Perdida

Capítulo VI

Habían pasado unos días desde el incidente en la escuela de Grace, después de varias súplicas de ella y sus ojitos de gato con botas, convenció a Walter de estar unos días con nosotros en casa, si bien pasábamos la mayor parte de nuestro tiempo libre con ella no vivía con nosotros por seguridad, para Walter y para mí fue difícil tomar la decisión, pero ambos sabíamos que queríamos una vida normal para nuestra hija.

Sentí un pequeño peso en mi, abrí mis ojos lentamente cuando note a mi pequeña traviesa con sus piernas en mi abdomen y su cuerpo encima del pecho de Walter, Grace tenía la costumbre de pasarse a nuestra cama en medio de la noche.

-Tuvo pesadillas- escuche al pelinegro a mi lado, lo observe y aun sus ojos estaban cerrados.

Saque sus pies con mucho cuidado de no despertarla, aun era temprano, Walter abrió sus ojos y la tomó en sus brazos para acomodarla bien en la cama quedando al medio de ambos, acaricie su cabello observándola detenidamente, Grace era perfecta.

-Buenos dias- saludo Walter dándome un beso en la frente y luego a Grace.

-Buenos días- respondi con una sonrisa sin dejar de acariciar a mi angelito.

El reloj de la mesita marcaban las 8 a.m. del día sábado, cuando el timbre sonó.

-¿Esperas a alguien?- preguntó, cosa que negué rápidamente, se levantó despacio, se dirigio a la sala para ver de quien se trataba.

Minutos después volvió.

-Es tu padre- comentó -Pero no viene solo- sentí su molestia en la voz.

-¿Quién más vino?- pregunté.

-Es mejor que lo veas tu misma-.

Bese la cabeza de Grace y me levante para ir a ver que pasaba, Walter cerró la puerta suave y ambos bajamos a la sala, me sorprendí al ver a las 3 personas que acompañaban a mi padre.

-¿Qué hacen ellos aquí?- fue lo primero que dije molesta.

-Buenos días para ti también- contesto mi padre sarcásticamente.

-Sabes perfectamente que no me gustan las personas aqui- ignore su saludo -Menos cuando Grace esta aqui-.

Mi padre cambió su expresión, sabía perfectamente la razón por la cual estaba molesta, eran pocas las personas que sabían de la existencia de Grace, Walter se ganó a mi espalda cruzándose de brazos y observando a los 3 individuos sentados en mi sofá.

-Es importante- dijo mi padre -Necesito que se queden aquí unos dias- soltó sin más.

-¿Te golpeaste la cabeza o que te pasa?-

-Señor le dije que era mala idea- escuche a la rubia en un tono de mustia.

-Agente Carter este es el lugar más seguro para ustedes ahora- objeto el pirata -Hija es un favor personal.

Mire a Steve, Bucky y Carter sentados algo sucios y golpeados.

-Mami- escuche a mi pequeña, voltee a verla y venía bajando las escaleras restregandose los ojos.

-¿Tienes una hija?- pregunto Steve colocándose de pie para mira a Grace.

-Tenemos- explico Walter -Bebé ven aqui- la llamó a lo que ella camino rápido para treparse en su cuello -Ella es Grace Marshall- presentó.

-Hola abuelo- saludo mi hija con su mano.

-Hola pequeña ranita- se acercó mi padre a darle un beso a lo que Grace recibió gustosa.

-Papi- llamó-¿Por qué la mujer mala está aquí?- pregunto a lo que la sala quedó silencio y todos voltearon a ver a Carter.

-Mi vida vamos a cambiarte, para desayunar- dije para sacarla de ahí, voltee a ver a mi padre -Quédense y hablamos en el desayuno- indique para llevarme a mi hija a la habitación.