PARTE 10

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El interés que por Jimin siente, crecía en su pecho como si de un volcán de bicarbonato se tratara.

Sus sueños se lo confirman.

Duele como si el infierno quemara sus pies cada mañana que se despertaba y se daba cuenta de que esos toques, esos besos, esas sonrisas hermosas que disfrutaba compartir con el omega, no eran más que una ilusión creada por su cerebro para amortiguar el deseo que por el omega sentía.

Ya no tenía en sus manos aquellas caderas notorias para cuando abría los ojos, mucho menos sentía el toque de sus labios dulces y suaves, los mismos que juraba eran reales hasta que la luz penteraba en sus cortinas y lo obligaban a abrir los ojos.

Entonces se propuso hacer cada uno de sus sueños realidad, buscar las manos de Jimin siempre que pueda, verlo cuantas veces el omega se lo permita y, por su puesto, buscar valor en donde no lo hay para acercarse, dejar claras sus intenciones, y besarlo.

No quería más que besarlo y tocar poco a poco las nubes entre la suavidad de los labios voluptuosos, rosas, brillantes de Jimin.

Esos mismos que veía con ganas de saltar y lamerlos en vez del omega, quien parecía hacerlo por nerviosismo cada ciertos minutos.

-¿Cómo te va el trabajo?-Jimin tuvo curiosidad y lo expresó, lo cual se sintió gratamente satisfactorio en el pecho del alfa.

-Me parece... lindo que te estés interesando en mí.-Confesó con voz baja, no pudiendo mirar las bellezas que decoraban todo el lugar si tenía a la criatura más hermosa sentada justo frente a él.

-Estoy siendo amable, igual que tú.-Bajó sus ojos a la taza de café que sostenía para calentar un poco sus manos.

-No estoy siendo amable, Jimin.-Dejó sus intenciones claras en cuanto acercó sus manos más de lo normal hacia la taza de Jimin.-Tú a mí me interesas, por eso estoy aquí.

Abrió sus manos sobre la mesa, justo al lado de las hermosas manos del omega, uñas las cuales ya no sólo estaban brillantes, sino que eran decoradas por puntitos rosas que llamaron la atención de Yoongi en cuanto lo vio entrar por la puerta de cristal rosa de la cafetería.

El omega lo pensó, jura que lo hizo, por lo que quiso rechazar la clara invitación del alfa para poner sus manos juntas sobre la mesa, sin embrago, su animal no le permitió si quiera apartar la mirada y le dio el empujón que requería para posar sus manos sobre las de Yoongi.

Subieron la mirada a la vez y el alfa borró su sonrisa en cuanto enfocó los ojos del pelirrojo.

-¿Quisieras... comer conmigo mañana?-El chico mordió sus labios negando con la cabeza.-Sé que estoy siendo insistente, pero no me gustó estar alejado de ti por tres días.

-No estás siendo insistente, estás siendo... lindo.-Pareció como si le doliera decirlo. Apartó sus manos para beber de su café.

-Entonces, ¿Me darías la oportunidad de verte de nuevo? Por favor.-Pidió de nuevo.-Poco a poco, no tienes que enseñarme tu acta de nacimiento hoy.

A Jimin se le escapó una suave risa, lo cual logró animar un poco a Yoongi.

-Te vas a arrepentir tanto...-Y al decirlo no supo si era más para sí mismo o para el alfa.

-No estoy seguro de eso, nunca me arrepentiría de estar contigo.-Paseó sus dedos por el antebrazo del pelirrojo hasta llegar nuevamente a su mano y acariciar sus dedos cálidos por el tacto de la taza caliente.

-No me conoces.-Replicó y el alfa sintió enojarse.

-Por eso es que quiero hacerlo.-Dijo un poco fuerte para el lugar en el que estaban.

Just Because I Love You| ʸᵐ| OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora