¿Y si ... tuviéramos un hijo? [𝐁𝐢𝐥𝐥𝐃𝐢𝐩𝐩]

Día 5

Bill no quería hacer lo que planeaba hacer.

Sabía que las cosas no irían bien.
Pero también sabía que era necesario hacerlo.

Al escuchar el sonido de la puerta principal abrirse, Bill miró a Dipper. Entrando y quitándose la chaqueta para ponerla en la percha.

- Oye -dijo, - ¿Cómo te fue con tu trabajo?.

- Todo salió, bien supongo -Bill se encogió de hombros, - oye, ¿podemos hablar?.

- Estamos hablando ahora mismo.

- Lo digo en serio.

Finalmente al escuchar el tonó, Dipper echó un vistazo al demonio para ver que, de hecho, estaba hablando en serio. Y eso rara vez es algo bueno.

- Ok. ¿De que quieres hablar? -Dipper preguntó con cuidado. A lo que Bill se puso de pie, respiró hondo y miró directamente a Dipper.

- ¿Quieres tener hijos? -eso fue todo lo que preguntó Bill. Y fue suficiente para hacer que el estado de ánimo de Dipper se agriara inmediatamente.

- ¿Podemos por favor, no hablar esto ahora mismo? He tenido un día largo y ...

- Podemos hablar sobre esto mañana o dentro de una semana -interrumpió Bill, cruzando los brazos, -De cualquier manera, esta es una conversación que tenemos que tener. Así que bien podríamos tenerla ahora.

Dipper trató de robar su ira, pero con lo exhausto que estaba, un poco inundó su respuesta.

- Está bien. Yo quería hacer esto bien. Pero si esto es lo que quieres, entonces voy a ser brutalmente honesto. Debido a que no, Bill. No quiero tener hijos. Nunca voy a querer hijos y nunca voy a tenerlos. Así que por favor, deja esto. Ahora.

Pero Bill no parecía que estuviera listo para dejarlo. De hecho, su expresión angustiada dejó en claro que quería saber más.

- Pero ... ¿Pero por qué?

- ¿Importa?

- Realmente importa. Especialmente si vamos a solucionar esto ...

- ¡No hay nada que resolver! -Dipper exclamó, - No con esto. No hay compromisos que hacer, no hay un término medio que encontrar, y no hay vuelta atrás si quieres. Para convertirse en padre, está todo dentro o todo fuera.

- Bueno, ¿por qué nunca me dijiste nada?, ¿Por qué esperar hasta ahora, después de todo este tiempo después de decirte que quería tener hijos? ¿Por qué no decir algo tan pronto cómo lo mencioné?

- ¡Porque no quería arriesgarme a qué me dejaras por alguien que quiere tener hijos!

- Sabes que nunca haría eso.

- ¿En serio?

- Bueno, incluso entonces, ¿cómo es quedarte callado es una solución? -
preguntó Bill

- Por que pensé, esperaba que te rendirías después de unos años. Por ejemplo, como un día querías tener un tatuaje y, una semana después, decidiste no hacerlo una vez que comprendiste lo doloroso que sería eso.

- Los tatuajes y los niños son dos cosas diferentes, ¡y lo sabes! ¡Lo mismo con ser padre y ser dueño de una mascota! ¡Todavía no puedo creer que hayas intentado convencerme de que ese no es el caso!

- Si traté de convencerte. ¡Pero sólo por qué quería decepcionarte fácilmente en lugar de romper tu corazón!

- ¡Claramente no funcionó! ¡Todavía quiero tener hijos y mi corazón está muy cerca de romperse!

- ¡BIEN, ENTONCES POR QUÉ NO SÓLO VAS A CASARTE CON ALGUIEN MÁS! - gritó Dipper.

Esas palabras casi hicieron que Bill cayera sobre sí mismo.
Afortunadamente, todavía estaba de pie, pero su rostro estaba lleno de angustia.

'¡ARREGLA ESTO AHORA MISMO!' gritó una voz en la cabeza de Dipper. Pero estaba cansado y enojado. En cambio, se mantuvo firme.

- No quieres decir eso -, dijo Bill.

- Oh, pero lo hago.

'Cállate.' La voz habló de nuevo.

- Quieres algo que nunca te daré.

'Cállate.'

- Y no hay una solución para esto en el que permanecemos juntos y aún obtenemos lo que queremos.

'¡Dipper cállate!'

- La única solución es que encuentres a alguien que realmente puede dar LO QUE TÚ QUIERES.

'¡Deja de hablar!'

- Así que si tanto quieres tener hijos, ¡toma mi anillo y dáselo a otra persona!

Con cada frase, el corazón de Bill se rompía cada vez más. Después un tenso minuto de silencio, Bill, sin emociones como puede ser, se acercó al gancho de la llave para agarrar una llave de aspecto familiar. Luego activó un portal a su dimensión, abrió la puerta y miró a Dipper.

- Voy a pasar la noche en la casa de mis hermanos -, dijo Bill con un tono uniforme,
-Mientras me vaya quiero que pienses en lo vacía que va estar esa cama. Sí es lo que realmente quieres ...

Se detuvo para controlarse, pero no detuvo algunas lágrimas que se derramaron.

- Sí es eso lo que realmente quieres, - repitió Bill con una quebrada en la voz, - Entonces no haré nada para detenerte.

Con eso atravesó el portal y arrojó la llave detrás de ella. Dipper ni si quiera intentó atraparlo una vez que Bill se fue.

Cada grano del humano le dice que vaya tras el amor de su vida y se disculpe.

Pero Dipper estaba enojado.

Era irracional.

Y en lugar de hacer lo que tenía que hacer, subió las escaleras pisoteando y se fue a la cama.