The glow of a firefly » Showki. MONSTA X

I feel you'll disappear to a far off place #5

El despertador sobresaltó tanto a Ki Hyun que le faltó poco para caerse de la cama. Le dolía la cabeza de lo poco y mal que había dormido, y apenas alcanzó a estirar el cuerpo para apagar el despertador, antes de dejarse caer sobre las sábanas, mirando al techo.

Fue solo un segundo de paz. Después recordó qué había pasado la noche anterior, y entró en pánico.

Se incorporó de golpe, comprobado que Hyun Woo no estaba allí.

¿Era... posible que hubiera soñado aquello? ¿Que Hyun Woo había llegado borracho y herido a su casa a las tantas de la madrugada, que le hubiera dicho que había besado a un chico? ¿Que...? Ki Hyun sintió las manos temblarle, y apretó los puños, despacio, haciendo un gran esfuerzo para respirar hondo. Que Hyun Woo le hubiera besado, que él hubiera correspondido, que se hubieran acostado.

Los músculos de su cuerpo se tensaron todos de golpe, se le secó la boca, empezó a sentir un sudor frío recorrerle la espalda y el pálpito de su corazón retumbar en sus oídos.

Repasó la habitación de arriba abajo con los ojos, sintiendo el resto del cuerpo lo suficientemente agarrotado como para ser incapaz de moverse. El cubo en el suelo, la botella de agua sin tapón casi vacía en la mesita de noche, un caramelo de eucalipto a su lado junto al envoltorio de otro, la camiseta que le había quitado a Hyun Woo en una silla.

Hyun Woo había estado allí, no lo había soñado, no había soñado ni una sola de las cosas que recordaba que habían sucedido. Pero Hyun Woo ya no estaba allí. Hyun Woo, que había llegado herido; que le había besado y le había tocado; que había llorado encima de él; que le había pedido que le cantara para dormir, no estaba.

Se levantó de la cama tan rápido como le permitieron sus piernas, y salió corriendo de la habitación sin importarle su mal aspecto. Tal vez Hyun Woo ya no podía dormir más y se había ido al salón, o había tenido que ir al baño. Tal vez seguía allí, aunque no estuviera en el dormitorio.

Entró en el comedor a toda prisa, y se encontró a Chang Kyun sentado en el suelo mirando la tele. Hyun Woo no parecía estar por ninguna parte.

Ki Hyun sintió que le fallaban las piernas. Trató de respirar hondo y forzar una sonrisa, y se acercó hasta donde estaba su hijo de cinco años.

-Buenos días, cariño -le dijo, sentándose a su lado y dándole un beso en la mejilla. Estaba intentando mantener el miedo y los nervios dentro de su cuerpo, pero no tenía ni la más mínima idea de si estaba funcionando-. ¿Has visto a Shownu hyung?

Chang Kyun asintió, con la vista todavía en la televisión.

-Pero ya se fue. Me encendió la tele y me hizo el desayuno y cuando terminé me dijo que se tenía que ir... y que te dijera que sentía lo de ayer por la noche. -Chang Kyun giró su cuerpecito sobre la alfombra para quedar sentado de frente a su padre-. ¿Qué pasó? Me dijiste que Shownu hyung vendría por la tarde pero luego me dijiste que no podía venir, pero estuvo aquí por la noche.

Ki Hyun respiró hondo.

-Estaba malito, por eso no pudo venir, pero más tarde se empezó a sentir peor y necesitaba que papá le diera unas medicinas, y luego le dije que se quedara. Pero vino muy muy tarde, tú ya estabas muuuuy dormido. Shownu hyung debe sentirlo porque debe pensar que molestó al venir tan tarde, pero Shownu hyung nunca molesta, ¿a qué no, gatito?

Chang Kyun se apresuró a sacudir la cabeza para decir que no.

-Shownu hyung puede venir cuando quiera -dijo, alzando los brazos en alto-, igual que Hyukie hyung y Hoho hyung.

Ki Hyun sonrió. Chang Kyun era el niño más bonito del mundo y él no se creía que le acabara de mentir a su hijo de forma tan descarada en la cara.