaste en aquel bar. Kisaki te amo.- el sonrió y sin más acomodo su miembro en la entrada de mi intimidad para después entrar en ella.

-Yuri..... Joder - murmuro mientras que yo solo pude abrazarlo por la espalda, su cuerpo sobre el mío, su olor en el aire y la sensación recorriendo toda mi piel, era mágico. Sus embestidas eran rápidas, profundas pero sin ser grotescas o dolorosas, sus labios se apoderaron de los míos mientras que mis piernas se enrollaban en sus caderas, sentía cada sensación, sus gemidos chocando en mi oído y sus manos acariciando mi cabello hacian que mis caderas igual se movieran al mismo ritmo frenético que el de el, su sudor cayendo por mi cuerpo, sus labios navegando mi cuello y hombros mientras escuchaba sus gemidos hacian que mi mente divagara.

-Kisa....Kisaki mmmm- genia al sentir que estaba a punto de llegar al orgasmo.

-¿Quieres montarte?- susurro a lo cual yo asentí, dimos un giro rápido sin despegar nuestras intimidades y empecé a cabalgar sobre el. La sensación de llevar las riendas hacia que mi mente explotará, saltaba rápidamente incrustandome el gran miembro de Kisaki mientras sus dedos se enterraban en mis glúteos. Pronto llegaría al orgasmo, mis caderas se movían más y más rápido mientras que mi mente se nublaba y no podía pensar algo más.- Me vengo ... - susurro empezando ahora el a moverse.

-Si, si.... Aaaa Kisaki- sentí como me liberaba y como su descarga se mezclaba con la mía.

.....

Ambos estábamos acostados en la cama mientras el solo me veía y sonreía.

- Te cuidare pase lo que pase y tu, serás mi talón de Aquiles.

Tokyo revengers: LemonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora