¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En el momento en el que Jennie le dijo que preparara una mochila con ropa y un peluche sabía que algo estaba ocurriendo, pero no era algo malo, era todo lo contrario.
Cuando la mayor llegó a casa, la minina corrió hacia la mayor abrazandola y dando saltitos de emoción en su lugar.
-Lili hoy iremos a ver a una amiga de mami, ella tiene una sorpresa para ti.
-¿Me tiene un regalo? -preguntó la minina curiosa sin quitar esa linda sonrisa que dejaba ver sus ojitos como medias lunas.
-Es algo parecido -dijo la mayor acariciando sus mechones sacándole un leve ronroneo.
Tomó la mano de Jennie y caminó junto hacia el auto, una vez con el cinturón colocando y abrazando su conejo de peluche comenzó el camino a casa de la amiga de su mami.
En el auto cantaba canciones que sonaban en el estéreo, sacándole una amplia sonrisa a la mayor, quien sonreía orgullosa al notar que su bebé tenía una voz muy bonita.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Nena hora de despertar -dijo Jennie moviendo a su bebé con cuidado para no asustarla.
Lisa abrió sus ojitos acostumbrandose a la luz, miro a Jennie y soltó un pequeño bostezo para después colocar un puchero, no le agradaba mucho ser despertado.
-Es hora de conocer a mi amiga, es hora de ver la sorpresa que guardó para ti -dijo sonriendo.
La minina se incorporó rápidamente y soltó su cinturón para bajar del auto, no sin antes tomar su conejo y su mochila.
Pasaron por un camino admirando el amplio jardín lleno de flores de varios colores, mariposas, arbustos y un pequeño estanque con peces. Era muy bonito.
Jennie tocó el timbre esperando que abriera la gran puerta frente a ella, poco después una joven chica con vestido negro y un delantal blanco le abrió la puerta con una sonrisa.
Lisa notó que su cabello era color avellana y sus ojos eran de un color claro, ella claramente no era de Corea pues sus ojos no eran rasgados igual con Lisa, y los de su mami si lo eran.