La visita escolar de Máximo.

Cap. 3

El besó duro unos segundos. Luego se alejó, y me dijo que me veía como un chico simpático y agradable. Que durante estos meses de escuela, pocos chicos se atrevían a conversar con ella y más aún, intentar establecer más que una amistad.

Le dije que también me parecía alguien bonita pero no iba a intentar nada con ella porque recién nos estábamos conociendo.

P: ¿Te gusto? /colocó su mochila a un lado y se sentó más cerca a mi/

Ese momento fue crucial, sentí que podía crear el paraíso o el infierno con una sola palabra. Así que, aunque no estaba seguro, respondí con firmeza.

M: Eres una chica muy linda.

P: Aquí nadie nos ve. 

M: Sí, tienes razón. ¿Por qué lo pregun...?/se inclinó hacia adelante y me volvió a besar/

Era la primera vez que besaba a alguien, no sabía si lo estaba haciendo bien o no, solo me dejé llevar. Al terminar de besarnos, terminamos transpirando un poco por el calor que hacía. Además, me dio un poco de vergüenza que al separarnos, Patricia viera que estaba teniendo una erección después del beso.

Ella no se sorprendió, solo se rio un poco. Mientras  ella limpiaba sus lentes porque se habían empañado, yo solo esperaba que la erección termine. Le dije que ya había pasado un buen tiempo desde que llegamos al parque, de seguro ya están juntando a todos los alumnos para volver.

Mientras caminábamos de regreso, sentí curiosidad y le pregunté a Patricia.

M: Patricia, ¿El beso que nos dimos significa algo? Es decir, que somos enamorados o algo.

P: No, aún no. Bueno, no estoy segura.

M: Sí, tranqui. Estamos en las mismas.

P: No sé expresarlo con palabras. Solo sentí que debí besarte.

M: Bueno, para ser mi primer beso, me gustó.

P: A mí igual.

Al llegar a la entrada del parque todos se estaban reuniendo para retornar al colegio. Nos colocamos en pareja, abordamos el autobús y durante todo el camino no intercambiamos palabras. Solo escuchamos música.

Ya estaba atardeciendo y eso se apreciaba por la ventanilla. Patricia disfrutaba de las vistas y yo también. Muchos compañeros estaban algo cansados por lo que no era sorpresa ver a uno que otro cabeceando. 

Nuestras miradas estaban hacia la ventanilla pero comencé a sentir unas caricias en mi antebrazo. Al ver que era su mano, la sujeté con delicadeza, nos tomamos de la mano. Yo vigilaba que el resto de compañeros no nos viera por si se percataban que algo sucedía entre ella y yo.

Así estuvimos varios minutos. Luego volteó a verme y nos miramos fijamente. Solo nos sonreímos. Admito, que teníamos que secarnos las palmas de las manos en ciertos momentos porque nos sudaban. Esto no arruinaba el momento, se nos hacía muy gracioso y volvíamos a tomarnos de las manos.

Cuando llegamos al colegio, me despedí de Patricia y el resto de mis compañeros. Separarnos fue doloroso, no lo pude comparar con alguna experiencia similar porque era la primera vez que me pasaba. Solo caminé hasta mi casa pensando en todo lo que había sucedido hoy.

Con lo poco de batería que me quedaba, revisé las fotos de mi galería. Aún no podía creer que había besado a alguien por lo que coloqué una música al azar para distraerme.

Al entrar en casa, mi mamá me preguntó sobre cómo me había ido en la visita y le resumí un poco de todo lo que habíamos hecho.

Además de contarle que había hecho una nueva amiga llamada Patricia. Que era alguien muy bonita, muy graciosa y que compartíamos gustos musicales. Mi mamá se alegró mucho por mi, y me preguntó si era bonita.

Mi mirada y mis gestos faciales me delataron. Nos reímos un buen rato. Luego de bañarme y haber dejado cargando mi celular. Recordé que no le pedí su número a Patricia para pasarle las fotos. Pensé, es una buena excusa para hablarle mañana en el colegio.

Esa noche, después de cenar, de alistar mis cosas de mañana, de despedirme de mis padres para irme a descansar. Me sentía diferente. Como si ese beso con Patricia fuera el comienzo de algo nuevo.

Traté de entender esa noche, cómo es que una persona puede abarcar tanto en la mente de uno. Y me preguntaba si ella también estaría de esa manera. Solo tenía la seguridad de algo, que quería volver a besar a Patricia.

-Fin.

P.D: Esta es una historia basada en uno de los muchos sueños que tengo, soy un joven lleno de mucha imaginación. Hasta la próxima.